-Solamente, respira- susurra mientras los dos tenemos los ojos cerrados.
-Hombre, si quieres me ahogo- él suelta una carcajada que me hace sonreí.
-Debes relajarte- suelto un suspiro e intento deshacerme de la tensión, pero fracaso.
-No puedo- me quejo y abro los ojos- estoy preocupada.
-¿Por qué?- Wood también los abre y observa fijamente a Unión.
-He estado teniendo pesadillas- susurro juntando mis rodillas a mi pecho, envolviéndolas entre mis brazos.
-¿De qué tipo?- me pregunta, tranquilo.
Algo que siempre me ha gustado de él es que nunca se altera, siempre está en calma y conectado al gran árbol que tenemos aquí, ya que no hay más naturaleza. Él es el mayor, por dos años, el resto somos unos críos de 13. Hoy es su cumpleaños y no ha querido ver a nadie, solo a mi, no se aún porqué, pero no iba a decir que no a pasar el día con él.
-Son horribles, comienzan con todo a mi alrededor negro, solitario y oigo voces que me dicen que me prepare, que todo se va a complicar, luego- trago saliva- apareces tu.
-¿Yo?- si está sorprendido, no lo demuestra, ni siquiera me mira.
-Sí, estás sonriendo, como si fuese una foto y de la nada, se rompe como el cristal, da miedo- trago saliva con dificultad- no se si son mentira o algo por el estilo, pero estoy asustada por si pasa algo.
-Tengo que contarte una cosa- por primera vez en todo el tiempo, se gira y clava sus ojos oscuros, llenos de sentimientos reprimidos, en mi.
-¿Qué pasa?- le cojo de la mano- sabes que puedes contarme todo lo que quieras, incluso lo más estúpido, para mi, será algo serio, lo juro- él sonríe de lado.
-Lo se, eres mi mejor amiga aquí, lo otros... Me caen bien, pero la persona en la que más confío eres tu- eso me llena de alivio porque me pasa lo mismo.
Fire puede ser mi hermano, pero hay cosas que él no puede saber justo por esa razón y luego está Wind, que es mi novio, pero mis sentimientos y esas cosas no es algo que acostumbro a decírselo a él y si se lo digo a mi hermano me mata al oírme, así que necesito un mejor amigo. No hay nadie mejor que Wood para serlo, es increíble.
-Cuéntame lo que quieras, piedra- aparta la mirada y siento como se pone más nervioso a cada segundo que pasa.
-Yo...- traga saliva y se pone rojo.
-Ay, Dios, ¿qué pasa?- es la primera vez que lo veo así y si no fuera por su piel oscura, yo creo que estaría como un tomate.
-Creo que me he enamorado- susurra y yo me quedo muda.
-¿De mi hermano?- pregunto con un hilillo de voz y él suelta una carcajada amarga, negando con la cabeza- no me digas que es de Wind- enarco una ceja.
-No, claro que no- eso se siente un alivio, pero no comprendo entonces quién podría ser.
-¿Entonces?- juego con su mano intentando relajarlo.
-De un científico, bueno, más bien de un cuidador- eso hace que eleve mi mirada hasta encontrarme con la suya.
-Es broma ¿no?- niega con la cabeza.
-Ojalá fuese mentira- susurra.
-¿Y quién es?- sonríe de lado al pensar en él.
-Chris, el que me hace las pruebas de...
-¡Madre mía!- eso lo hace saltar del susto y yo sonrío de oreja a oreja- ya se quien es...- elevo mis cejas con picardía- y está muy bien...
-¿Tu crees?- ya no puede evitarlo y sonríe junto a mi.
-No me puedo creer que esté con uno de los científicos más guapos de por aquí y encima joven, ¿qué tiene? ¿19?- su rostro se oscurece al segundo que pronuncio esas palabras.
-Me lleva gustando desde hace un año, pero no quería admitirlo hasta que...
-Hasta que...- insisto en que hable.
-Me besó y se sintió maravilloso- suspira y estoy segura de que está reviviendo el momento.
-¿Y qué pasó?
-Lo hizo cuando finalizó las pruebas así que, después del beso, me guiñó un ojos y se fue- traga saliva visiblemente- eso fue ayer.
-¿Y me lo cuentas hoy?- me hago la indignada y vuelve a sonreír.
-¿Qué hago, Sea?- mira hacia otro lado- mañana tendré que verlo de nuevo y no se que va a pasar, es que nunca me altero o me pongo nervioso, pero él hace que lo esté.
-Te entiendo, te recuerdo que tengo novio desde hace un años- asiente, esperando un consejo- hazte el indiferente, si él no dice nada o te vuelve a besar, tu no hagas nada, solo estate como si nada hubiera pasado.
-Entiendo- comienza a pensarlo- ¿pero eso de qué me servirá?
-No quedar en ridículo- le digo directamente- si él solo lo ha hecho para divertirse un rato, pues pasa de él, no vale la pena y seguramente no te diga nada, pero si le gustas tu también, pues puede ser que te vuelva a besar o por lo menos se acerque más a ti de lo normal- Wood asiente repetidas veces.
-Gracias, es de gran ayuda- me sonríe y de la nada, su cara se rompe como en mis pesadillas.
-¿Wood?- lo miro asustada, pero no dice nada.
Parpadeo y todo se vuelve oscuridad.
No, otra vez no...
-Sabes a dónde ir, solo sigue recto, en un fábrica, encuéntrame- me susurran al oído y no puedo para de llorar.
-¿Te veré de nuevo?
-¿No ha pasado lo mismo con los otros dos?
-Pero esto es distinto.
-¿Por qué?
-No te veo desde hace 4 años.
-Encuéntrame.
-¡Wood!- grito a todo pulmón y sin poder evitarlo, miro a mi alrededor.
-¿Qué te pasa?- su voz suena preocupada.
-Hay que ir por él- trago saliva saliendo de la cama- que alguien me pase una hoja de papel y un lápiz, por favor.