Un amor al aire libre

CAPITULO 10

Emma:
Al llegar a el hotel zack se estaciona, saca unos boletos y los muestra. 

–Que es eso zack?.—pregunta daniel.
—Que es mi amor.—pregunte curiosa.
–Son los boletos para irnos a los cabos, te acuerdas que te dije que ahí iba a ser nuestra luna de miel, y daniel nos va a acompañar, pues por si las dudas.—dijo zack sonriendo.
–Omg gracias mi amor.—dije y me abalanze sobre el para abrazarlo.
–Cuidado no te vayas a lastimar.—dijo zack preocupado y acariciando mi pancita.
–No te preocupes estoy bien, estamos bien.—dije sonriendo
–Nos vamos a ir este fin de semana te parece?.—me pregunta.
–Si si, esta excelente.—dije y después me baje del carro para abrazarlo bien.
–Te amo emma.—dijo sonriendo.
–Y yo a ti zack.—dije y nos besamos mientras mientras el me cargaba.
Después nos adentramos a nuestra suite y daniel se fue a su habitación a continuación nos empezamos a besar y hicimos el amor mientras el atardecer salía. 

VARIAS HORAS DESPUES.
nos despertamos abrazados y zack esta sin camisa, es de noche y en ese momento me llega una llamada que hace despertar también a zack.
–Aló?quien habla?—pregunto.
–Quien es?.—pregunta zack hablando bajito.
–Oh si dígame en que le puedo ayudar?.—digo.
–Quien es amor?—pregunta insistente.
–Espera amor, este si, podemos programar una cita?, para dentro de un mes o unas semanas que le parece?.—pregunto a la señorita que me hablaba.
–Ok, perfecto, que tenga un excelente día igualmente, hasta luego..—digo y cuelgo.
–Me vas a decir quien era o no?.—pregunta zack con los brazos cruzados 
–Era mi ginecóloga.—dije.
–Ohh, pero yo opino que en unas semanas que no sean meses, yo tambien quiero ver a este angelito bello que esta en tu pancita.—dijo acariciando mi pancita y hablándole al bebe.
–Lose, yo también quiero que lo conozcas y quiero conocerlo yo también.—dije llorando.
–Ay mi amor pero porque lloras?,que pasa mi vida?.—pregunta zack.
–Estoy sensible hoy, pero también me siento triste por que nose si dejen que mi madre pueda verlo o verla, le pusieron una orden de restricción.—dije llorando a lo que zack me abrazo.
–Tranquila mi amor, ya ver que podemos hacer, mientras tanto tu no te preocupes, y se que es difícil pero te prometo que estare en cada uno de los momentos, en todos.—dijo zack sonriendo y acariciándome el cabello.
–Bueno, me puedes comprar un helado?.—dije sonriendo.
–Ay mi vida, por supuesto que si, te compro todo lo que tu quieras, hazme una lista y yo voy, tu quédate descansando tranquila.—dijo zack acariciando mi mejilla.
–Esta bien mi amor, gracias.—dije sonriendo.
–Por supuesto que si mi vida.—dice y me carga para llevarme a la cama.
Puedes ir mientras veo una película?.—dije sonriendo.
–Claro mi amor, entonces ahorita te veo si?.—dice dándome un beso 
–Esta bien con cuidado.—le dije y me puse a ver películas. 

HORAS DESPUÉS:
Zack no ah llegado y yo escucho ruido en la parte de abajo de la habitación (ya que es una habitación de 2 pisos). No se que rayos sea, pero puede que si ya haya llegado zack o puede que sea daniel ya que el tiene una copia de nuestra habitación porque zack se la entrego por cualquier cosa, al bajar no veo a nadie, pero de pronto alguien enmascarado aparece y enseguida se pone atrás de mi y me pone una navaja en la garganta.
A ver chiquilla, dime en donde carajos esta el dinero?.—pregunta el señor con... voz distorsionada?, no sabia que eso se podía hacer en la vida real.
–Q-ue, que dinero?.—pregunte nerviosa. Y me acaricie la panza.
–No te hagas la estúpida, se que tu noviesito tiene dinero, y mucho, dinero ahora donde está o no responderé.—dijo gritandome y apretando su agarre.
–Se lo juro señor, no se donde guarda el dinero, esta suite es nueva.—digo, aunque no estoy completamente segura si es nueva.
–Por supuesto que no es una suite nueva, tu novio el señor Affair Zaire lleva años con esta suite pero siempre la limpian por eso se ve como nueva, y si no me dices ahora donde esta la caja fuerte que contiene esta suite, aquí mismo te corto el cuello.—dijo casi gritando.
–Que?, no no por favor no nos haga daño, le juro que nunca en mi vida había venido a una suite y mucho menos sabía que tenían cajas fuertes, por favor no me haga nada.—dije llorando.
–No nos haga daño?, acaso tienes un bebe aquí dentro?.—dice señalando mi panza.
–Eh este no no.—dije nerviosa.
–No te preocupes princesa, no me quieres dar la ubicación de la caja fuerte, ¡Pues ahora atente a las consecuencias linda.!.—dijo gritando. A continuación la navaja que estaba ubicada en mi cuello fue bajando lentamente, y a continuación....
Me apuñaló en la panza, y saco el cuchillo muy rápido que pude sentirlo, en ese momento me falto la respiración y me toque la panza y vi que sangraba comenze a gritar, mis gritos eran ahogados por el dolor tan inmenso que provoco la navajada después  me acosté en el suelo gritando, a continuación vi como el señor había encontrado la caja fuerte y mientras mi mirada se iba apagando, lo último que vi fue que logró sacar todo el dinero, y después....  me desplome. 

