6 MESES DESPUÉS
SANDRA
La casa era un revoltijo teníamos que ir a la graduación de mi hermanito por fin hoy terminaba su carrera de ingeniería de sistemas e informática, y también termino como el primer puesto en toda la universidad con un promedio de 19, 9 era casi perfecto y no podía estar más orgullosa.
Yo opté por vestido estilo sirena, aunque no tan ceñido escote en corazón el cabello suelto y solo algo de labial, mis tacos era los más pequeños, mis hermanos se veían adorables en sus trajes uno negro y el otro azul noche se parecía, pero ambos insistían en que no; y mi hermana en un vestido verde jade súper pegado que resaltaba cada una de sus curvas, un maquillaje sencillo y su cabello negro azabache suelto se veían muy bien y obvio nos tomamos muchas fotos y rumbo al local del evento.
Llegamos y la verdad solo esperamos que lo mencionara y recibiera su cartón, pero fue una sorpresa después de recibir su bachiller lo volvieron a llamar para el diploma del mejor estudiante y algunos premios (cuaderno, mochila y tomatodo). Termino todo como a las 9 y a esas horas salimos a cenar.
-. Vaya sí que ere bueno – elogió mi hermano.
-. Por algo no se despegaba de la laptop – acoto mi hermana.
-. No podría estar más orgullosa de ti – le dije intentando no llorar.
-. Gracias a todos – dijo emocionado – ahora si a buscar chamba y seguir adelante.
-. Muy bien sé que encontraras de inmediato – lo alenté – y obvio estoy orgullosa de ustedes porque cada uno está en su trabajo y terminando una carrera, y sé que Dios nos va a guiar.
-. No importa la distancia siempre estaremos porque somos familia – acoto mi hermano – y siempre van a contar conmigo – eso me hizo derramar lágrimas que estaba reteniendo.
-. Solo esperemos no cambiar por nada ni nadie que hallemos en nuestro camino – mi hermana y su sarcasmo o ya no sé cómo llamarlo.
-. Bien cenemos – gracias al cielo el camarero trajo la orden pronto.
Llegamos a casa y a descansar. Mañana tendría que doblar turno ya que hoy me dieron libre para estar junto a mi hermano, pero no me importaba.
En el trabajo llegué y le dejé a la secretaria de Don Esteban mi carta de renuncia ya que ellos habían sido muy buenos conmigo y no podía dejarlos así de la noche a la mañana.
-. Entonces de verdad nos vas a dejar – asentí.
-. Si Meche me voy a buscar mi destino – ironicé ambas reímos y nos abrazamos.
-. Cuídate y espero que todo te salga muy bien – me dio un beso y fui a mi puesto de trabajo.
Salude a mis compañeros y me pue manos a la obra y justo esa noche el pub estaba reservado para el amigo español de mi jefe que haría la fiesta de su cumpleaños, eso significaba que estaríamos full cuba libre porque eso le encantaba al señor y obvio mis dos turnos trabajaría para él y después llamo Miriam que estaba enferma y no asistiría eso significaba que me tocaba hacer de camarera también genial, va a ser un día duro.
Cerca de las tres de la mañana terminamos de hacer limpieza ese señor tomo desde las 3 de la tarde y aun así no se cayó hasta casi las dos de la mañana, en fin.
-. Sandra – el señor Esteban me llamaba.
-. Dígame – respondí caminando a donde estaba.
-. No puedo creer que nos dejes en un mes – lo olvidé un mes deseaba estar libre para estar en casa y quizá salir con mis hermanos.
-. Muchas gracias por la oportunidad – me miro con tristeza.
-. Al principio creí que no era buena idea darte el trabajo ya que las chicas no se desenvuelven muy bien en el bar, pero me tapaste la boca – ok en serio al inicio le caía mal – y ahora espero que encuentres lo que estás buscando y si deseas volver aquí siempre estarán abiertas las puertas.
-. Gracias – nos dimos un apretón de manos, termine de limpiar y a casa al menos me habían dejado buenas propinas.
Faltaban 2 semanas para ir a Lajas a una finca que tenía mi abuelo por ahí, y revivir tantos recuerdos felices.
-. Entonces si vamos a la playa – mi hermano estaba empecinado en ir a la playa y bueno a mí no me agradaba mucho la idea.
-. Está bien – accedí porque al fin y al cabo los recuerdos no matan.
Y así salimos rumbo a Pimentel, intenté disfrutar lo más que pude, pero en un momento decidí caminar por la playa los recuerdos venían una y otra vez y no pude evitar llorar porque de verdad lo extrañaba y cada día era más, necesitaba irme lejos en donde no tenga ningún recuerdo de él.
Me calmé y regresé donde mis hermanos, acampamos y en la mañana fuimos a casa. El tiempo pasa demasiado rápido cuando tu mente está ocupada.
-. Bien – mi maleta estaba lista – mañana salgo a las 5 de la tarde con el tío – viajaría con un hermano de mamá.
-. Te voy a extrañar – mi hermanito me abrazó.
-. Y yo a ustedes – nos abrazamos – espero que puedan sacar vacaciones en el mismo mes para disfrutar en la finca – ellos asintieron, ya que mi hermanito también había conseguido un buen trabajo para el estado.
-. Eso dalo por hecho – está vez fue mi hermana quien hablo – espero contestes los mensajes-
-. Siempre – esa noche hicimos pijamada, ellos y sus locuras.
A las 4 de la tarde estamos donde mi tío partía en su camión.
-. Cuídense – los abracé.
-. Tú también – me prometí no llorar así que lo haría.
-. Llama cuando llegues – mi hermana de sobreprotectora, asentí.
-. Cuídate – y así mi tío encendió el carro, solo les hice adiós con la mano.
El camino era pista hasta Cumbil de ahí en adelante era trocha (parecía ya que la carretera estaba en pésimas condiciones) y llegaría cerca de las 4 de la mañana a Lajas.
Bajamos a comer en un restaurante conocido de mi tío y yo pedí cecina era lo que más me agrada.
-. Terminarás rápido porque no quiero que nos agarre la trampadera (se irrumpe el paso en la carretera y debemos esperar para que se solucione el inconveniente muchas veces pasaban hasta 3 días para que eso sucediera) – asentí yo tampoco deseaba eso