ANTES:
—Entonces, ¿tendremos remplazo para Fred? —Owen pregunta a Rilley.
Rilley suspira. —Bueno, podríamos hacer unas audiciones, ¿no?
William también suspira, estirando sus piernas. —Esto es una porquería, ¿Por qué Fred no nos avisó nada?
Rilley se encoje de hombros. —Seguramente le daba vergüenza —aclara su garganta.
Owen chasquea los labios. —Pero somos sus amigos, o bueno, éramos. —Se quita la chaqueta negra—. Además, pudo simplemente decirnos lo que ocurría, ¿no? Por el bien de la banda.
Fred era el guitarrista de la banda. Él tuvo un problema durante las vacaciones, bueno más bien fue su familia entera. Ellos salieron un día y dejaron una olla en la cocina con agua hirviendo. Horas más tarde había bomberos, policías y un montón de cenizas.
Fred y su familia se mudaron. Sé que no tiene mucho sentido porque no lo tiene, todos aquí dudamos que esa sea toda la historia, seguramente pasó algo más. William sospecha que su padre estuviera metido en asuntos ilegales mientras que Owen piensa que la madre de Fred engañaba a su esposo con un criminal o algo así.
No sé, el punto es que ahora necesitan un guitarrista y no tienen a nadie.
William toma mi mano y se recuesta en mi hombro. —Es una…
— ¡Ya sé! —Grita feliz Rilley—. Ya sé quién puede remplazar a Fredster.
Sí, otro ridículo apodo de Rilley para su ex amigo. Frederick Desster. Fredster.
— ¿Quién? —Owen pregunta escéptico.
De la nada, Rilley me señala. William se apresura a indicar que yo no sé tocar ningún instrumento —No vamos a incluir a Bryn, ya hemos hablado de eso.
Owen ríe —No sabe hacer nada.
Lo fulmino con la mirada mientras que Will suelta una pequeña carcajada, él sabe que Owen está bromeando pero aun así, me molesta.
Rilley niega. —No, no estoy hablando de Brynston, me refiero a Dylan —me hace una seña como para que lo recuerde. Ah, el hippie.
Un momento, ¿Por qué está sugiriéndolo a él? — ¿El hippie? —pregunto confundida.
William me mira con confusión en su rostro. — ¿Qué hippie?
Rilley bufa. —No es hippie, se llama Dylan. Es un viejo amigo pero sé que toca la guitarra eléctrica y lo hace muy bien.
William arruga la frente. — ¿Qué tiene que ver contigo? —me mira.
Niego con el rostro rápidamente. —Nada, solo tenemos la primera clase juntos, no tiene nada que ver conmigo.
Owen se acerca a Rilley y le coloca la mano sobre el hombro. —Bueno, si ese hippie amigo tuyo puede seguirnos el ritmo, está dentro, ¿no?
William se echa hacia atrás pensando. No sé ve tan feliz como Rilley y no tan convencido como está Owen pero se rinde y acepta. Afirma que estará dentro de la banda siempre y cuando sea bueno y pase la prueba mañana por la tarde.
Rilley asiente con una sonrisa.
William me avisa que irá por una soda. Le pido que me traiga una Coca Cola y me da una sonrisa rápida. Mientras William sale, Owen se dirige a Rilley — ¿De dónde conoces a ese chico? —le cuestiona.
Rilley sonríe a medias. —Es una larga historia, el punto es que es bueno.
Levanto mi ceja. — ¿Hace cuánto fue la última vez que lo viste? Tal vez ya no es tan bueno como lo recuerdas.
Rilley rasca su barbilla y parece algo ofendido. —Es bueno, Brynston. Lo es y no lo había visto desde hace unos cuatro o cinco años pero…
— ¿Cuatro o cinco años? —Pregunta Rilley por mí—. Amigo, tenían como doce, ¿no?
Niega. —Bueno, no sé. Teníamos catorce y fue… él era como mi vecino.
No entiendo porque Rilley no habla de formas más claras. — ¿Cómo que “como mi vecino? Ósea, ¿fue o no fue tu vecino?
Rilley frunce el ceño. No sé ve de humor para contarnos algo que al parecer le molesta. Se queda callado por unos segundos. —Era mi vecino y él tocaba la guitarra. De todas formas aún tiene que hacer la audición y ni siquiera le hemos dicho nada.
Owen me da una mirada. — ¿Tú lo conoces?
Sacudo la cabeza negando. —Para nada, solo se sienta a mi lado y ya. No es la gran cosa.
William regresa con dos latas en la mano. Una normal y otra sin calorías, y son Pepsi. A pesar que no le pedí que fuera así, me da la que no tiene calorías y la acepto con una sonrisa a pesar que no me guste mucho esta.
—Entonces, ¿Ya le avisaste a tu amigo? —William destapa su lata.
Rilley niega sentándose en el suelo. —Lo haré mañana, no tengo su número y por lo que sé, no tiene redes sociales.
Suelto una carcajada. — ¿Qué? Es un total hippie. ¿Quién no usa redes sociales hoy en día?
Rilley se encoje de hombros. —No todo mundo quiere ser influencer Brynston.
Owen suelta una risita. William bebe su Pepsi sin decir nada. —Las redes sociales se han vuelto un medio de comunicación, no tiene nada de malo usarlas.
Rilley me ignora y se dirige a Owen y a William. —Entonces, mañana en la escuela le preguntaré, ¿bien?
Owen asiente y William da un sorbo en silencio. Su silencio es su forma de decir que está de acuerdo. Lo sé porque lo conozco muy bien, se diría que soy la persona que mejor lo conoce de todo el mundo.
A ver qué tal sabe tocar la guitarra eléctrica el hippie.