"Oye, dejaste tu máquina de escribir".
Eres tú y todo lo que me haces sentir. La musa que me inspira y seguirá viviendo en cada uno de mis escritos, soy y seré el artista que jamás dejará de plasmarte.
--- 𖦹
En las páginas de este libro, te revelo una crónica de mis pensamientos y sentimientos más íntimos, plasmando mis palabras más sinceras y mis confesiones más vulnerables. Nunca he podido expresarme de la mejor manera, ya te habrás dado cuenta, pero he querido intentarlo de la mejor manera posible.
La creación de este libro ha sido un proceso impulsado por una serie de momentos de inspiración que he experimentado a lo largo del tiempo. La idea inicial surgió durante una crisis personal que viví hace más de un año, y desde entonces, he estado trabajando en la elaboración y reflexión de mis ideas y sentimientos. Aunque el resultado pueda parecer simple, quiero enfatizar que el proceso creativo ha sido un desafío significativo y una experiencia enriquecedora para mí.
Aunque estas páginas no contienen la totalidad de mi obra escrita, he seleccionado y compartido los fragmentos más representativos de mis pensamientos y sentimientos. Espero animarme a reescribir y compartir en el futuro aquellos escritos que no han sido incluidos en este volumen.
Me gustaría poder agradecer a mi musa, por ser la chispa que encendió mi pasión dentro de este libro. Aunque este trabajo no es el más pulido, es sin duda el más sincero y honesto. Y si aquella chica llega a leerlo, solo quiero que sepas que siempre estaré agradecida por haber compartido parte de mi vida contigo, y que nuestra amistad, más allá de los vaivenes del amor, es y será siempre invaluable.
---
Nuestro primer encuentro es un momento que siempre recordaré con claridad. En ese momento, mi tendencia a ser introvertida me hacía sentir ansiosa al interactuar con otras personas, pero contigo fue diferente. Sin saber cómo, me encontré hablando contigo con una naturalidad que me sorprendió. No puedo siquiera imaginar cómo habrían sido las cosas si no te hubiera hablado. Siempre estoy muy agradecida por haber tenido el valor de acercarme a ti y por todo lo que ha surgido de esa decisión.
Aunque no puedo explicar cómo sucedió, de alguna manera establecimos una conexión profunda que perduró durante muchos años. Nuestros encuentros diarios en el transporte se convirtieron en el momento más esperado de mi día, fue nuestro espacio más íntimo en donde compartimos muchas cosas juntas. Nunca te lo dije, pero siempre hablaba de ti con personas cercanas a mí, eras mi tema favorito de conversación, creo que se lograba notar lo feliz que fui a tu lado. Haber crecido junto a ti fue algo necesario para mi vida, tu presencia marcó un antes y un después en mi esencia como persona.
Hubo un período de tiempo en que nos alejamos debido a la pandemia, fue un momento difícil para muchas personas, y también lo fue para mí. Me desvíe de mi ruta y no logré adaptarme, mi depresión comenzó en ese momento y estaba realmente jodida. Pero entonces, recibí un mensaje tuyo, no te imaginas lo feliz que me sentí en ese momento. Mi amiguita me había vuelto hablar luego de tanto tiempo, tu compañía y apoyo fueron fundamentales para mí en aquel entonces, y una vez más, nuestra conexión demostró ser fuerte y duradera.
En ese período, tomé decisiones que aún me pesan. A veces me cuestiono si fue acertado involucrarme contigo en ese momento, no me malinterpretes, solo no estaba en mi mejor momento. Mi incapacidad para comunicarme abiertamente, mis cambios de humor y mis problemas familiares fueron desafíos que no pude superar adecuadamente, y lamento que hayan afectado a nuestra relación. Me hubiera gustado ofrecerte mi mejor versión, haber mejorado para seguir compartiendo experiencias contigo y hacerte feliz. Sin embargo, algo dentro de mí me decía que debía dejarte ir, no quería que estuvieras con alguien que estaba luchando con problemas de salud mental y que no podía darte lo que merecías en ese momento. Te dejé ir, y para empeorar las cosas, también me alejé, uno de mis peores errores.
Si soy sincera, estaba aterrorizada. Por una parte, me sentía herida por no haber podido darte lo que merecías, ya que mis sentimientos hacia ti eran muy profundos. Sin embargo, mi miedo al rechazo y a la reacción de los demás debido a mi orientación sexual me impidió expresarme de mejor manera. Solo era una chica que anhelaba ser amada por otra chica, sigo sin entender por qué eso les afecta tanto a los demás. Me sentí abrumada por la presión y mi condición emocional se deterioró aún más al alejarme de ti. Aunque sé que no hay justificación para mis acciones, lamento si te causé dolor, no fue mi intención, solo estaba paralizada por el miedo.
Con el tiempo, volvimos a acercarnos, aunque de manera diferente a como había sido antes, la conexión entre nosotras seguía palpable. Para mí, fue una experiencia extraña desde el principio, ya que quería volver a acercarme a ti, pero dudaba si era lo correcto. Me resultaba difícil descifrarte y, a pesar de mis intentos por expresarme a través de pequeños detalles, me cerré debido al miedo de perderte otra vez. Lamento no haber podido expresarme de manera más efectiva en ese momento, ya que aún estaba luchando por mis propios miedos e inseguridades. Aunque hubo aspectos que no supe manejar, he progresado significativamente en los últimos años y superar obstáculos que me impedían avanzar en mi proceso.
Independientemente de que mis sentimientos ya no sean correspondidos, siempre te tendré en alta estima y te querré con la misma intensidad que he sentido durante estos años. No puedo precisar el momento exacto en que me enamoré de ti, pero fue una experiencia que me marcó profundamente. La intensidad de mis sentimientos hacía ti ha sido algo que nunca había experimentado antes, y es probable que no vuelva a sentir algo similar en el futuro.