Suspire mientras recordaba nuestra niñez y en ese momento Rebeca chasquea los dedos y me despierda de mi pequeña ensoñación.
-Narnia llamando a Zacarías... -decia ella mientras pasaba de arriba a abajo su mano frente a mi cara-.
Sacudi mi cabeza para analizar un poco más rápido mis ideas... ¿era mi imaginación o ella dijo en serio que estabamos en narnia?
- ¿que hablas de mi narnia? Normas imundas-le seguí él juego y una sonrisa se extendio en la comisura de sus labios, tan sonrosados y carnosos que a veces me perdia en ellos-.
Ella ya habia crecido, igual que yo, ya teniamos diecisiete años pero no había cambiado mucho nuestra amistad.
Ella era un chica con tez blanca, ojos marrones oscuros que siempre les acompañaban una ojeras un poco invisibles, su cabello era marrón tan oscuro como el negro y aunque en las fotos se veia negro; a la luz del sol se le mostraba marron tan claro como la arena de la playa bajo las suaves olas del mar, ella usaba lentes y siempre se las arreglaba para usar una sudadera y una capucha tapando su cara, al principio creí que era porque no quería que nadie supiera que era mi amiga pero un día confesó que tenia tan baja autoestima que para si misma era necesario llevar la capucha para sentirse bien, sentirse ella, tantos años de amistad... y aun la odio desde aquel día en que conoció a Jack.
Jack... tiene tantos nombres, le llaman mal, odio, rencor, pero también: mal psicológico, pesadilla viviente, ser maligno, y mucho más, hay que entender que nunca lo he conocido suficientemente bien como para hablar tan bien de el como hace Rebeca, ella siempre me habla de el como si se le fuera el mundo en ello, si he hablado con el pero no siempre estamos al mismo tiempo, a veces creo que me respondo a mi mismo fingiendo que habló con él.
Yo... pues yo... yo soy muy tímido a mi manera, no hablo con alguien que no sea mi madre, mi padre o Rebeca, todo obviamente por Jack pues siempre se le ocurre salir cuando ve a alguien nuevo algo que me fastidia continuamente, pero Rebeca siempre se las arregla en los trabajos de clase para estar en mi grupo y o hablar por mi si es necesario pues por alguna razón siempre sabé lo que yo diré antes de decirlo.
Es tan buena amiga que hasta a veces pienso que no la merezco pero aun así odio cuando me trata de niño pequeño.
Mi cabello es color castaño, mis ojos son de color ámbar y como dice Rebeca "están llenos de misterios sin explicación", mi tez es blanca y siempre llevo un gorro en mi cabeza por dos razones ; una es que me calienta la cabeza y dos porque así Rebeca sabe que soy Zacarías, mi nombre es Zacarías Maldonado y las unicas personas en mi vida son mi familia y mi amiga.
Ya veras que mi vida no es fácil ni favorable, existe una persona más dentro de mi cabeza que se llama a si mismo Jack Anstron (Anstron es mi segundo apellido) por como lo describen es amable, cordial, está loco, es despistado, más fuerte que yo y su forma de ser es completamente incomparable a la mía... tal vez porque como dice ella, cuando te conoce te enamora, que tiene un encantó que la vuelve loca, que siempre a querido saber como sabe un beso suyo. En retrospectiva él llega y es como si Zacarías no estuviera en el mismo cuerpo de él, como si la llegada de el cambiara hasta mi propio propio código de ADN y así lo hace.
#39763 en Novela romántica
#26019 en Otros
#2174 en No ficción
trastorno, amor amiga, amistad amor asesinato cementerio confianza d
Editado: 15.09.2019