Twisted Mirrors

Capítulo 10: Dr. Joshua Collins

11 de Julio, 2023

Me levanté a las cinco de la mañana como siempre. Estos ultimos meses si consigo dormir dos horas lo considero un logro. 

Hoy se cumplen seis meses y aun no tenemos ni una pista que nos lleve a Sammy. Nisiquiera sabemos si sigue viva. Seis meses es tiempo mas que suficiente para que su cuerpo se disuelva en el acido clorhidrico. Basta. No tengo que pensar esto. Está bien.

Mientras desayuno repaso esa noche de nuevo en mi mente como todos los dias durante los ultimos seis meses.

―Arriba, bella durmiente ― digo entrando en la habitación de Sammy pero no la veo en la cama, así que asumo que salió a su visita de rutina al cementerio.

Veo la hora, seis y diez. Espero que vuelva pronto, sino llegaremos tarde al trabajo. Empiezo a preparar el desayuno para que esté listo con su llegada y prendo la TV para tener ruido de fondo. 

Seis y veinte. Le envio un mensaje preguntando si se demorará mucho mas. No hay respuesta.

Seis treinta. Una sensacion extraña en la boca del estomago hace que salga del apartamento para preguntarle al equipo de vigilancia si la vieron salir, pero me dicen que nadie salio del edificio desde que nosotros entramos anoche.

Seis treinta y dos. Llamo a Will.

Seis cuarenta y cinco. Todo el equipo entra por la puerta seguido de forenses y policia local.

―¿A qué hora se fueron a dormir? ― pregunta Will 

―Once cuarenta y cinco, estuvimos hablando un rato luego de comer y lavar los platos. 

―¿No salió?¿Seguro? ― ahora Will se dirige al policia que estaba en la puerta del edificio.

―Seguro, señor. Nadie entró ni salió luego de que la Agente Coleman y el Dr. Collins ingresaran a las instalaciones ― indica el policia.

―¿Alguien puede explicarme como mierda Coleman desaparecio si nadie entró ni salió? ― Andy estaba gritandole al equipo de vigilancia.

―Señor, revisamos absolutamente todo antes del ingreso de sus agentes y no había nada fuera de lo ordinario. Todos los residentes del edificio fueron sujetos a verificacion de antecedentes y cotejamos que no tengan vinculación con ninguna de las víctimas o posibles sospechosos ― dijo el agente bajando la cabeza ante el tono de voz de Andy.

No habia forma humanamente posible de que Sammy haya salido sin que la vean. Todas las entradas estaban cubiertas. Iba a decir algo, pero un agente gritó indicando que habia encontrado algo.

Al llegar a la habitación principal donde Sammy dormía, dentro del armario, había un agujero tapado con un panel para simular el fondo del mismo.

Mierda.

 

Asi que me encontraba repasando toda la noche, porque en ningun momento sentí ruido ni nada. Quien se llevó a Sammy era profesional, no dejó ni una fibra fuera de lugar. El unsub sabia que vendriamos aqui, burló toda la seguridad que pusimos. El agujero en el armario conectaba con el edificio aledaño, el cual no revisaron pensando que solo el edificio del apartamento podria estar involucrado.

Lo peor de todo, es que en los ultimos seis meses el Unsub habia aumentado su numero de muertes, las cuales nos comunicaba mediante cartas dirigidas a Sammy pero que enviaba a la oficina, por lo que sabiamos que era él. Cada 15 dias exactos llegaba una nueva carta, dandole un total de 12 muertes extra durante este ultimo medio año. Eso, sumado a las 34 que ya tenia. 

Antes de secuestrar a Sammy, tenía 33 muertes pero al dia siguiente llegó la primera carta. Las palabras las tenia grabadas a fuego en la mente desde ese dia: “Pueden encontrar a Lorenzo Montero (o lo que quede de él) en la planta potabilizadora. No se preocupen por Sammy, la va a pasar genial aquí.” Lorenzo era un narco argentino que traficaba niños desde latinoamerica para venta de organos, prostitución o esclavitud. 

Mi telefono sonó pero no estaba de humor para hablar. Eran las seis treinta y tenia que estar en la oficina. Nuevamente llaman y de nuevo dejo que vaya a buzon de voz. Al tercer llamado, contesto sin mirar quien está perturbando mi mañana.

―Más vale que esto sea bueno ― digo irritado

―Creen que la encontraron ― dice Will del otro lado.

Mi cerebro dejó de funcionar y sali disparado hacia la oficina. Nisiquiera sabia si estaban ahi, pero lo asumí. Llegué a la oficina en 7 minutos, cuando normalmente es un viaje de 15. Llevar las sirenas prendidas tiene sus ventajas. Bajé lo más rapido posible de mi auto y corrí adentro, esquivé a Mandy que estaba llorando y entré a la sala de conferencias esperando lo peor.

―¿Dónde está? ― dije desesperado, no sabia nisiquiera si era ella pero necesitaba verla.

―Tranquilo, ahora estamos por salir ― indicó Will.

―Pero ¿qué sabemos? ― ya me estaba poniendo nervioso.

―Encontraron a una mujer que concuerda con su descripción en una fabrica abandonada, pero con diferente color de cabello y un tatuaje que Samie no tiene. Su cara está golpeada y tiene la nariz quebrada, por lo que el reconocimiento facial no fue muy util ― dice para calmar mis nervios.

―Vamos ― añado y salimos del edificio lo más rapido posible.

De camino al hospital no podia dejar de morder mis uñas de los nervios. Si era ella, probablemente esté en muy mal estado por lo que me habia dicho Will. Solo espero que no le haya hecho nada mas que eso.

Will no terminó de estacionar y yo ya estaba fuera del auto corriendo hacia la entrada, Andy venia detras mio. En recepción, luego de lo que parecieron horas pero fueron segundos, nos indicaron la habitacion no sin antes obligarnos a mostrar nuestras identificaciones.

Al entrar, ella estaba de espaldas a la puerta. Parecia no haber pasado hambre, pero si estaba mas flaca. Cuando escucho la puerta, se dió la vuelta y me miró con una sonrisa enorme. 



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En el texto hay: fbi, serialkiller, criminal minds

Editado: 07.02.2024

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