Tu Profesor de Besos

18- Un doloroso Pasado

 

Aquí estoy en la clase de física pensando mil cosas, mis padres se sorprendieron por mi cambió de look, me corte el cabello, me hacía falta, quería una nueva faceta mía. No sé cómo iré con Paolo, no sé qué excusa poner a mis padres, sinceramente no me reconozco. ¿Por qué no le digo que no y ya? alguna vez terminará todo este jueguito.

Le iré a buscar para preguntarle, pido permiso a la profesora para ir al bañó, es obvio que le mentí no iría ahí, si no a buscar a Tormenta y también me salvo de la clase aburrida. Llegó a la construcción y le veo, camino hasta llegar a él y este me mira sorprendido. 

~¡Pastelito! ¿que te trae por aquí? - me pregunta Paolo muy emocionado y amable 

Alguien amenecio de buenas 

~¿Dónde iremos hoy en la noche? - pregunto de una, ir al baño no demora tanto 

~Es sorpresa, no te lo puedo decir - responde mientras anota algo en su cuaderno 

~¿Que excusa le pondré a mis padres?, yo solo salgo a escondidas contigo y esta vez es de noche, no podría ir, entonces no me busqués - digo y este asiente lentamente con la cabeza

~Esta bien Pastelito, será otro día - me dice y me guiña, me voy casi corriendo 

¿¡Qué!? ¿Así de fácil fue?¿Será que esta bien?, fue muy fácil decirle que no y acepte. 

 

Al salir al recreo, las chicas y yo caminamos por todo el colegio, es un día tranquilo soleado, ya termina marzo nuevamente, es como si el calendario está modo flash. No sé en que universidad ir y la universidad de diseñadores gráficos son muy caros, Sol puede ir por que tiene dinero en cambio yo no, apenas mi hermana puede ir a su universidad ya que trabaja para pagar sus estudios. Veo a Miguel venir hacia nosotras. No me gusta hacer esto, no merece ser utilizado de esa manera Miguel. 

                                         

 

 

 

                                            ***

                                         Paolo

Cuando llega la noche, voy para la casa de Greta, cambie de planes no la llevare en el Observatorio Astronómico si no en mi departamento. Salto por la muralla del vecino, gracias a Dios que no tiene perro, busco la ventana de Pastelito, una vez que la encuentro la llamó por el celular. 

-¿Que tal Pastelito?, ¿por qué estas despierta a estas horas? 

-Primero que nada la única que hará preguntas seré yo, ¿por qué demonios me llamas? 

-No digas demonios en la noche, te llamé para que veas la ventana, ábrela 

-¿Estás loco o eres un ladrón? 

-La primera siempre fui, la segunda escogí como profesión ahora, ¿No abrirás la ventana? - Abre la ventana de vidrio y yo pongo mi brazo por la ventana 

~¿Que piensas robar aquí? - pregunta sin importancia y quita mi brazo 

~ A ti - respondo sonriendo malicioso 

~ Como si valgo mucho - responde rodando los ojos

~Claro que vales mucho, tus órganos valen mucho, vender en el mercado negro sería hacerse millonario - digo y Greta me da un golpiza - ¡Oye!, vamos bájate, saldremos 

~No iré a ninguna parte contigo Tormenta, será un peligro para mí, sabiendo que es de noche y mis padres duermen - me explica y yo ruedo los ojos

~No es peligroso, el único peligro lo tienes enfrente - comentó y ella cierra la ventana, varios minutos después la abre y salta por la ventana, con otra vestimenta. 

~Bueno vamos, ¿saltaremos por la muralla? - pregunta y yo asiento con la cabeza. 

 

... 

Una vez que llegamos a mi departamento subimos en la terraza del edificio, nos sentamos a mirar la ciudad y los autos pasar, la noche es bastante tranquila y serena. 

~¿Porqué me trajiste aquí?, es muy bonito mirar la ciudad desde muy alto

~Greta, mañana iré a España tengo que estar pendiente a mi otra empresa, volveré en una semana, te traje aquí porque necesito soltar el nudo de la garganta - digo un poco apenado 

~Claro, puedes contarme lo que quieras, esta vez seré yo la psicóloga - dice y yo echo una risita

~Te contaré mi vida Greta, se que no somos muy amigos, no tienes mucha confianza en mí, pero igual te diré. Yo empecé a trabajar a los dieciséis años cuando mi familia murió en un accidente, yo ese día me salvé por alguna razón, siempre quise morir. En ese automóvil iba mi madre Patricia era la madre más sincera, era la secretaria de mi padre se conocieron ahí, mi padre Jorge era un hombre de negocio muy poderoso, tenia varios enemigos. Un día algunos mafiosos le amenazaron que si no renunciaba le iba a ir muy mal y así fue mi padre no renuncio lo que tantos años le costó estar en esa silla como jefe, le secuestraron a mi hermana, mis padres dieron todo los dólares que podían para que la dejarán, pero con eso conseguimos que ella muriera. Teníamos catorce años. El accidente en el auto fue cuando íbamos en el velorio de mi hermana, estaba atrás y solo vimos un auto venir y impactó sobre nosotros, el auto aplastó a mis padres pero no a mí - le cuento y secó una lagrima que caía por mi mejilla, Greta se para de la silla y me da un fuerte abrazo, nos quedamos ahí varios minutos y luego nos soltamos, me tranquilizó poder oler su perfume de cereza - Mañana será ocho años de eso, por esa razón también iré, porqué soy  español pero vine aquí a los quince a rehacer mi vida, pero no puedo olvidar esa tregedia. 

~ No sé que decirte, solo que tú eres fuerte y no hagas ninguna tontería, te daré mi mano para lo que necesites, tu me diste la tuya ahora yo la mía, te prometo - dice Greta dulcemente y yo le sonrió 

~¿Ya te caigo bien? - pregunto con malicia

~Ya lo veremos, Sr. Tormenta - dice sonriendo de lado

~Bueno te llevo a casa Pastelito, no quiero que estés en problemas - comento y empiezo a bajar por las escaleras 

~ Tú ya eres mi problema - responde y me sigue

 

 

Sé que me enamorare de ti, Pastelito

Y.. no es algo que quiera hacer



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En el texto hay: amor amistad odio

Editado: 17.11.2020

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