Capitulo 4: Miedo.

Me encontraba paralizado aun en el mismo lugar, después de que este curioso personaje apareciera de la nada y me salvara, su sonrisa que desprendía seguridad, me hizo sentirme un poco más seguro y entonces me coloque en una pose de combate, el conductor del barco, chasqueo los dedos y enseguida los sujetos que tenían espada saltaron al ataque, con la intención de derrotarnos, yo me preocupe bastante, por qué realmente no había mucho que pudiera hacer contra una espada, el dolor que tenia en mi hombro izquierdo, se hizo por un momento más fuerte, y caí de rodillas al suelo, aun así, el hombre del sombrero, con un movimiento de manos, como si manipulara el mar, un chorro de agua salio del mar y saco volando a los espadachines, fuera del puente, dejándoles fuera de combate con bastante facilidad, eso me monstruo la brecha de poder que existía entre yo ese sujeto, ¿realmente hubiera sido capaz de derrotarlos?

Cuando me dispuse a ponerme de píe, el conductor del barco se puso de píe y prácticamente apareció así sin más detrás de mi

—Intenta ponerte de píe y te vuelo los sesos— dijo el hombre que hace unos segundos estaba en el barco, de pie detrás de mi, y apuntándome con su pequeña pistola a la cabeza, un sentimiento, un pensamiento llego a mi cabeza “voy a morir”, eso es lo que mi corazón sentía “Todo terminara aquí, y yo, no podre hacer más” de mis ojos empezaron a caer lagrimas “Megumi… me recordara si muero aquí, Megumi… ¿Se pondrá triste si muero aquí?” “¿Este viaje habrá servido de algo si muero aquí?” “¿Qué pasará después de morir?” Todos esos pensamientos dentro de mi terminaron en la duda de “¿Importa de algo mi vida, si de todos modos moriré?” estaba tan perdido en mis pensamientos que estaba ignorando por completo lo que pasaba a mi al rededor, simplemente sentía ese temor inexplicable, ese temor a la muerte…

—Deja me presento… me llaman Poison Chord— dijo el hombre con gabardina, aun detrás de mi con la pistola apuntándome a la cabeza, mientras yo seguía en mi trance de pensamientos sobre la muerte, y lloraba por ello, el hombre de sombrero, sonrió y entonces también hablo —Entonces seria apropiado presentarme— Su sonrisa confiada comenzaba a tambalear, para convertirse en una sonrisa incomoda —Me llaman SuiRyu—

Ambos compartieron miradas, de inmediato y soltando el arma, Poison Chord salto en dirección de SuiRyu, con la intención de acabarlo a golpes, entonces el siniestro hombre apareció detrás del muchacho, le dio un golpe en las costillas sin que este fuera si quiera capaz de darse cuenta de que pasaba, y así una ráfaga de golpes caían sobre SuiRyu, que solo luchaba por mantenerse en píe e intentaba predecir al enemigo, pero le era casi imposible

— Jaja, vamos, lo haces muy fácil— la velocidad de sus golpes aumentaron y entonces tomo la decisión de dejar de bailar al rededor de el y quedarse en un solo lugar, hasta que entonces, cuando planeo dar un golpe con más fuerzas, tomo vuelo y antes de que el golpe conectara, una pared de agua apareció entre la cara de SuiRyu y el puño de Poison Chord —Jeje, ¿crees que nací ayer?— Exclamo el hombre con la cara golpeada y sangrando por la boca —Yo también tengo mis trucos—, el hombre siniestro aun tenia su puño en esa pared de agua, pero por algún motivo era incapaz de sacarlo, era como si el agua fuera concreto, entonces preocupado exclamo —¿QUÉ DEMONIOS HICISTE?—

SuiRyu con confianza le dijo sin titubear —Esa es mi bendición, manipulo el agua a voluntad, no solo la puedo mover a voluntad, si no que también soy capaz de manipular su densidad— alzo con un movimiento veloz, su brazo, la pared de agua también se elevo, lanzando a Poison Chord por los aires, pero en dirección al mar, con la esperanza de que este cayera en el mar, dejándolo así fuera de combate.

Yo sin embargo seguía en el piso, con la mirada perdida, acababa de presenciar una gran pelea, pero yo fui incapaz de observarla, después de un rato simplemente me quede dormido…