Tú mi nube de azúcar

20

La alarma de mi teléfono me despertó, estire mi cuerpo en la cama y después la apague, unos minutos más tarde ya me encontraba arreglada para ir al local, admiro el corte recto de mi vestido negro con los hombros un poco descubiertos, mi cabello recogido que me hace ver casual, unos aretes redondos un poco grandes y mis tenis blancos, mi maquillaje es discreto, me encanta el atuendo que escogí para hoy. Tomo mi bolso reviso que todo esté ahí y salgo de mi casa, está vez dejando la bicicleta, le conecto los audífonos a mi celular y camino mientras escucho musica.


Llego a mi antiguo trabajo y veo como hay demasiada gente, así que con confianza dejo mi bolso donde solía dejarlo, me coloco un delantal sobre el vestido y comienzo a ayudar a mi ex jefa y amiga, cuando todo el caos ha pasado, ella me entrega un muffin de arándanos, sonrió porque sabe que es mi favorito.

 

—Venía a comprar uno de estos cuando te vi atareada con toda esta gente — comento mientras ella me limpia las migajas de la comisura de mis labios.

 

—Así que tu novio es un príncipe — desvió la mirada porque no quiero hablar de eso — y no un príncipe cualquiera, es el próximo rey — mi amiga pone una de su manos en mi mentón para que la mire — háblame.

 

—Esto es una locura, ayer habían varios periodistas y fotógrafos fuera de la tienda y de camino a casa alguien me siguió y me tomaba fotos, no me gusta sentirme vigilada.

 

—Al menos tienes publicidad gratis para tu negocio _ comenta mi amiga, una leve sonrisa aparece en mis labios.

 

—Pero a que costo — suspiro abrumada por tanta atención sobre mí.

 

—Cariño ¿Quien dijo que el amor es fácil? — termino de comerme el muffin, me despido de ella mientras me quito el delantal y tomo mi bolso.

 

—Hablamos luego — digo ya en la puerta.

 

—No puedes evadirlo para siempre — es lo que recibo como respuesta.

 

La musica suena de nuevo en mis oídos hasta legar a mi tienda, abro la puerta y enciendo las luces, coloco el letrero de abierto y enciendo la pc, abro los links de la cuentas de la tienda y los nuncios sobre mi relación con Henry aparecen y con ello miles de comentarios negativos.
No hagas caso a los comentarios repito eso en mi mente, es como si un fuego entrara en mi cuerpo, todo me arde, todo lo veo en rojo furia.

 

***

 

—Hijo ¿Estas consiente de lo que le vas a pedir? — la mirada de mi mamá es de preocupación, no sé cómo lo valla a tomar mi novia, apenas ha abierto su tienda, invirtió todo lo que tiene en eso y no tiene a nadie quien le ayude, ella es la diseñadora y la vendedora.

 

—Si mamá pero ya no hay vuelta atrás, ya los medios lo saben y yo estoy seguro de lo que quiero hacer — no es solo un amor de juventud.

 

Solo espero que Aurora acepte, sé que es mucho lo que voy a pedirle, pero el tiempo se nos acaba y no quiero estar lejos de ella.

 

***

Al terminar el día y nada más volver a mi casa, dejo el bolso sobre la mesa y llamo a mi novio.

 

—Hola amor — digo al contestar, camino hasta el refrigerador y lo abro sacando la jarra con agua de naranja — como te fue hoy — en todo el día no hablamos y extrañe tanto hacerlo.

 

—Bien, estuve trabajando a distancia con mi padre — hace una pausa y solo puedo escuchar su respiración.

 

—Amor que pasa — escucho su suspiro, estoy preocupada y solo pienso en una cosa — te veo en diez minutos.

 

—Amor de verdad no es nada — intenta impedirlo, algo se trae y no puedo esperar.

 

Mi celular se apaga por haberse descargado, guardo la jarra y tomo mi bolso de nuevo, solo espero unos cuantos minutos y pasa un taxi.

 

***

 

Intento llamarla pero me manda a buzón, no estoy preparado para esto, apenas hoy le conté a mi mamá, mirando el techo de mi cuarto escucho el timbre de la puerta y mi madre habla con ella, rápidamente me levanto de la cama pero término cayendo como aquel día en su casa.




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