Borrachera.

La mañana empezó agitada, el itinerario se encontraba ya en la pizarra de actividades, prácticamente tendrían cosas por hacer todo el día, desde práctica de música, hasta paseo en canoa, Jungkook no se sorprendió, no esperaba menos así que se lo tomó con calma y comenzó su día.

Se mantenía callado aún, pensativo, sin embargo no se negaba a reír de las payasadas que sus amigos realizaban con tal de pasarla bien. La noche anterior NamJoon les pidió al resto del grupo que nadie hiciera mención del comportamiento del más joven, ni mucho menos debían mencionar a la chica, pues lo que menos quería era que estuviera pensando en ella.

Desde luego que todos hicieron caso al líder de la banda y nadie mencionó el tema frente a NamJoon, aunque cuando alguno de ellos se encontraba a solas con Jungkook, no lograban evitar las preguntas curiosas, por lo que la meta no se cumplía.

Pasaron dos días en los que se repetía la rutina, levantarse, ejercitarse, práctica, descanso, etc. Las cámaras los mantenían en la mira, cada noche encendían una fogata en donde todos se reunían a contar anécdotas de cuando recién se conocieron, era bueno sentir el ambiente relajado, esa noche las cosas cambiaron un poco.

No se había atrevido a beber más de lo permitido, tomó el par de botellas y las escondió debajo de su silla de jardín, escuchaba las bromas de Jin de las que forzosamente se reía, discreto bebía de una botella y después de la otra, era evidente lo que pretendía, nadie se había dado cuenta hasta que comenzó a reír como lunático de los chistes de Jin animandolo a que contará otro tras otro.

Taehyung y Jimin se acercaron discretamente al más chico, pues conocían muy bien aquella manera de actuar. Jimin lo tomó del antebrazo tratando de alejarlo un poco de los demás, Jungkook no espero y le pasó ambos brazos a sus amigos por sobre los hombros, era evidente que no se encontraba en sus cinco sentidos.

—¿Qué hacen? —decía Jungkook sin soltarlos. —Estamos pasando un buen rato, no me iré a dormir aun.

—Deberías dejar de beber, —sugirió Jimin, —NamJoon no estará contento si comienzas a decir cosas que no debes decir ante las cámaras.

—Por favor Jiminie sé lo que hago, comenzaras a reprimirme tu también.

—No haremos eso, solo queremos que dejes de beber, ya estas bastante ebrio.

—Tú, tu no tienes derecho a decirme nada, es tu culpa que Alicia la haya pasado mal aquella noche, y no digas que no tuviste otra opción Tae por que la tuviste.

—¿Qué querías que hiciera, negarlo, darles una dirección falsa? —agregó Taehyung.

—Sí, eso debiste hacer, se llama lealtad.

—Por favor no alcen la voz, —intervino Jimin. —volveremos a la fogata y estaremos tranquilos todos ¿esta bien?

—Dile eso a tu amigo —Jungkook miraba a Tae.

—Puedes decirme lo que quieras para eso estoy aquí frente a ti.

—Ya te dije todo lo que tenia que decir ahora solo no quiero hablarte, sigo molesto.

—De acuerdo —Taehyung dio media vuelta y regreso al jardín.

—Por favor Kookie compórtate —Jimin intento acomodarle el cabello un poco para disimular, lo tomó de la mano y juntos volvieron a la fogata.

Jungkook dejo de beber por un tiempo, cuando sintió que ya nadie lo vigilaba, tomó la botella y volvió a servirse en el vaso fingiendo que solo bebía Sprite. El ambiente comenzó a subir su intensidad pues los demás miembros también bebían. En un descuido, Jungkook se levantó y llegó hasta el hombre de la cámara que los filmaba, decía palabras que creía sin sentido y beso la cámara con efusividad.

HoSeok se dio cuenta y lo siguió, ambos sonreían frente a la cámara sin dejar de repetir que preferían a las latinas sobre las coreanas y que estaban seguros de que eran mejores mujeres que las de su propio país.

—Además ellas tienen piernas grandes — decía JHope, — grandes curvas — hablaba entre sonrisas sin dejar de mirar a la cámara.

—Sí, sí tienes razón hyung, pero la verdad es que yo sólo tengo ojos para una sola chica.

—¿A sí? Tu chica, ¿te gusta tanto tu chica? Pienso que su madre es más guapa, — se llevó rápidamente las manos a la boca y la cubrió apenado de sus propias palabras, pues su cabeza también parecía estarle jugando una broma.

—No te avergüences hyung, no de tus sentimientos. —tomo la cámara directamente —nadie debe avergonzarse de lo que siente por alguien, sin importar nada, tu, ustedes,  ARMY debes entenderme, yo las entiendo, son mis novias, pero algún día tendrán que cambiarme por alguien mejor para ustedes, así como yo encontré a alguien que me hace feliz a mi.

—Sí, jamas te avergüences —agregó Hobi, —las amamos, las amamos, pero amamos más a las latinas —comenzó a reír efusivamente.

De pronto HoSeok se cayó al suelo, Jungkook comenzó a reírse con fuerza, Taehyung tiro de él fuertemente, el más joven lo miró con furia a punto de sacar su ira cuando lo detuvo.

—Tengo el móvil, puedes hablar con ella. —Susurró Tae en su oído.

Pareció que de repente la borrachera desaparecía —¿Cómo lo hiciste? — dijo con intriga.

—Soy astuto como tigre ¿lo olvidas? Vamos a la habitación ahí podrás hablar.

Jungkook y Hobi siguieron a Tae hasta su habitación sin que los otros se dieran cuenta de lo que sucedía. Taehyung le entregó su propio móvil.

—Es el tuyo, ¿pretendes que hable de aquí?

—No levantarás sospechas —intervino Tae.

—Tae Tae tiene mucha razón, no sabrán el número al que llamas si lo haces de otro móvil.

Era cierto que Jungkook no confiaba del todo en Tae, pero confiaba plenamente en HoSeok. Comenzó a teclear el número y esperaba en la linea.

—Annyeong ¿Alicia? Soy yo, te extrañe mucho.

Taehyung lo miraba sonriendo.

Un capítulo más, espero les haya gustado. Y espero que esta noche y esta navidad la pasen muy bien, con mucho amor y paz y sobre todo salud para todos. ¡Feliz navidad! Les mando muchos besos y abrazos, gracias por su apoyo.