Un adiós que duró Años

Abril 4

Es una tarde más, vuelvo a escribirte, tu ausencia me ha dado el tiempo suficiente para recapacitar para darme cuenta de cosas que para mi tenían bastante sentido pero ahora no encontraba ni una pizca de coherencia en el. 

Estuve lo suficiente enamorada para poder elegirte una y mil veces, pues lo hice y en cada una no perdí aquella oportunidad de decepcionarme de ti, porque yo había creado a una persona diferente, había creado al hombre de mis sueños pero nada de ellos estaba en ti, ¿La gran mentira? Que todo estaba en mi mente y mi idealización.

¿La gran estafa? Que por mucho que te rogara qué cambiaras nada cambiaría, ni siquiera yo.

¿Cual es la peor parte? Que solo trate de entenderte cuando debe entender a mk mente y mi cuerpo que no se sentía bien, ni queridos ni apreciados, ni siquiera sentía que su existencia logrará algo en los demás sobre todo en ti, te he amado hasta el infinito y de regreso pues en mi idealización si lograba encontrar un final.

Volvía y volvía por ti, por mi y por nosotros pero nada de aquello importo, un par de ojos alegres que encontraste en el camino fueron la excusa perfecta para poder alejarme de lo que llevaba meses haciéndome daño. 

No dudo que en algún momento me quisiste, lo note en tus bes, en tus abrazos, lo note en muchas cosas que quizá también yo invente. 

Yo invente al amor de mi vida y cuando volvi a la realidad mi cuento perfecto se había terminado y tenía que escribir una nueva historia, mi historia. 

Te deseo suerte, porque lo que se hace se paga, porque lo que no tiene explicación, termina siendo un gran regalo. 



#1532 en Joven Adulto
#5153 en Otros
#1455 en Relatos cortos

En el texto hay: resiliencia, aventura humor, dolor desamor

Editado: 02.05.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.