Parte 7

Apenas Marinette supo del compromiso sintió que el piso se abrió y la tragó, con el tiempo se dio cuenta que amaba al joven, que la trataba solo como su amiga, al final de tanto llanto decidió que era lo mejor para todos, que debía alegrarse por él, si había aceptado el enlace, quería decir que amaba a la jovencita, no lo veía uniéndose a alguien sin amor.

Esa noche el muchacho llegó de madrugada a la casa de Marinette, estaba tomado, el guardaespaldas lo llevó a la habitación de invitados, y se fue como siempre a la cocina.

— Adrien ¿Qué te pasó?

— No quiero casarme con ella... pero no sé cómo escapar de mi destino, quisiera ser tan valiente como Nino.

— ¿Qué pasó con él?

Él se durmió de la borrachera, no le quedó otra a la jovencita que ir a su cuarto y esperar al siguiente día, vio al guardaespaldas dormitando, sentado en el living, tenía los ojos cerrados, así que le puso una manta en las piernas. Durante la madrugada Adrien tuvo una pesadilla, vio a Marinette, con la cara de Zoe, ya tenían cinco hijos, todos iguales a su padre.

— ¡¡NOOO!! — despertó sin sabía dónde estaba.

— ¿Qué te pasa? — la dueña de casa llegó corriendo, el guardaespaldas se levantó, pero al verla entrar a la habitación se acomodó de nuevo en el sillón.

— ¿Dónde estoy? ¿Marinette?

— Anoche llegaste a mi casa, estabas... estabas...

— Tomé de más, no quería que padre me viera así, por eso preferí venir aquí... todo por la noticia sobre ellos.

— ¿Es sobre Nino?

— Él y una de las muchachas del burdel escaparon, se fueron a Estados Unidos.

— Alía... que bien por ella.

— Como su padre quería casarlo con otra mujer, él se reveló, luego hizo como que le hacía caso, junto dinero y se fueron. Les deseo lo mejor, quisiera ser tan valiente como él, porque... yo te... yo te...

— No lo digas...

— Te amo, mi Lady — la besó suavemente.

— Yo... no... — suspiró antes de confesarse con él — yo también te amo, Cat Noir...

En el living, el hombre silencioso escuchó lo que empezaba a pasar con los enamorados, así que se fue al patio, donde Plaga y Tikku lo siguieron.

Cuando terminaron de amarse, los jóvenes empezaron a pensar cómo solucionar su problema.

— Hagamos lo mismo que ellos.

— Es que...

— Mi Lady, vámonos de este lugar tan enviciado.

— Pero... será muy peligroso.

— ¿No quieres irte conmigo? ¿Poder casarnos?

— Mi Cat Noir... tengo miedo que tu padre te maté si nos descubre.

— Él no nos encontrará, ya lo veras.

El guardaespaldas que había subido para llevarse a Adrien, ya que estaba amaneciendo, escuchó todo, en su mente recordó cuando su patrón mató a su esposa, el hombre silencioso trato de detenerlo, pero como no podía hablar no le hizo caso, hasta que protegió al bebe con su cuerpo, y le pasó el diario de Amelie, donde ella escribió como orquestó todo para poder casarse con su cuñado, luego que el bebé recién nacido y su hermana hubieran muerto.

Luego de leer eso Gabriel pareció volverse loco, buscó a su cuñada por todo el país, pero nadie supo decirle donde estaba, los padres de las dos habían mandado a Amelie lejos, ellos sabían cómo era su yerno por eso no le dijeron nada, unos meses después los ancianos fueron asaltados y asesinados en una de las callejuelas de Paris.

En su mente el guardaespaldas recordó la mirada de la señora Emilie al morir.

"Debo cuidar a su hijo, ella me lo pidió, estoy seguro si se descubre que quiere hacer...".

Golpeó discretamente la puerta de la habitación.

— Es mi guardaespaldas, debo irme, seguiremos hablando a la tarde. Adiós mi Lady — se vistió y se fue rápidamente.

Marinette se levantó pensativa, era lo mejor para los dos que se fueran, pero tenía miedo por la reacción que tuviera el Sr. Agreste.

— Lo ayudaré, ha sido tan bueno conmigo, sin pedir nada a cambio, ahora fue tan dulce, lo amo — abrazó a Plaga, que se quitó molesto, y se empezó a acicalar con la lengua — no te preocupes, te llevaremos donde vayamos, palabra, también le pediré a Adrien que lleve a Tikki ¿Te parece?

El felino levantó la cabeza, maulló alegre y se fue a dormir un rato.

Durante seis meses los jóvenes prepararon todo para su fuga.

— Mi lady, te traje esta estatua, es uno de mis grandes tesoros, quiero que este contigo, mi único y gran tesoro.

Era una estatuilla del busto de una mujer joven, muy bella.

— Es mi madre, es lo único que tengo de ella, papá rompió todos los cuadros que había, mi guardaespaldas lo ocultó, y me lo dio hace poco.

— Era muy bella, tenía tus ojos.

— Gracias, ya está casi todo listo, en un mes seremos libres, para siempre.

— Cat Noir, tengo miedo de que algo malo pase.

— No te preocupes, tengo todo pensado.

Ese día Gabriel salió a un viaje de 15 días, con eso tendrían tiempo suficiente para irse a Inglaterra y de allí a Estados Unidos, Adrien había contactado con Nino, que ya tenía un buen puesto en una empresa en Chicago, les prometió ayudarles a establecerse apenas llegarán. Esa mañana salieron lo más discreto que pudieron, dejaron al guardaespaldas mudo en el salón, salieron por la ventana del dormitorio principal. Marinette se vistió de varón, así tomaron los trenes, y el ferry a Inglaterra, allí se escondieron en el puerto de Southampton, tomaron pasajes en el SS. Heaven, pero como hubo una huelga en varias naves, al final los derivaron al Titanic.

— No sería mejor esperar e irnos en uno menos notorio, dicen que irán muchas personas importantes.

— No se sabe cuánto tiempo demorará la huelga, mi padre puede volver antes, quiero estar lo más lejos de él que pueda.

— Esta bien.

"Tengo un mal presentimiento, por favor, mamá y papá, ayúdennos".

La noche antes de embarcarse, ambos no podían dormir, estaban ensimismados en sus pensamientos, los gatitos en cambio dormían pacíficos, hasta que se pararon y se pusieron en posición defensiva.