Sin oportunidad.

Kim Hyunsoo esperaba sentado en el sofá de la oficina, sus manos se mantenían unidas y aunque trataba de estar tranquilo, sus dedos moviéndose demostraban otra cosa. Los chicos a su alrededor guardaban silencio y nadie se atrevía a ser el primero en iniciar una conversación, en otra ocasión aquello sería sencillo de romper, una broma, cualquier comentario, pero no en ese momento en que esperaban a dos de sus miembros no con mucho agrado.

Aunque los chicos eran bastante buenos para guardar los secretos entre ellos, de alguna manera la actitud de Jungkook les había llamado la atención a los altos mandos de la empresa. Generalmente era quien más canas verdes les sacaba y deberían estar acostumbrados, sin embargo aún les sorprendía aquel comportamiento de su vocalista.

Apenas abrieron la puerta Jung HoSeok perdió la gran sonrisa al igual que su amigo también lo hizo. Hobi de inmediato se sentó cerca de Suga quien mantenía el móvil entre ambas manos jugueteando. Jungkook tuvo que atravesar la sala hasta el otro lado en donde Jimin le cedió el lugar sobre el sillón.

El silencio siguió así por unos minutos hasta que Hyunsoo se levantó para llegar del otro lado del escritorio desde donde los miró a cada uno.

—¿Dónde estaban? — pregunto colocando las palmas de las manos sobre los documentos frente a él.

JHope miró en seguida a Jungkook quien para nada miraba a su compañero.

—Salí con una chica, — dijo y los seis se volvieron hasta él. — Hobi solo me acompaño si vas a regañarnos solo repréndeme a mi, él no ha hecho nada.

—Sí hice, — levantó la voz Jung HoSeok — olvidas que yo fui quien te insistió para acompañarte, así que si van a regañarnos que sea a los dos.

—Chicos yo sé que están agotados — siguió Hyunsoo — pero esto en lo que están, es su vida entera y lo saben, han cruzado fronteras, roto récords, son la imagen de cientos de marcas no pueden solo tomárselo a la ligera. Por favor salgan y dejen a Jeon Jung–Kook, quiero hablar con él a solas.

—Pero he dicho que también soy culpable. — JHope se levantó.

—Y tendrás tu llamada de atención Hobi, pero por ahora necesito hablar solo con Kookie.

Los seis chicos salieron en silencio, Jungkook se recostó sobre el sofá llevando los brazos atrás de su cabeza, estaba seguro de lo que le diría, las primeras veces le había causado bastante estrés pero ahora sabía ya cómo manejar la situación.

—Jungkook que sucede contigo, sales con chicas, quién es ella, por qué te arriesgas tanto solo para verla. Y lo peor, involucras a los demás en tus asuntos.

—Lo siento — se levantó rápidamente y agachó la cabeza — Kim Hyunsoo lo siento en verdad, lo que sucede es que estoy cansado de salir con chicas a las que ustedes creen buenas, conocí a alguien de una forma bastante diferente y lo mejor es que ella no me conoce, es decir no sabe quién soy dentro de estas paredes y me trata como si fuera cualquier otro chico, no entiendes que eso es lo que yo quiero, alguien que me mire como soy en verdad.

—Sabes que eso es imposible, te lo he dicho muchas veces, aunque te aferres a eso, eres algo más que un simple chico de Busan, eres un idol eres ejemplo y admiración, todos quieren ser tu, ser como tú, como todos ustedes por qué te cuesta tanto entenderlo.

—Quiero que alguien me ame.

—¡ARMY te ama!

—Y yo a ellos con todo el corazón pero no me comprendes, quiero algo más, una caricia, palabras tiernas pero que sean por mi, quiero que alguien me mire sin maquillaje y que así me acepte.

Hyunsoo lo miraba, podía notar en sus ojos lo que quería decirle realmente, todo ese trabajo, todos los años viviendo bajo ese yugo era más que lógico que necesitara un respiro y quería ayudarlo pero también quería mostrarle que no podía solo apartarse de lo que hasta ese momento era lo mejor para él.

—Lo hablamos una vez Jungkook, las admiradoras no estarán contentas si los ven saliendo.

—Entonces que fue lo de Jung Yerin, buscaban fotografiarme con ella, para qué, no crees que sería mucho mejor que nos vieran con chicas normales.

—¡No!, aunque no lo creas aún se debe de mantener esa distancia entre artista y fanático, esa fantasía que alimenta la atracción y la necesidad, el que sean inalcanzables mantiene la ilusión. Todo lo de las citas a ciegas sabes bien que es pura publicidad para las otras bandas, ustedes no lo necesitan esta claro, pero es todo un negocio.

—Pues no quiero que sea así conmigo, quiero un poco de libertad.

—Te hemos dado demasiada libertad, incluso tal vez más que a los otros, mira solo tus manos Jungkook cuando decidiste tatuarte no tomaste en cuenta nuestra opinión solo lo hiciste, o la vez que te fuiste de fiesta a un bar en plena pandemia, tuve que disculparme en nombre de toda la banda, solo te pido un poco de empatía y compromiso, sabes que te hemos dado mucho.

—Y cuándo podré tener algo solo para mi, — termino en el suelo con ambas manos sobre los ojos — solo quiero un respiro, no pretendo renunciar, solo quiero un poco de tiempo para mi.

—Tienes tiempo para ti Kookie — se acercó al chico y colocó una mano sobre su hombro, — solo que es difícil que lo veas ahora.

—¿Qué hay de Alicia? No puedo dejar de verla, no quiero.

—Tienes que hacerlo, conoces la situación, por el momento no puedes estar con ella, ni con ninguna otra chica.

Jungkook se levantó, se limpió el rostro y clavó la mirada en el hombre frente a él.

—¡Por favor! Solo dame una oportunidad, seré discreto, nadie lo sabrá.

—Lo siento no es posible. Mejor ve a casa, tienen un evento esta noche enviaré el auto a las ocho los quiero listos para esa hora.

Jungkook salió molesto cerrando la puerta con fuerza.