Cuarta parte.

No me importaba la hora ni si derribaba la puerta. Necesitaba saber si estaba aquí. Y debía estarlo ya que no la encontré en casa de sus otras amigas. 

—¿Jeff? ¿Qué haces aquí? ¿Le pasó algo a Lilian? 

—Ketherine. Por favor no me hagas eso. Sé que ella está aquí. Llevo toda la noche buscándola y este es el último lugar donde voy y sé que debe estar aquí. 

—No. Se fue hace horas. Dijo que volvería a casa, contigo. ¿No está allá? 

—Eh, pero… yo vengo de ahí y no está. ¿Estás segura que no te dijo si iría a otro lado? 

—Claro que sí. Además ella no te mentiría. 

—Por supuesto. Como cuando dijo esta tarde que hablaba con su ex, cuando en realidad hablaba contigo —. No pude evitar mencionar el detalle. Ella era cómplice de su escape. 

—Pues claro que hablaba conmigo. Ella no le cuenta cosas personales a sus amigos. 

—Entonces por qué me mintió — inquirí con desesperación. La teoría de Yannis no me había convencido mucho. 

—Porque te estaba probando Jeff. Y le diste la mejor respuesta de todas. No confías en ella. 

—Y qué esperaban ustedes dos. 

—Un poco de comprensión — soltó alzando la voz —. Tan solo un poco de tu comprensión y ese amor incondicional que decías tener. Pero ahora que te veo aquí, tengo claro que era todo mentira — dijo dándose la vuelta para dejarle solo en la puerta. 

—No. Alto ahí. Yo amo a Lilian. De eso estoy seguro — me defendí siguiéndola.

—Pero no confías en ella y sin eso, no hay amor ni relación que sobreviva. 

—Cómo puedes ser tan cínica. Ahora veo que fuiste tú quien la convenció de decirme todo y salir corriendo si salía mal. 

—Al contrario. Es una lección que ella me enseñó. ¿No lo ves? Ella solo quería decirte todo Jeff. No quería secretos contigo. Estoy seguro que sabes cosas de ella que ni siquiera me ha contado a mí que soy una de sus mejores amigas. Porque ella es así. Ella confía en las personas. 

De repente Kath parecía tan enfadada y frustrada como yo. 

—Es una verdadera pena, sabes. Yo creí que esta vez sí funcionaría. Creo que por fin había encontrado lo que ella tanto necesita y se merece. Creí que ese por el que tanto ha soñado y estado esperando, eras tú — dijo mirándome con decepción. 

—Tengo que encontrarla — le dije saliendo a toda prisa. 

Regresé a la casa pero no estaba ahí ni había señales de que hubiera vuelto. Recibí entonces un mensaje de Thomas preguntando si ya había podido reunirme con Lilian. 

〈Aún no〉 Tecleé en respuesta. 

〈Debe estar en algún lado. Tal vez en uno que sea importante. Para los dos〉

〈Es como una aguja en un pajar〉

〈¿Dónde se conocieron? Yannis dice que tal vez esté en algún lugar donde tuvieron una cita o paso algo importante〉 〈Avisanos si la encuentras〉

¡Claro! Por qué no lo pensé antes. Aunque era tardísimo, cabía la posibilidad de que estuviera ahí. Eche a correr hasta nuestra cafetería "Los tres peces". Por supuesto estaba cerrado pero pude ver gracias al reflejo de las pocas luces del interior, que había alguien sentado cerca de la puerta. ¿Era ella? 

—¡Lili! — grité desde el otro lado de la calle.