ANTONIO POV'S:
- Al centro comercial por favor - Le digo al taxista ya dentro del auto
Estoy muy emocionado.
Cuando me levanté, vi el mensaje de Catalina de que me esperaba en su casa.
Aunque fue de lo más cortante, no pude evitar ponerme feliz.
Todo esto me duele demasiado pero sé que apenas cruce la puerta de su casa podremos hablar y solucionar esto.
Es mi mejor amiga, y siempre ha estado conmigo desde que tengo uso de razón.
No quiero que nuestra amistad desaparezca como por arte de magia.
La quiero mucho y es una de las personas más importantes en vida.
- Ya llegamos - Dice el taxista haciendo que reaccione de mi trance
-Gracias - Le doy el dinero y salgo del auto
¿A dónde voy primero?
Tengo que llevar comida así que...
Ya lo tengo, a Dulcelandia
Es un lugar donde venden todo lo que Catalina tanto ama: gomitas, chocolates, helado y todo eso.
Ella lo llama "paraíso de comida".
Saco dos potes de helado de fresa, tal y como se lo prometí.
También pongo en el carrito bolsas de gomitas, palomitas para microondas, unos cuantos chocolates y un paquete de jugos de cajita.
Me dirijo a la tienda de películas, no sin antes haber pagado toda la comida.
No sabía que películas llevar, al final termino escogiendo LO MEJOR DE MÍ, es la película de la que tanto hablaba Almendra y Cata no la había podido verla.
También llevo Titanic, y es que Catalina ama tanto esa peícula que no le importa si la ha visto un millón de veces, siempre tendrá ganas de verla.
Mi mejor amiga ama mucho las películas románticas aunque diga que soy muy poco reales.
Una vez terminadas las compras, salgo dispuesto a ir de una vez por todas a la casa de Catalina.
Me demoro unos diez minutos en llegar a su casa, ya que el centro comercial está algo lejos.
Una vez que llego, toco el timbre y su papá sale.
¡Oh, genial!
Su papá me cae muy bien, pero es demasiado celoso, a veces hasta siento que me odia.
- Buen..buenas tardes - Saludo nervioso
Mierda.
Hasta estoy sudando.
- Buenas tardes - Dice de lo más cortante - Catalina no me había avisado que venías -
- Pues yo le envié un mensaje - Le traté de sonreír pero me salió una mueca
- Qué raro, no me dijo nada - Frunce el ceño
- Cariño, ¿quién es? - la mamá de Catalina se asoma a la puerta - Ah, hola Antonio - Saluda amable y sonriente
- Buenas tardes, Catalina me dijo que me estaba esperando, quedamos en ver unas películas - Digo con una gran sonrisa
- Sí me dijo, está en su habitación, sube - Me hace un espacio para que pueda pasar a su casa
Toco la puerta de la habitación pero al no recibir respuesta, solo entro.
Encontrándome con Almendra y Ryan sentadas en dos pequeños muebles de la habitación, y también estaba Catalina, claramente.
Saludé a mis tres mejores amigas y me dijeron que estaban esperando a que llegue Mark y Jack.
Cuando estos llegaron, todos bajamos a la sala.
Solo estábamos nosotros ya que la familia de Catalina había salido a comprar la cena.
- ¿Y qué película vemos? - Pregunta Almendra cantando
- Antonio trajo Titanic y Lo mejor de mí - Catalina me sonríe
- No quiero ver nada de romance - Se queja Ryan
- Y luego yo soy la quejosa - Almendra rueda los ojos - ¿Qué tal si nosotros nos quedamos a elegir la película y Cata y Antonio se encargan de servir? - Nos sonríe - Me estoy muriendo de hambre - Hace puchero - ¿Quién está conmigo? - Pregunta ante el silencio del resto
- Yo - Dicen Ryan y Mark al unísono
- Igual - Jack sonríe nervioso
Sé lo que planean.
Agradezco internamente lo que tratan de hacer.
Entonces me levanto de la alfombra que está en el suelo y ayudo a Cata para irnos a la cocina.
Servimos en pequeños platos todo lo que había traido.
- Yo quiero hablar contigo sobre lo que pasó, Cata - Corto el silencio - Pensé que estaríamos solos los dos, así hubiese sido más sencillo, pero bueno - Me encojo de hombros
- ¿Qué te parece si vamos a mi habitación para poder arreglar lo que pasó? - Propone esperando mi aprobación
- Vamos - Asiento y subimos las escaleras sin hacer ruido
- Espero que ya hayas planeado muy bien tu explicación Antonio, porque yo no le encuentro explicación a lo que me dijiste - Catalina me mira completamente seria
- Yo lo dije porque estaba celoso, tú me seguías gustando y fui un inmaduro, reaccioné así porque temo perderte como mejor amiga y que Richard te enamore solo para hacerte daño - Digo siendo lo más sincero
- ¿Te seguía gustando? - Pregunta ella con los ojos abiertos
- Si, siempre te vi como algo más que una amiga - Admito - Estoy conociendo a una chica, ella genera mucho interés en mí, pero la idea de que tú y yo podemos llegar a ser más que amigos, es algo que impide que esta chica me guste y tengamos algo más que una amistad - Explico con tono suave - Necesito que me digas que entre nosotros no pasará nada - La miro buscando una respuesta en sus ojos, pero ella está aún está procesando lo que he dicho
- Somos mejores amigos, no quiero que desaparezcas de mi vida, yo solo te quiero como amigo - Dice al fin Catalina
- Gracias - La abrazo - Es lo que mi mente ha esperado para dejar la idea absurda de que podemos ser algo - Sonrío de lado
- ¿En serio no te hice daño? - Pregunta Catalina algo apenada
- No - Le sonrío por completo, no sé cómo explicar lo que siento - Entonces... ¿estamos bien? -
- Supongo... - Dice ella algo dudosa
- Cata, en serio fui un idiota, solo dije las cosas sin pensar y ahora me arrepiento, no quiero que perdamos nuestra amistad por mi estupidez -
- Es que me dolió, Antonio - Frunce el ceño