Tu y yo en la eternidad 2

Capítulo 17

Una hora después de ingresar al hospital su hija ya había nacido, era hermosa cabello castaño y ojos azules como su madre.

-Es tan hermosa como vos amor. Qué nombre le pondremos?

-Estuve pensando un nombre y espero que te guste. Rosé Dornan Grey.

-Es el nombre justo para ella, es tan hermosa como una rosa.

Unas horas después recibieron la visita de su hijo mayor y el resto de la familia. Venían cargados de regalos para la nueva integrante de la familia.

Cuando volvieron a su casa ya eran una gran familia, Alexia sentía que la felicidad era posible y que su vida tomaba el camino que ella tanto soñó.

Vivían sus días trabajando y criando juntos a sus hijos. Cuando Rosé cumplió un año Alexia empezó a trabajar en una escuela, mientras ella estaba en su trabajo Christian cuidaba a los niños. Cuando salía de su trabajo volvía a la casa y el iba a la oficina a firmar papeles y regresaba rápido a su casa para no perder tiempo de estar con su familia.

Cada tanto se tomaban un fin de semana para estar solos y descansar de tanto trabajo, además aprovechaban a tener encuentros sexuales más fogosos, ya que en la casa a veces se le complicaba por los hijos.

-Amor qué te parece si este fin de semana vamos a Aspen, tu y yo solos, qué te parece?

-Christian me gustaría  mucho, pero solo dos días, no quiero dejar mucho tiempo solos a nuestros hijos.

-Como usted ordene señora, iremos solo dos días. Prepara todo que a primera hora mañana nos vamos.

Alexia se puso a preparar todo para el viaje y le pidió a sus suegros que cuidaran a sus nietos el fin de semana, ellos felices aceptaron porque los niños llevaban alegría a su casa.

Así el sábado a primera hora viajaron, se instalaron en un hotel en Aspen, era muy lujoso y tenía una hermosa vista de las montañas. Aprovecharon para descansar un poco y luego fueron a cenar a un hermoso restaurante. Durante la comida charlaron mucho sobre cómo les iba en los trabajos, disfrutaron como cuando eran solo ellos dos.

Volvieron al hotel caminando ya que el restaurante solo estaba a una cuadra. Subieron a la habitación y cuando entraron Christian la tomó en brazos, la llevó al dormitorio y la depositó en el suelo. Le saco el abrigo y la beso desde el lóbulo de la oreja hasta la comisura de la boca. Se sacó su saco, el pullover y la remera, quedó solo con los pantalones. La puso de espaldas y le bajó el cierre del vestido, a medida que lo hacía deposita besos y entre cada beso le decía: "Eres la mujer más hermosa, te voy a amar siempre". Deslizó el vestido por sus brazos y cayó al suelo. El se quedó detrás de ella.

-Alexia rodea mi cuello con tus brazos, muy bien amor. Tus pechos son tan perfectos y bellos, acariciarlos es algo increíble. Date vuelta y sácate la ropa interior. Eres mi diosa.

Alexia se acerca a su esposo y lo ayuda a sacarse el pantalón, antes de que el reaccione ella toma su pene y lo cubre con su boca. Con sus dientes cubiertos por sus labios recorre la extensión del miembro, que entra y sale de su boca, va aumentando el ritmo, la respiración de él se agita y con tanta atención llega a un orgasmo que lo arrolla. La toma de los hombros y la coloca en la cama, se termina de sacar el pantalón y se acuesta a su lado.

-Señora Grey su osadía me ha tomado por sorpresa. Ahora es mi turno de disfrutar de su bello cuerpo.

Comienza a besar su cuello mientras su mano recorre su cuerpo, acarician con ternura sus pechos y toma entre sus dedos los pezones, su boca sigue el camino que hicieron sus manos, besando hasta llegar a los pechos donde succiona un pezón y el otro lo presiona con los dedos. La respiración de ella comienza a ser más rápida, su cuerpo se mueve al ritmo de las caricias. El sigue su camino besando su vientre hasta llegar al monte de venus. Primero sopla y la hace gemir. Con su lengua comienza hacer círculos sobre su clítoris. Ella ya no controlaba su cuerpo, sentía que ascendía más y más. El introdujo un dedo en su interior mientras seguía con su atención sobre el clítoris, cuando noto que ella casi estaba por llegar introdujo un segundo dedo. Esto hizo que ella llegará a un órgasmo que la hizo sentir que dejaba la tierra, pero antes de poder volver él la penetró, suavemente le hizo el amor, disfrutando cada centímetro de ella. Lentamente fue acelerando y esta vez los dos llegaron juntos al orgasmo, ella dijo su nombre como una plegaria y el noto que ella tenía lágrimas rodando por sus mejillas.

-Alexis por qué lloras? Te hice daño?

Christian estaba preocupado por verla así.

-No Christian son lágrimas de felicidad. Soy la mujer más feliz del mundo y ahora se que seremos felices por siempre. Te amo, te amare en esta vida y por mil años más.

Luego de esta declaración Christian, que también tenía lágrimas, solo pudo abrazarla y besarla, se quedaron así por un largo tiempo. 



#8079 en Fanfic

En el texto hay: amor, accion y drama, jamiedornan

Editado: 17.10.2018

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