Capitulo 6. La fiesta.

Adriana.

Capitulo 6.

Mis amigas están dementes en serio, hace rato me llamó Paola que este viernes fuera con ella, Nicole y Carolina a una fiesta que está organizando Alex Villalobos con demasiada insistencia, me imagino porque las chicas quieren ir, por decirlo así ellas tienen una mínima obsesión con él o algo así, es algo que comparten como grupo, antes yo también, pero desde que me hice novia de Ethan obviamente lo olvidé, pero bueno no voy a recordar cosas tristes, en fin, me convencieron así que iré, después de todo son mis últimas semanas de soltera.

La semana pasó volando, ya es viernes el día de la fulana fiesta, espero no tener problemas, ni contratiempos, las fiestas de Alex no suelen ser mi ambiente.

Decidí ponerme un vestido color naranja de tela tipo Lana y acanalada con una abrigo negro de terciopelo, bolso negro con cadenas doradas, mi cabello en ondas y un maquillaje simple, pero lindo.

Escucho el timbre y se que mi querida amiga rubia llegó, y si se preguntan quién pues es mi mejor amiga Nicole, a pesar de ser muy diferentes en físico nuestra personalidad es la misma y nos queremos mucho aunque a veces nuestras personalidades chocan por lo mismo, y ahí tenemos pros y contras de ser tan iguales

—¿Donde estas rayo de sol?— me llama entrando a mi habitación, ella siempre me ha puesto ese apodo y me gusta porque es mejor que mi nombre porque a veces suena muy serio.

—Aquí nick.

Mis amigas y yo siempre nos ponemos apodos tanto buenos como malos, para acortar nuestros nombres o simplemente algo que vaya con la personalidad de cada una.

—Oh ya veo que estás lista, te ves bien sol.

—Gracias, tú también, te ves hermosa—le devuelvo el cumplido, ella tiene puesto; un vestido negro, con zapatillas blancas y su cabello al natural en ondas y un maquillaje leve.

—¿Qué sabes de las chicas?—me pregunta revisando su celular.

—Carol me escribió hace rato y me dijo que ella y Pao se iban a adelantar a casa de Alex y nos veíamos allá—le explico, hace rato Carol me había dicho eso, a ella y Pao siempre les gusta llegar temprano a las fiestas y más a la que vamos por cierto personaje.

—Ay esas locas, siempre con sus cosas—Nick voltea los ojos.

—Bueno amiga, vámonos que importa las veremos allá, si llega la policía me voy—advierto en broma y ambas reímos.

Bajamos las escaleras, salimos de la casa y entro en el querido Mercedes de mi amiga, mientras ella conducía yo veo las casas por la ventana, se detiene y se que llegamos, Alex no vive muy lejos de mi casa, en realidad somos vecinos, así que llegamos en 5 minutos.

Me bajo con cuidado y acomodo mi vestido, se que me veo bien y que todos me observan, los conozco a todos, estudié toda mi vida con ellos, nos separamos en la Universidad, pero igual seguimos siendo vecinos y la mayoría me odian sin razón, siempre me tuvieron envidia por mi familia y por alguna razón a mis amigas también, digamos que los últimos dos años de secundaria nos querían excluir de todo y dársela de mejores, nunca les prestamos atención, y tratamos hasta ahora de llevar la fiesta en paz.

Cuándo entramos yo me hago la loca básicamente para no saludar por compromiso hasta que llego donde está mi grupo, en una gran mesa los veo, Carolina en su teléfono y tomando de su vaso rojo, Paola hablando con unos chicos.

—Hola babys—las saluda Nick al llegar.

—Mariconas, pensé que ya no venían, ¿Qué tanto hacían? —se queja Carol, ella siempre tan directa, la conozco de toda la vida y siempre hemos sido amigas, así que ya me acostumbre a su carácter.

—Habla la que tarda dos horas peinándose—la fastidio, siempre es así ella se queja y es la que más se tarda.

—Que graciosas, siéntense—nos pide Paola y nos empieza a contar las anécdotas de su día, a esa mujer todos los días le pasa algo.

—No quiero problemas—le susurro a Nicole cuando noto a Alex, antes indirectamente me coqueteaba hasta cuando tenia novio, y él y Carol tienen historia—Eso es con él, no conmigo baby—me palmea el hombro levantándose, la miro ofendida.

Paola comentó y recalco la cierta insistencia de Alex a que viniéramos todas y cuando ella le dijo que la que capaz no viniera fuera yo le insistió que me convenciera, por eso no confío.

La fiesta transcurre normal, beber, comer y bailar, hablé con varios que me caen bien, nos tomamos fotos, es algo que hacemos cuando salimos juntas, bailamos cantando wildside al ritmo de Sabrina carpenter, después de un rato me siento en el sofá cansada de tanto bailar, levanto la cara y lo veo, es Sebastián, ok esto es raro me lo encuentro a cada lugar que voy, ¿será que me está siguiendo?, por favor Adriana no seas dramática, ¿por que alguien como él me estaría siguiendo?, voy a alejar ese pensamiento de mi mente. Ya es demasiado.

No quiero que esto se haga un problema, sea como sea no estoy disponible.

Narra Sebastian.

Llego algo tarde a la fiesta, estaba esperando la señal de Alex de que Adriana ya había llegado, entro a la casa y entonces la veo sentada en el sofá, revisando su celular, entonces levanta la vista y mis ojos se encuentran con los de ella, se ve tan hermosa con un vestido color naranja que le favorece, y su cabello suelto en ondas.

Dudo por un segundo en acercarme a ella, no quiero que piense que la estoy siguiendo, ¿aunque creo que es así, no?, camino hacia ella.

—Las coincidencias nos persiguen—comento divertido, ella sonríe.

—Al parecer así es—contesta riéndose un poco.

—¿Cómo estás?, ¿Qué tal la estás pasando?—pregunto sentándome a su lado.

—Estoy muy bien y tú, la estoy pasando genial.

—Me alegro de que estés bien, yo estoy muy bien—exagero, ¿por qué siempre que me acerco a ella mi cerebro se queda en blanco?, y se me acaban los temas de conversación.

—Que bueno—contesta ya algo aburrida, estoy a punto de hablar cuando llega una de sus amigas.