Me levante muy temprano para terminar de hacer dos vestidos, y ahora los tengo en su respectivo maniquí, me apresuro para bañarme, en cuanto estoy lista me pongo la ropa interior una blusa manga tres cuartos de cuadros negro y blanco, uno pantalón de mezclilla azul marino, calcetas de gatitos y mis tenis negros.
Peino mi cabello rápidamente y me pongo un poco de maquillaje en mi rostro. Tomo mi bolso negro y pongo mi cartera, cargador del teléfono, salgo de mi habitación abro la puerta principal para sacar mi bicicleta, en cuanto estoy fuera cierro, guardo las llaves en mi bolso y me coloco el casco. Monto mi transporte de dos ruedas y comienzo a pedalear por las calles de la ciudad hasta que llego a la cafetería. Al llegar dejo la bici y la amarro en el árbol de siempre.
Entro en el local y dejo mis cosas debajo del mostrador, me pongo el mandil en la cintura y amarro mi cabello en una coleta alta. Pongo un poco de musica, limpio el mostrador, las mesas, los cristales de la ventana aprovechando que no hay clientes.
Comienza a sonar la canción OneRepublic - Start Again ft. Logic muevo mi cabeza al ritmo de la musica y tarareo y poco la letra.
«Mira, mi mundo está dando vueltas,
Como si no hubiera nada que saber.
Mira, mi mundo está sintiendo
Que puede que vaya a explotar.
Y sí, sé que es difícil
Quitármelo de la cabeza.
Necesito que alguien me lleve,
Necesito ver que sale un poco de luz.»
Justo cuando termino de limpiar el mostrador, un señor baja de un auto bastante caro y entra al café, pongo mi mejor sonrisa y le atiendo cuando se sienta en uno de los taburetes.
—Buenos días ¿Qué desea ordenar? — pregunto sacando mi libretita mi bolígrafo del mandil que tengo en la cintura.
—Buenos días — tiene una voz tan gruesa, en ese momento comienza a sonar la canción Para Que Te Quedes — David Guetta Ft. J Balvin Lali — un expreso americano por favor.
—Enseguida se lo traigo — digo al anotar el pedido.
Es la primera vez que veo a este hombre aquí, tiene un acento castellano, es guapo, un poco intimidante, alejo mis pensamientos sobre lo que me parece ese hombre y me dedico hacer el pedido.
En cuanto lo tengo listo se lo llevo a su mesa, se dedica a observar el lugar, como si le pareciera poca cosa, hay algo en el que me parece familiar pero no logro comprender que es.
Tarareo la canción Pienso en ti de Becky G y Joss Favela mientras pongo más vasos, muffin de arándanos, chocolate, galletas de frutos rojos y varios bocadillos más en el mostrador.
Un grupo de jóvenes comienzan a llegar y los atiendo rápidamente, ese hombre no deja de mirarme, o no sabe disimular o lo hace a propósito. Me causa curiosidad saber quién es.
Sirvo cinco porciones de pastel de chocolate y cinco malteadas del mismo sabor, un cliente hace que me dé un golpe en la cabeza cuando me toma por sorpresa bajo el mostrador.
—Discúlpame, no quería asustarte — sonrió y olvido el golpe cuando veo a Henry con una rosa rosa en su mano.
—Hola — le doy un beso en la mejilla — creí que estarías ocupado hoy — comento porque últimamente lo ha estado.
—Veras, tengo una amigo que es fotógrafo, he hablado con el y pues te he conseguido una sesión de fotos para que puedas hacer la publicidad de tus vestidos en Instagram y en todas las cuentas que tengas — me quede sin palabras al escucharlo, eso debió costar muy caro.
—Henry, eso debe ser muy caro, es un gran gesto de tu parte querer ayudar pero no puedo aceptarlo — me doy la vuelta para poner la rosa en un florero con agua.
—No es lo que crees, mi amigo es estudiante, tu podrías ser la modelo — me doy la vuelta al escuchar eso último.
—Yo modelando los vestidos — niego con la cabeza y camino hasta el — debes estar bromeando, yo no soy modelo, soy costurera y licenciada en idiomas, nada más.
—Eres una gran diseñadora, tus bocetos son grandiosos —conozco alguien que podría ayudarte con eso.
Editado: 18.06.2019