ULTIMA PARTE
La pantalla de la computadora mostraba un conteo regresivo: faltaban solo quince minutos para las 10:30. No habíamos anunciado la transmisión por precaución; esperábamos que la noticia se esparciera rápidamente. Jean y Maru estaban a mi lado, ajustando los últimos detalles mientras yo revisaba el guion una vez más.
—¿Lista? —preguntó Maru, colocándose a mi izquierda.
Lo que haría no era fácil, no después de saber toda la verdad. Por eso no quise estar sola. Jean se encargaría de la cámara y el audio; también había manipulado a Amelí para que estuviera al pendiente de mis redes. Como una de mis mas leales fans, sabia que ella correría la voz rápidamente.
Por otro lado, estaba Maru, hacía tiempo que ya no aparecía en pantalla con su personaje. Y esta vez lo haría, su presencia no era del todo relevante, sino más bien un apoyo emocional.
—Lo estoy —respondí, aunque la tensión en mi estómago sugería lo contrario.
Jean se acercó y puso una mano en mi hombro.
—Hemos repasado esto mil veces. Todo saldrá bien. —
Asentí, tratando de absorber su confianza.
—Sé que sí. Sólo... espero que Ricardo no se adelante. —
Los tres miramos el reloj una vez más. La última vez que hablé con Axel, sentí que algo en mí había cambiado. Ahora, tres días después, estaba lista para enfrentar cualquier cosa. Sin embargo, no había vuelto a recibir mensajes de él, lo que me inquietaba más de lo que quería admitir.
—Perfecto. Todo listo. — dijo Maru, verificando el audio una vez más.
—Si Amelí supiera que eres Maruy. No sé si te amaría mas de lo que odiaría — le dice Jean a Maru con burla aliviando el ambiente.
—Si bueno, solo espero decírselo antes de que lo descubra ella sola — responde Manuel.
—Ya llegará el momento — digo intentando consolarlo.
Nos sentamos frente a la cámara, las luces iluminando nuestros rostros. El tiempo parecía detenerse mientras esperábamos el momento exacto. Finalmente, el reloj marcó las 10:30.
—Ahora —dije con firmeza.
Jean activó la transmisión, y me dio una señal con la mano.
—Hola a todos —comencé, mirando directamente a la cámara. —Gracias por unirse a esta transmisión sorpresa. Sé que esto es inesperado, pero necesito compartir algo muy importante con ustedes. —
Respiré hondo, sintiendo la presencia de Jean y Maru a mi lado, su apoyo incondicional dándome fuerzas. El silencio era palpable, pero sabía que al otro lado de la pantalla, miles de personas estaban escuchando.
—Como sabrán, hablar sobre mi vida personal no es fácil para mí. Hay cosa que quiero mantener privadas y es por eso que no cuento mucho de mi vida o de quien soy detrás de la pantalla. Pero en estos momentos tengo que hacerlo —
Hice una pausa, viendo los números de espectadores subir rápidamente. Siento mi corazón latir y por un segundo me quedo callada, las palabras ensayadas se atascan en mi garganta. Todo a mi alrededor comienza a nublarse y nuevamente estoy paralizada. De pronto, la mano de Maru sobre la mía me hace reaccionar.
—En esta ocasión hablaremos de un tema serio. La verdad detrás de Julady — comienza a hablar Maru en mi lugar — Como sabrán aquellos que siguen a Julady desde sus inicios. Todo esto surgió tras un video de una chica cantando una canción en un piano, la cual terminaba rompiendo en llanto antes de terminar la melodía. Durante años la verdad detrás de ese suceso fue un misterio, el video fue eliminado y gracias a su comprensión; la identidad de esa chica se mantuvo en secreto, así como su historia. Hoy sabrán la verdad, o al menos la mayoría —
Maruy desvía su mirada de la cámara y me mira a mí, dándome ánimos para contar mi historia. Asiento agradecida por su ayuda, y por la confianza que me brinda. Dirijo mi mirada al frente, donde esta Jean. El me brinda una sonrisa tranquilizadora, y entonces siento paz.
—Les contaré un historia. Para alguno tal vez algo patética, pero para mí muy significativa. Una experiencia que marco un antes y un después. Esto no es fácil para mí, así que perdonen si en algún momento pierdo el control. Para evitar que mi identidad se comprometa y la de otras personas, me referiré a los demás involucrados como chico A y chica B. —
Comencé mi narración, evitando detalles irrelevantes para la historia. Le conté la versión que yo tenía, sobre todo. Por conveniencia, decidí omitir la verdad detrás de las acciones del chica A. se que Axel no fue el malo de la historia por completo, pero necesitaba que lo fuera si quería estar a salvo. Tenia la esperanza de que Ricardo desistiera si veía a su mina de oro acorralada. Es alguien que solo deja guiar por el dinero y fama, con suerte incluso beneficiaria a Axel si este renunciaba a ser su manager.
Con cada palabra que salía de mi boca, sentía como las lagrimas amenazaban por salir. Hubo momentos en que tuve que parar, respirar hondo y tranquilizarme. Me estaba salvando a mi misma, debía ser valiente.
Los comentario aumentaban a cada instante, así como el numero de vistas. Había personas que ni siquiera formaban parte de la comunidad, pero estaban interesadas en mi historia. Algunos comentario era de burla así mi persona, diciendo que era una exagerada. Pero la mayoría eran de apoyo y comprensión. También estaban y en gran número, los que quería saber la identidad del chica A y la chica B.
Respiré profundamente y continué.
—La razón por la que estoy compartiendo esto ahora es porque Chico A, después de muchos años, ha regresado. Ahora forma parte de la industria del entretenimiento, y descubrió mi identidad. Junto con su manager, intentaron manipularme para aprovecharse de mi fama. Mi identidad es algo muy preciado para mí, así que no tuve más remedio que contarlo. No pienso trabajar con esas personas, y si mi identidad llega a ser revelada, tengan por seguro que también sabrán quién es Chico A y Chica B, así como el manager detrás de todo esto. Confío en ustedes, en que si algo sale mal, tendré gente que me apoye. —