45- Detenido

                                                 Paolo

Fue una semana realmente cansada, puse mi tiempo y energía en la empresa, Iván me ha dicho que todo marchaba con normalidad y no me preocupe, igual hice todo lo que un jefe debería hacer y me siento bien e aliviado por resolver las cosas en la empresa, por lo menos en lo laboral mejore las cosas. Finalmente Bruno se enteró de lo que me pasó y desde ese día me mira con odio, estoy tomandolo tranquilo, ya que esa cara llevaré hasta que me muera, Bruno es un poco extremista en ciertas cosas, llegó el fin de semana y salimos a tomar un poco y relajar las cosas, pero no funcionaba sino empeoraba, Alex es pésimo dando planes. 

~Te dije bien Paolo, te lo había dicho una y mil veces que no hagas eso con ella, te lo mereces. Es la única razón que no confío en ti, te conozco perfectamente bien, caes mal hombre muy mal - me regaña Bruno alterado,las cosas aquí no saldrán bien. 

~A ver Bruno, jamás quise hacerlo, y ni siquieras sabes lo que siento, así que callate - respondí furioso, uno queriendo hacer bien las cosas y le sale todo lo contrario. 

~El aura de odio se siente hasta aquí muchachos, es mejor que se calmen - se interpone Alex intentando evitar una pelea entre los dos

~¡No te metas enano, tú no sabes nada de esto! - exclama Bruno y Alex se queda con la boca abierta, este paga la bebida y me empuja - Espera que todavía no terminó, quiero preguntar algo más –Alex deja de empujarme y se cruza de brazos - ¿Realmente la quieres Paolo? - preguntó mirándome a los ojos, echo un suspiro sonoro y bajo la cabeza - Con eso obtuve muchas respuestas Paolo, estás completamente ofuscado

~¡Bueno ya! mi vida no marcha bien en estos momentos y recordármelo no me ayuda, sólo vamos a casa ¿sí? - digo y salgo del bar, los chicos me siguen y subimos al auto de mi tío Manuel, Alex ya obtuvo su licencia de conducir así que el maneja, nos subimos y me siento atrás y Bruno se sienta adelante - Podemos ir a mi departamento, ya es tarde y no quiero despertar a nuestros tíos - Alex asiente y se dirige para allá. 

Estaba destrozado con el corazón hecho pedazos otra vez, nuevamente tenía que olvidar este sentimiento, ya no tenía solución nada, me rindo, el amor no es para mí. Mientras miraba por la ventana recordaba cada momento que pasé con Pastelito, la extrañaba en el fondo, sus ojos cafés y piel morena, su tierna y dulce sonrisa, tal vez un poco despistada y torpe, pero era perfecta. Pero no puedes tenerlo todo en la vida, seguiré siendo el farsante de siempre. 

Llegamos y nos bajamos tranquilamente, no habíamos tomado mucho así que todo estaría mejor si habláramos y nos acostemos a dormir, busco la llave en mi bolsillo y lo encuentro, miro a mis primos y le hago una seña para que me sigan. Subiendo por el ascensor me alegre un poco ya que las cosas estaban marchaban bien. 

~Paolo eres un buen hombre, si la quieres realmente por favor lucha por ella, pero primero piensa en tu salud mental - dice Bruno un poco dudoso, se perfectamente a lo que se refiere no me amo a mi mismo como podré amar así, más con todos los tormentos que viven en mi cabeza, es tarde muy tarde. 

Nunca es tarde para lo que realmente quieres tener - dijo mi cabeza y se quedó en un completo eco dentro 

~¿Sigues tomando tus pastillas? - pregunta preocupado Alex, lo miro nervioso, hace mucho que lo dejé, encontré un remedio más eficiente para calmar mis tormentos. O alguien curó eso en mi, pero creo que volvió. 

~Lo deje hace mucho, no quiero hablar del tema - evite más problemas, llegamos a mi piso y avanzamos, nos encontramos con varios policías, registrando mi habitación, me quedé perplejo y con una curiosidad inmensa. 

~¿Eres Paolo Franco? -me pregunta un policía acercándose hacia nosotros, asiento serio - Queda usted arrestado, tiene derecho a permanecer en silencio. Cualquier cosa que diga podrá ser utilizada en su contra en un tribunal. Tiene a la asistencia de un abogado durante su interrogatorio. Si no puede pagarlo, se le asignará uno. 

Mi mente se nubló por completo, sólo sentí las esposas apretar mis muñecas, los gritos de Bruno y Alex y que me subía en el automóvil de los policías. 

                                                     ***

Parecía de película, estaba pagando un karma ajeno o la vida simplemente me odiaba y quería verme sufrir, pensé que volver estaría bien pero ahora veo que no, tome una mala decisión. Todavía no estoy en la cárcel pero estoy arrestado en la estación de policías. Debatimos profundamente con los muchachos y quedamos en no llamar a mis tíos pero la cosa se puso fuera de nuestro alcance y Bruno fue a buscarlos. Después del interrogatorio dije todo lo que sabía, resultó un poco confuso el porqué de mi arresto. 

~¿Tengo cara de un consumidor de drogas? - le pregunto a Alex asqueado y este me mira detenidamente 

~Tienes un labio partido, pareces que no has dormido nada prácticamente luces como un muerto. Además de lucir como un completo gótico. No para nada amigo - bromea Alex y lo miro mal, apoyo mi cabeza con la reja y me golpeó repetidas veces. 

~Pero nunca he consumido, bueno una vez sí, pero fue experimental y jamás lo volví a consumir. La pregunta aquí es ¿porqué tendría droga en mi departamento? ¿Quién lo puso ahí? ¡Ahg! - suspiro frustrado, definitivamente la vida me estaba dando un gran golpe, ya con todos los golpes que me dio, quiere que siga luchando. 

¡Pero por favor, sólo matame ya!

~Realmente estas pagando un karma que no es tuyo, buen punto tú eres rebelde pero no para hacer estas cosas, ahí llegan mis padres - avisa Alex y yo me siento en la pequeña cama que tenían a mi lado 

Cálculo todo lo que hice en estos meses quedandome aquí, realmente no estaba haciendo bien las cosas. Había salido en fiestas, pero jamás llevé a nadie en casa. 

~Oh Paolo, me duele verte tras las rejas, los oficiales dijeron que te van a interrogar en unos minutos otra vez, sabes que estamos aquí para apoyarte - dice mi tía Angela y yo me levanto, ella toca mi mejilla suavemente - Bruno quedo en casa para cuidar a Angie, así que no vendrá.