Todos tenemos un sueño. Una meta por cumplir. Algunos ignoran esa idea de "soñar" pero de algún modo todos tenemos un propósito.
Soy Brenda James y podrá parecer raro pero...
Aún no se cuál es mi propósito.
Me gustan muchas cosas pero a la vez nada me convence.
Últimamente he tenido cierta inclinación por la música. De pequeña siempre supe que en mi familia todos (o casi todos) son músicos.
Fue entonces que pensé ¿Por qué no continuar su legado? El legado de mi abuelo, de mi padre, que ahora había llegado hasta mí. Se puede decir que está en mis venas y que es mi destino.
En unas semanas entraría a la universidad en New York. Allí podría desarrollar mis habilidades y descubrir mi talento. Aprendería a tocar la guitarra y quizás algún día alcanzaría la fama y sería el orgullo de mi familia.
Si, definitivamente sería un futuro perfecto.
Pero nah, nada es perfecto en sí.
Para lograr eso dejaría de ver a mis seres queridos por un buen tiempo.
Mis padres habían decidido que me quedaría con mi tía Clohe. Ella era la única de la familia que no se dedicaba a la música. Salió de casa muy joven y estudió muchísimo, al punto de que hoy es una de las mejores y más reconocidas directoras de cine del país.
Ya podía imaginar como sería todo.
Nueva ciudad.
Nueva escuela.
Nuevos amigos.
Una vida nueva que estaba por comenzar.