Capítulo 1
Alice.
Mi nombre es Alice Nichols Allen, tengo 22 años y durante todo ese tiempo he pensado que mi vida es muy difícil, tengo sobrepeso, mi pelo tiene el peor friz, bueno algunos días, creo que lo rescatable son mis ojos azules, que los heredé de mi padre.
A consecuencia de mi sobrepeso, he recibido burlas y una que otra humillación, nunca he tenido novio, pero eso ya no es un problema que me moleste y las burlas ya no me afectan ni me importan como lo hacían cuando era más joven, de hecho cuando alguien me dice algo lo pongo en su lugar, lo que ha ocasionando una que otra pelea a lo largo de mi adolescencia y vida adulta.
Dicen que la vida es difícil, pero en realidad es difícil para algunas personas, paro otros es un camino fácil, lleno de flores y sin complicaciones, pero para mí, por desgracia me tocó el camino difícil.
Pero lo que de verdad me hace pensar que me tocó la vida por el camino difícil, es que llevo más de 5 horas seguidas estudiando la anatomía del aparato digestivo y las enfermedades más comunes y los cuidados básicos a los pacientes, porque mañana tengo un examen, y estoy tan estresada que no logro memorizar nada, es como si no estuviera estudiando, esto es difícil, ya que no puedo darme el lujo de sacar una calificación baja ya que tengo una beca total en la universidad de Pennsylvania la Penn Nursing, para estudiar enfermería y es una beca académica, lo quiere decir que es por promedio excelente, así que la calificación vale mucho. Además me tengo que esforzar porque mis padres que me dieron la confianza y me están ayudando con la renta de este “departamento”, ya que me mudé a Pennsylvania desde Athens un condado de Ohio de donde soy originaria, pero ya con casi 4 años aquí, ya me siento residente de Pensilvania.
Pero tengo que dejar de divagar en mis pensamientos y ponerme a estudiar verdaderamente.
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—Dejen su examen en su escritorio y salgan todos. — nos dice el profesor justo después de que sonó la campana de salida, en realidad había terminado pronto el examen, pero lo estuve repasando unas cuantas veces, para ver si no tenía errores y creo que no, solo falta esperar las calificaciones.
—Bueno, ¿Qué hacemos hoy?— dice mi amigo Lucas.
—Es martes, Lucas, ¿Qué quieres hacer?— le contesta mi otra amiga Anna, somos amigos prácticamente desde el primer año en que nos conocimos.
—Por eso… escuchen, se de muy buena fuente que el “Monk’s Good Bar” no tiene mucha clientela entre semana, los fines de semana está que revienta el lugar, lo que es sorprendente porque no tiene mucho tiempo que abrió. —
—¿Qué clase de nombre es ese?.— le pregunté yo.
—Ese no es el punto Alice, es entre semana, mañana hay clases temprano, no podemos darnos el lujo de irnos a desvelar más, con las develadas que nos damos al estudiar es más que suficiente.— yo solo asiento con la cabeza energéticamente de acuerdo con Anna.
—Por favor chicas, vamos, los amigos con los que podía ir no pueden, porque tienen exámenes y nosotros ya terminamos los nuestros. —
— ¿Somos una segunda opción?— le dice Anna poniendo una mirada de indignación fingida.
—No Anna, no pongas palabras en mi boca que yo nunca dije. — dice poniendo cara de ofendido
—Está bien… solo se vive una vez. — le dije a Lucas
—¡QUE!... ¿Qué estás diciendo Alice?, si fuera un fin de semana, estaría bien, pero es martes. —
—Sí, lo sé, pero lo de los exámenes es verdad, ya terminamos, pero aún tengo el estrés que me causaron, así que hay que ir y dar una vuelta estará bien, ¿vale?— le dije dándole una pequeña sonrisa, tarda un poco antes de contestar, se ve que si lo está penando muy seriamente.
—Solo porque tú vas… pero no nos quedaremos mucho tiempo, tenemos que venir mañana a clases temprano, por lo que no nos podemos desvelar ¿Entendieron? — Lucas y yo asentimos con la cabeza dandole una sonrisa.
No sé pero siento que me la pasare muy bien, de vez en cuando hay que divertirse y disfrutar de las nuevas experiencias que ofrece la vida.
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Ese día por la noche.
Cuando llegamos al tal Monk’s Good Bar, me sentía incómoda ya que veía a pura rubia con cuerpos despampanantes, y la verdad yo no estaba así, Anna por otro lado es una mujer con un cuerpo muy estético, pero no es una cabeza hueca, es muy amable e inteligente, por eso es mi amiga, pienso mientras estoy formada atrás de ella, en la fila para entrar al bar.
—Vengan, rápido. — nos dice Lucas, para que avancemos en la fila y así lograr entrar de una vez, la verdad no me quiero imaginar que tanta gente hay el fin de semana, si hoy hay mucha.
Cuando entramos pude ver porque era un lugar con mucha demanda, se veía muy bien todo el lugar y tenía música buena.
—Esto esta genial. — nos dice Lucas.
—Si. — le digo con verdadero asombro.
—Hay que buscar una mesa. — dice Anna recorriendo con la mirada el lugar, pero no tardamos demasiado en encontrar una mesa vacía, nos encaminamos rápidamente hacia el lugar, ya que nos la pueden ganar.