Tu lado capitulo 13: El pasado vuelve...

¡Cuándo arreglaremos cuentas con Eddie! -- Gritó un molesto rubio desde un callejón sombrío, mientras tanto, a sus espaldas, sus dos amigos exigían lo que su líder reclamaba.

¿?: Espera, tan solo un poco ¿quieres?... No debemos ser tan imprudentes a la hora de actuar con él -- Respondió una voz un tanto más siniestra desde las sombras.

Ethan: Jeremy y nosotros no podemos esperar más, ¡queremos venganza por todo lo que nos hizo!

Mark: ¡Por todas las humillaciones y derrotas que nos ha provocado!

¿?: ¡Cierren el pico! -- ordenó la voz perdiendo la paciencia, entre más reclamos del par.

¿?: ¡Todos queremos lo mismo! ¡Que Eddie y sus dos amigas sufran de igual manera que nosotros! ¡En especial Eddie William! -- aquella voz empezó a sonar con mucho rencor y deseos de venganza.

Jeremy: ¿Y entonces qué? ¿Qué estamos esperando? ¿Una carta de aviso? -- preguntó con sarcasmo.

¿?: Paciencia... muy pronto haremos nuestra tan anhelada venganza en contra de Eddie....

Capítulo trece: "El pasado vuelve"

¡Y GOLLLL! -- Dijo con euforia Elena, quien había conseguido anotarle un gol a Bea.

Junior: ¡Eres grandiosa, Elena! -- decía con estrellitas en sus ojos.

Elena: De nada, pequeño, es muy fácil regatear a tu primo -- chocó los cinco con mi primito, ambos riéndose con burla de nosotros.

Aunque era un simple juego para divertir a Junior, esa burla hacia a mí no me dio ni la menor de las gracias, pero era cierto, estamos 3-1 y todo por mi culpa...

Beatriz: Perdona, Eddie.... soy muy mala jugando al fútbol -- me habló decaída trayendo de nuevo el balón a mis pies.

Me quedé mirando hacia el frente, muy motivado en vencerla a como dé lugar.

-- Beatriz, ¡esto todavía no se acaba! -- dije viéndola de frente alzando mi puño -- Son dos goles solamente, aún podemos remontar.

Beatriz: Pero, Eddie, nos-- la interrumpí, agarrándola de las manos para expresarle toda mi confianza.

-- ¡Confía en mí! Créeme, sé que podemos ganarle, ambos somos un gran equipo -- la expresión de Beatriz cambió a una más decidida tras decirle eso.

Beatriz: De acuerdo, Eddie, ¡vamos a ganarles! -- reanudó el juego amistoso en el parque.

Elena: ¡Vamos, pequeño, robemos el balón! -- dijo aproximándose peligrosamente a Beatriz, pero en una finta logró sortearla con rapidez.

Junior: ¡Ay, no debo defender el arco! -- gritó preocupado bajando al improvisado arco que armamos.

Beatriz seguía corriendo sin parar con el balón en sus pies, yo con mucho esfuerzo la alcanzaba, me sorprendía mucho la velocidad que tenía en sus piernas, ella era muy veloz, me decía en admiración.

Mientras seguía corriendo, vi de reojo como Elena había conseguido llegar hasta Bea y trataba de forcejar por la pelota.

Al verla en aprietos, casi voy a ayudarla, pero ella me gritó que fuera al área, que esperara allí, un poco indeciso le hice caso, porque parte de mí confiaba en Beatriz.

Elena: Ahora veo que te has estado conteniendo en el juego...

Beatriz: Es tu culpa por confiarte, debiste recordar que de los tres soy la más rápida.

Elena: Lo admito, lo eres, pero veamos ¡si esquivas esto! -- Se barrió contra Bea casi quitándole el balón, pero Beatriz con mucho esfuerzo consiguió ganarle la pulada y pasarme la pelota en frente del arco.

Junior: ¡No lo permitiré! -- gritó barriéndose también.

Pero fue muy sencillo esquivarlo y anotar con la portería vacía...

Me encantó la sensación de convertir un gol, el anterior fue un autogol de Junior a favor nuestro, ahora podía entender por qué a los latinos les encanta este juego.

Ahora, jugando en serio, disfrutaba de otro modo el fútbol, Beatriz se acercó a mí dándome un enorme abrazo mientras me decía.

Beatriz: ¡Tenías razón, hacemos un gran equipo! -- contó muy emocionada.

-- Beatriz, este gol fue gracias a ti, eres grandiosa -- dije mientras le correspondía el afecto.

Junior: ¡Qué mal, soy un terrible defensa! -- lloriqueó mientras parecía rendido en el césped.

Elena: No te preocupes, pequeño, solo es un gol y aún tenemos la ventaja -- me volteó a vernos muy seria -- ¡El próximo que anote gana!

Partido 3-2, ahora solo falta uno para empatar el juego -- le comenté a Bea, ella asintió con una sonrisa.

Beatriz: ¡Ganaremos como un gran equipo! -- gritó muy animada.

Junior retomó el juego, sosteniendo el balón hacia nuestra meta, intenté quitarle la redonda pero jugó para Elena y ella se fue en velocidad hacia la portería.

Me vi obligado a ponerme en el arco para defender cualquier remate de ella, mientras tanto Beatriz trataba de ganar el balón en un juego de empujes con Elena.

Beatriz: ¡Esta vez no anotarás! -- decía muy decidida.

Elena: ¡Junior! -- Elena nos sorprendió pasándole el esférico al pequeño, quien lo tenía en frente mía, me preocupé tanto por el ataque de Elena, que ignoré a mi escurridizo primo.

Junior: ¡Este será mi gol! -- Gritó disparando la redonda hacia mi cara, pude tapar el gol con mi cara, pero me rompió la nariz por la potencia del remate furioso.

Elena/Beatriz/Junior: ¡¡Eddie!! -- gritaron los tres muy angustiados por mi estado.

Junior y Elena se acercaron a verme, pero fue ahí donde aproveché.

-- ¡Beatriz, toma! -- agarré la pelota con mis manos y lancé un pase desde la portería hasta donde estaba ella.

Elena/Junior: ¡¡¿Qué?!! -- dijeron sorprendidos.

Fue el gol más que he visto, simplemente corrió hasta llegar al arco contrario y anotar para empatar, muy sencillo pero también doloroso por mi parte, tener que soportar el sangrado de mi nariz.

Pero estaba feliz, ya me había vengado de Elena y Junior, ahora solo quedaba descansar, me dejé caer al césped mientras suspiraba por el agotamiento.

Beatriz: ¡Lo hicimos, Eddie! -- la voz de Bea me hizo abrir los ojos para verla desde abajo.