Phoenix estaba decidido a encontrar al padre de Phoe y ponerlo a salvo bajo su supervisión. Sabía que en el único lugar en donde podrían saber más al respecto, seria en las oscuridades del complejo E, por eso al final su conversación con Phoe y con cautela para no levantar sospechas de parte de los exentos vago por los alrededores de la parte oscura entre callejones, cantinas de la mala fama y otros lugares en los que podría encontrar algún indicio del paradero del padre de Phoe.
Ingreso a una cantera en la que se adentró a descansar un momento antes de continuar con su andanza.
Phoenix no podía evitar observar a los residentes, eran tan diferentes a comparación del lado claro del complejo, sus miradas eran ensombrecidas al igual que sus atuendos.
—No te había visto antes por aquí— comento un hombre que tomo asiento junto a Phoenix.
Piensa como un residente del Complejo E y responde como tal, se sugirió a sí mismo.
—No salgo mucho— respondió sin más.
Podía sentir la mirada de aquel hombre como si no estuviera del todo convencido acerca de Phoenix.
—Si eres uno de nosotros, no tendrás problemas en mostrar tu marca— pidió.
Para diferenciar a los residentes de cada complejo, se les brindó una marca diferente de identificación, la cual la llevaba sobre la parte superior de donde se encontraba la insignia de su símbolo y claramente Phoenix no contaba con la marca del Complejo J.
—¿Y tú quien eres para exigir ver mi marca?— indago Phoenix con molestia.
El hombre se levantó de su asiento y se acercó hacia él con una mirada desafiante.
Tomo a Phoenix una de sus manos e intento sacarle el guante, pero lo detuvo antes de que lograse hacerlo.
—¿Qué crees que estás haciendo?— la molestia de Phoenix se convirtió en furia.
Estaba haciendo un gran esfuerzo para no usar sus instintos licántropos e incluso su elemento frente a la situación, pero no podía permitir ser descubierto, aunque si la situación se apoderaba de él, no iba a poder controlar sus acciones.
—¿Por qué te esfuerzas tanto en ocultarlo? ¿Será que perteneces a otro complejo?— formo una sonrisa malévola— Porque eso sería realmente peligroso para ti.
Phoenix soltó su mano de aquel hombre, pero durante el forcejeo, el guante que lo cubría cayó hacia el suelo.
—¡DETENTE!— esbozó Phoenix con furia a la vez que le daba un empujón al hombre.
Sus ojos heterocromos salieron a la luz, pero el hombre frente a él quedó inmóvil, al igual que todo a su alrededor antes de que pudieran descubrir la verdadera identidad de Phoenix.
—¡Phoenix!— se oyó una voz familiar proveniente de la entrada dela cantera.
La respiración de Phoenix resonaba con fuerza y lentamente se fue normalizando. Él se giró hacia la voz.
Phoe y Pólux se encontraban frente a él, atónitos.
—¿Qué hacen aquí?— indagó Phoenix, aun exaltado.
—Vinimos por ti, hay algo que deberías saber— aviso Pólux.
—Hablemos en otro lado— pidió Phoe.
Phoenix se tomó un momento hasta tranquilizarse por completo y posteriormente observo al hombre frente a él.
—Gracias Phoe— agradeció.
—No ha sido tu culpa, pero no vuelvas a ingresar a un lugar de estos, es peligroso para cualquiera de los elegidos— pidió.
Phoenix asintió y se acercó hacia ellos.
Phoe señalo un callejón que se encontraba a unos pasos de ellos.
—Espérenme allí, enseguida los alcanzo— avisó.
Tanto Pólux como Phoenix se dirigieron hasta el callejón y al cabo de un tiempo el lugar volvió a la normalidad, Phoe llego segundos después.
—Vayámosno antes de que suceda alguna otra cosa.
Phoe tomó a Pólux y a Phoenix de las muñecas y fueron transportados hacia la residencia de Phoe.
—¿Qué es lo que debo saber?— indago Phoenix con curiosidad.
Pólux lo observo dubitativo, sabía que si hablaba al respecto había muchas posibilidades de que Tyr se enterase de que él había sido quien le contó a Phoenix al respecto, pero también sabia que era lo correcto.
—Ten cuidado con Dion— advirtió.
— ¿Dion?— y solo le tomo unos pocos segundos entender lo que Pólux intentaba decirle— Es él, ¿verdad? ¿Él es el infiltrado?
Pólux asintió.
—Tyr me lo ha dejado saber a propósito porque sabía que correría a decírtelo— agachó la mirada.
—Está bien Pólux, no te preocupes. No tengo pensado actuar contra eso en estos momentos— Phoenix tomo aire— Hay una razón por la que me encontraba en la cantera y eso era para encontrar al padre de Phoe y ponerlo a salvo.
—¿Mi padre? ¿Sabes donde está?— indagó con desespero.
—Eso estaba tratando de averiguar.
Pólux levantó la cabeza.
—¿Por qué lo buscas en el Complejo E?— interrogó Pólux.
—Phoe ha dicho que su padre había escapado del Primer Mundo y sabía que no iba a ser bienvenido en ninguno de los complejos principales, fue cuestión de lógica.
—Es lo que también creo— comento Phoe— Sin embargo es casi imposible no saber de el, sí es que se encuentra aquí y no podía deambular libremente por el complejo porque sabía que tarde o temprano las autoridades del Primer Mundo vendrían a buscarlo, por lo que se debe haber refugiado en un sitio lo suficientemente seguro y alejado de la aglomeración de residentes.