POV PHOENIX
Di el primer paso atacando en primera instancia con una llamarada de fuego que inmediatamente fue detenida por una capa de hielo creada por Theo.
—Vamos Phoenix, hazlo más interesante— pidió Tyr.
Gire la mirada hacia Tymon.
—Hagamos este lugar más espacioso— pedí.
Él asintió y rápidamente produjo una ráfaga de viento que lanzó hacia el tejado, dejando descubierto todo el sitio y por último lanzó una ráfaga a cada uno de los muros, dejando solo el muro que se encontraba detrás de los Dambae.
Tyr dio un suave golpe hacia el muro, lo cual hizo que callera hacia atrás, ahora si estábamos listos.
En el primer ataque, Tyr arranco de raíz uno de los árboles que nos rodeaban y lo lanzó hacia nosotros.
Tymon en una ola de viento lo lanzó hacia el lado contrario y logro derribar a Aidan momentáneamente.
Observe hacia donde se encontraban Pólux y Phoe, quien se encontraba recostada sobre uno de los árboles debido a la debilidad que el enfrentamiento le estaba generando, mientras que Pólux sostenía una de sus manos, era todo lo que podía hacer por ella.
Tyr hizo caso omiso a Aidan y siguió con el enfrentamiento.
Cada vez elevaba más árboles y eran arrojados hacia nosotros, pero eran detenidos por Tymon y algunos eran desechos por ráfagas de fuego que lanzaba hacia ellos.
—Podemos estar todo el día haciendo esto o puedes entregarnos a Phoe y acabar con esto de una buena vez— sugirió Tyr.
—¿Qué te hace pensar que lo haría?— interrogue con la furia impresa en mis palabras.
El cielo se tornó todo gris y grandes relámpagos comenzaron a cubrir todo el bosque.
—Aidan levántate y encárgate de Tymon, ¿quieres?. Está siendo un poco molesto— ordeno.
Aidan no tardo en levantarse y elevarse sobre nosotros para dirigirse hacia Tymon para luego llevárselo lejos.
—Deo, averigua donde están— pedí.
Deo asintió y rápidamente salió en la búsqueda de Tymon.
—Esto es entre tú y yo, Tyr.
—No te la creas, no es nada personal, simplemente necesito a Phoe, a ti no te necesito en absoluto, podría matarte ahora mismo.
—Sabes que me necesitas para la ceremonia— le recordé.
—Cierto, lo había olvidado...Pero puedo matarte después de eso.
Mis instintos licántropos se fueron haciendo cada vez más intensos y dejé que se apoderan de mí y se encargaran de Tyr.
Me abalancé sobre él y con mis colmillos tome su cuello y presioné lo más que pude. Rápidamente, él me arrojo a un lado, pero no deje que me detuviera, volví a atacarlo, pero esta vez opte por su pierna provocando un leve mordida. En respuesta, él arañó mi lomo dejando una pequeña herida abierta. Volví a lazarme hacia él, pero volví a mi apariencia regular y con mis puños ataqué su rostro dándole puñetazos sin parar. De igual forma, Tyr volvió a su forma regular y comenzó a sangrar por el labio, pero aun así formo una sonrisa burlona.
—¿Ya te has desquitado?— interrogo sosteniendo aquella sonrisa burlona.
—Créeme que esto no es ni el comienzo.
Seguí dándole puñetazos hasta que la sangre comenzó a salir con más frecuencia.
Sentí unos brazos alrededor mío que me apartaron de él.
—¡No tiene sentido Phoenix, ya déjalo!— oí la voz de Leander a espaldas mías.
Me arrastro unos centímetros alejado de él.
Los Dambaes se acercaron hacia Tyr para ayudarlo y llevárselo de allí.
—Solo diré una cosa— esbozó Tyr con dificultad— Gracias por entregar a Phoe, fue más fácil de lo que pensé.
Y en su modo licántropo salieron rápidamente del bosque.
Observe y busque desesperado a mi alrededor al encuentro de Phoe y Pólux, pero no los hallaba por ningún lado.
—Se los han llevado— esbocé en un suspiro.
Me levanté del pavimento y Leander noto mis intenciones.
Se interpuso ante mí y me detuvo antes de tiempo.
—No vayas Phoenix, sabes que saldrás perdiendo. Vamos a ayudarte, somos una familia, pero necesitamos de un plan, tenemos que encontrar a Tymon y a Deo primero.
Con más calma, asentí y caí rendido hacia la acera.
Luego de un rato de espera, Tymon apareció junto con Deo, repleto de golpes y con dificultad para caminar, por lo que Deo tuvo que ayudarlo a llegar hasta nosotros.
—¡No van a parar hasta conseguir lo que desean!— esboce en un grito.
Deo apoyó a Tymon en un árbol cercano y se tomó de las costillas, teniendo notables problemas para respirar.
—Vas a estar bien— aseguró Leander a Tymon.
Tymon intentó soltar algunas palabras, pero ellas se trabaron en su garganta hasta que finalmente logro soltarlas.
—La única razón por la que no me mataron, fue porque me necesitan en la ceremonia, al igual que a todos ustedes. Démosle lo que quieren Phoenix, por favor.
Tome mi cabeza entre mis manos, no sabía qué hacer, no sabía qué pensar. Estaba consciente de que Tymon se encontraba así por mi culpa, Phoe y Pólux fueron llevados por mi culpa, todos estaba en peligro por mi culpa, todo era mi culpa.
Después de pensar y pensar sin parar, saque una conclusión final.
—De acuerdo, le daremos lo que quieren— dije con firmeza.
Todos me observaron con sorpresa.
—En cuanto Tymon esté completamente recuperado, iremos a la mansión de los Dambaes y terminaremos con todo esto de una vez.
Se creó un pequeño silencio.
—¿Qué pasará con Phoe?— indagó Myron con temor.
—Asegure que iba a protegerla, se lo he prometido y es lo que voy a hacer. Le daremos lo que quieren y no habrá necesidad de que Phoe deba morir.
—¿Cómo harás eso?— replico Myron.
—Sean pacientes y no se preocupen por mí, todo estará bien— afirmé.
—Phoenix...
—Leander, no te preocupes. Ninguno de ustedes debe hacerlo, estaré bien, todos estaremos bien, lo prometo.
Podía notar su preocupación hacia mí, pero era de lo que menos que debía preocuparme, al final podre librarlos de esa maldición que nos persiguió durante tantos años, por fin serian libres, iban a poder sentir por primera vez, iban a ser completamente humanos que era lo que más deseaban en la vida y en cuanto a mí...yo tendría otro destino, pero el saber que ellos iban a obtener lo que siempre intentaron lograr y por lo que tanto lucharon, me era más que suficiente.