Tuy@ desde el verano

Capítulo 5

-Veo que te llevaste el scooter - durante el desayuno le comenta Reynaldo.

-Si lo lleve al mecánico.

-¿Eso significa que te quedas?

-Por el momento.

-Entonces podrás comenzar a frecuentar el hotel.

-Más adelante.

Escuchar eso hace que Reynaldo aprieta el puño. No le gusta el comportamiento de su hijo ni que sus conversaciones siempre sean así de secas donde dicen exclusivamente lo básico.

-Más adelante - repite. - ¿Y cuándo es eso? 

-Cuando termine con el asunto que tengo entre manos.

Silencio vuelve a acompañar el desayuno.


 

-Hola, hola - en el tono alegre está saludando Óscar acercándose a las chicas.

Klarrisa salta quedando delante de él.

-¿Qué haces aquí? - visiblemente nerviosa pregunta con las manos a la espalda.

-Escuche de que estabas con una amiga y vine a verlas.

-¿Cómo es que todos a mi rededor son tan chistosos? - pregunto con dramatismo Klarrisa.

-Bueno, no realmente, te vine a avisar que platicaré con Baldo, lo vine a esperar y en el camino pregunté por ti - aclara Óscar.

-¿Por qué quieres hablar con él?

-La última vez no terminamos y prometí que lo haremos a solas. ¿Quién es la amiga? - pregunta, ladeando el torso y bajando la voz.

-Nadie que te pueda interesar - con grosería responde. - ¿Te puedes ir? - suplicante pregunta.

-¿Cómo lo sabes y por qué me echas? - sospechoso pregunta.

-Es Ingrid ¿Ok? Ahora puedes irte.

-¡Ingrid! - pronuncia sorprendido para después formar una enorme sonrisa.

-Por favor - pide, cerrando los ojos.

-Déjame verla, ¿Cómo puedes decir que no me interesará? Hola, Ingrid - dice alegre, intentando quitar a Klarrisa y ver encima de ella a Ingrid.

-No, ándale vete, llegarás tarde - dice Klarrisa, bloqueandole la posibilidad de ver a Ingrid y empujándolo a la salida, lo que a él hace reír, sin embargo le permite.

 

Óscar decidió visitar el hotel con el fin de hablar a solas con Baldo, por lo que se enteró por Flavio cuando sale.

-Hola, ¿Listo para platicar? - lo pregunto cuando Baldo quedó frente él al salir del hotel.

-Um ¿Tú amas tomarme así por sorpresa? - pregunta Baldo.

Consiente de que habla Baldo, a Oscar le es imposible no reír.

-No era mi intención. Solo quiero terminar nuestra plática, ¿Si estás listo? Por supuesto - volviendo se serió, pregunta.

-Está bien, tú decide donde quieres llevarla - le contesta Baldo.

-Vamos - lo invita a caminar.

 

-Vamos a olvidarnos de que nos une Klarrisa y comportarnos como amigos - dijo Óscar.

Al ver que Baldo quedó desconcertado con lo que dijo, decidió explicarle las razones:

-Quiero que nos conocemos sin tomar a Klarrisa como la razón, si pensamos en ella entonces tú estarás nervioso y yo protector...

-Está bien tiene sentido - acepto Baldo.

-Vamos a sentarnos - propone señalando una cafetería.

-¿Con qué quieres que comenzamos? - pregunto Baldo mientras se sentaban.

-Esto no es una cita para qué hablamos de las cosas que nos gustan, así que podemos beber antes y entonces fluirá. Me interesa todo quiero saber que estás bueno para ella - se expresa.

-Bueno, supongo que Klarrisa te dijo que apenas vine a la ciudad, quise alejarme del entorno en el que vivía.

-Poco parecido a la razón por la que yo me fui a estudiar lejos... 

-Enamorarme de Klarrisa puso mi lógica de cabeza - confiesa Baldo. - Mi lema era vivir día a día y por Klarrisa eso ya no es posible, somos muy distintas si quiero que esto funciona por sus padres debo aceptar la idea de Ingrid.

-¿Idea de Ingrid? - extrañado repite.

-Bueno, no me fuerzan o algo por el estilo, la cosa es que si quiero quedarme con ella debo ser alguien representable frente su familia o...

-O les importará un bledo sus sentimientos y buscarán provecho.

-Exacto por eso Klarrisa junto Ingrid estaban buscando como prevenirlo, por el momento la que más suena es escribirme en un programa de estudios.

-¿De verdad estás dispuesto por una chica mandar a diablo todo lo que hasta ahora querías? - pregunto, incapaz de negar la sorpresa.

-Algunos amores son eternos, otros no, no sé cual nos tocara a Klarrisa y a mí, pero estoy listo para intentar todo para que dure hasta que nuestros corazones no dicen contrario.

Lo que apenas oyó voló la mente de Óscar.

-Entonces es todo dicho - dice, chocando las cervezas.

Óscar se quedó en silencio después de decir eso y con la mirada perdida en la distancia. Baldo hizo lo mismo.

-Acepte esta relación porque siempre apoyo a Klarrisa, en nuestra casa siempre es dos contra dos, sin embargo, después de lo que dijiste los apoyaré no para que ella no está sola en esto, sino porque me has convencido de que eres sincero, que tus sentimientos no son falsos y de que la amas... Desde hoy te buscaré como amigo y no enemigo - declara Óscar.

Resolviendo el punto más importante de la conversación, Baldo y Óscar siguieron hablando como amigos y conociéndose.


 



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En el texto hay: amor, amistad, ricoypobre

Editado: 01.04.2024

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