CAPITULO 7

• Ten – aparece una barra de chocolate frente a mi – vi que no comiste absolutamente nada en el almuerzo, no es nutritivo, pero, algo es algo – dice Lou alzando los hombros
• Gracias – digo con una sonrisa
• ¿Te apetece salir en alguno de estos días? –
• ¿Tu hermano no te dijo que no quiero que te acerques a mí? –
• Digamos que no me importa, recuerdo que menciono algo de que eres como una bomba de tiempo, que algún día vas a explotar y que no quieres dañar a nadie – muerde su labio – pero, no me importa salir dañado si es por ti – sonríe haciendo que unas arruguitas en sus ojos se marcaran
• Tus ojos – susurro sonriendo
• ¿Me dejarás conocerte? – sonríe de manera tierna
• Pero, prometeme que cuando sientas que te falle, te alejes de mí, realmente no quiero hacerte daño – susurro
• Tranquila, no creo que eso llegue a pasar –
• Esperemos – susurro

La clase empezó, y en esta si presté atención, era historia, y yo amo la historia, y como primer producto, la maestra nos juntó en parejas para hacer esta investigación, sobre la revolución industrial, y era como estábamos sentados sonreí al saber que estaría con Lou y no con algún extraño que me mirara raro.

Los últimos minutos de la clase se basaron sobre las dudas acerca del proyecto, de cuanto valdría y cosas por el estilo, anote todo en mi libreta para poder hacer un trabajo de 10.

El timbre sonó y después de despedirme de Mike, me dirigí a mi última clase, era química, esta si no me gusta para nada.

Esta clase la compartía con Ed y Crystal, y para ser sincera no me agradaba aquello, y no lo decía por Ed, si no por su prima, por suerte él se sentó conmigo.

A mitad de la clase, el maestro nos dejó unos ejercicios que a mi entender, no entendía nada, sentía que hablaba en otro idioma cuando estaba explicando.

• ¿Podrías ayudar a esta pobre alma que no logra entender nada de lo que esta escrito? – digo haciendo una cara triste en dirección a Ed, que solo se ríe
• Claro que sí, pobre alma – dice burlón

Empieza a explicarme, y puedo decir que si le entendí y mucho mejor que al maestro, al terminar los ejercicios me levanto y dejo mi libreta en el escritorio para que el maestro los revisara.

• ¿Has pensado en ser maestro?, te entendí mejor a ti que a él – digo señalándolo con la mirada
• Puede que si – dice pensativo – pero no tengo paciencia con los niños – dice con una cara de horror
• Nadie dijo que con niños, puedes enseñar a los de nuestra edad – digo dando opciones
• Pero es peor – dice alarmado – si de secundaria, son muy inquietos y si son de preparatoria no te hacen caso y es peor – dice negando con la cabeza – mejor me dedico a otra cosa – dice riendo - ¿Tú has pensado que estudiar?
• Tal vez abogada – digo restándole importancia – sinceramente no me he detenido a pensar en mi futuro, pero ser abogada me llama la atención, poder defender a la gente inocente, suena bien – dice pensante – pero, también ser escritora no sería nada mal, me encanta escribir y leer, ¿Qué mejor que hacer ambas? – digo sonriente
• Cualquiera de las dos que elijas te ira muy bien, lo sé – dice animándome

Después de eso, el maestro nos entregó nuestras libretas y la próxima tarea, y por fin las clases han terminado.

Me dirigí hacia mi casillero, para dejar los libros de los cuales no tenía tarea. Iba caminado por los pasillos del colegio en camino hacia el estacionamiento para esperar al chofer y llegar a mi casa y descansar, pero alguien me jalo del brazo haciendo que me detenga y que el miedo en mi interior creciera.

• Por fin te encuentro sola – dice el chico – ahora si nadie te salvará de esto – dice burlón, fue ahí cuando recordé quien era, el chico de la fiesta el cual me estaba jalando
• No me toques, alejate de mí – digo gritando
• Grita todo lo que quieras, nadie te escuchará todos ya se fueron – y empieza a besarme el cuello, y me hace sentir asquerosa y seguí tratando de alejarme de él – carajo, deja de moverte, ya te dije que nadie te salvará – y fue donde mi mente se desconectó y dejé de luchar, pues tenía razón ya todos se habían ido, los pasillos estaban vacíos