HORAS DESPUÉS:
Zack:
Termine de comprar todo lo que me pidió emma, aparte de helado decidí comprar más cosas como dulces, papas, cereales, sopas instantáneas que aunque hacen daño a ella le gustan mucho, a y mucho mucho chocolate.
Al llegar a fuera del hotel vi que habían varias ambulancias y patrullas de policía, gracias a dios esos policías no eran de Londres, eran de California así que salí del auto y estaban tapando con una cinta amarilla.
Trate de entrar y me quede como estatua al ver un cuerpo ensangrentado, casualmente de la panza. Y entre.
Señor señor no puede pasar.—dijo un policía deteniéndome.
–Disculpe, que paso.—dije tratando de mirar.
–Apuñalaron a una mujer.—en el momento que dijo eso destacaron su cara.
–Emma.—susurre paralizado.
–Así es señor emma larios.—dijo el policía.
–No no puede ser, déjeme pasar, DEJEME PASAR POR FAVOR.—dije gritando.
–Señor tranquilizece.—dijo otro policía.
–Dejeme pasar, es mi esposa, emma larios es mi esposa, ella está... esta embarazada.—al momento que dije eso me dejaron pasar y corrí como un niño y abraze su cuerpo, los paramedicos me intentaron alejar, pero las policías les explicaron que era mi esposa, no lo puedo creer, mi esposa puede estar muert... no no no no, no pensare en eso.
–Zack que sucedió?.—llego daniel detrás mía, y yo que le había dicho que la cuidara, lo voltee a ver y me enfureci demasiado, le dije que la cuidara y  el no lo hizo.
–Eres un maldito idiota, como pudiste dejar a Emma sola, te dije muy bien que la cuidarás maldito imbecil.—dije enojado pero a la vez llorando.
–Que pero que paso?.—pregunta.
–Que paso idiota?, que paso?, que la apuñalaron idiota, LA APUÑALARON en la panza y ahora no se si están muertos los dos.—dije llorando con desesperación.
Después me acerque a la camilla y acaricie su cabello mientras le besaba la frente y le susurraba al oído.
Vas a estar bien mi vida, te juro que encontrare al que te hizo esto y lo haré pagar mi amor, tu y nuestro hijo estarán bien, no te preocupes mi amor, regresaran sanos y salvos, te amo Emma, los amo.—dije llorando y después la abraze y grite hacia el cielo.
Luego de que le susurre y la bese me subí en la ambulancia con ella, y daniel se fue en mi auto, me dolía tanto verla con la pancita ensangrentada, me odie a mi mismo por hacerle caso y dejarla sola, se que daniel no es su niñero pero es su amigo y el dijo que el no protegerla, se que también tiene derecho a salir, pero me dolía tanto pensar en que mi bebé y Emma pudieran morir, y todo por mi culpa, si Emma moría y mi bebe también, o sobrevivía solo uno de los dos, juro que no lo soportaría. Al llegar inmediatamente la metieron al quirofano. 

–Abran paso, mujer embarazada apuñalada, compermiso.—dijo un enfermero.
Después nos metemos a un quirofano y yo no me pude contener y comenze a llorar mientras me ponía la bata, el gorro y el cubrebocas.
Señor Affair tiene que firmar estos papeles para saber si usted está de acuerdo en que se realizara la operación y sobre todo, que es peligrosa.—dijo un cirujano.
–Claro, pero ustedes tienen que hacer todo lo posible que este en sus manos pata salvarlos, lo tienen que hacer.—dije desesperado.
–Claro que si señor, nos haremos responsables.—dijo el cirujano.
A continuación nos metimos en el quirofano y yo comenze a llorar tome su mano por cualquier cosa.
Pude ver como le abrían la panza y le ponían una dosis muy baja de anestesia ya que estaba desmayada pero la anestesia era por si se despertaba, claramente cada cosa que hacían me causaba dolor, pero a la vez era extraño. Podía escuchar el sonido de el metal chocar de los utensilios  que usaban y eso solo me causaba más ansiedad, escuchaba cada cosa que decían, como " tenemos que sacar al feto" y la palabra feto más el sonido de los metales para mi era algo demasiado escalofriante. Cuando creo que estaban a punto de sacar al bebe, susurraron entre ellos y después me voltearon a ver para decirme que me saliera un momento.
–Señor salga un momento, solo un momento por favor, es que ya es peligroso que este usted aqui, estamos en un punto muy importante en el que los microbios de sus manos pueden afectar la operación.—dijo el doctor cirujano.
–Esta bien doctor, una pregunta, cuanto tiempo tardaran?.—pregunte
–Aproximadamente unas 4 horas, ya que esta cirugía es un poco complicada.—dijo el doctor.
–Esta bien, entonces me iré a lavar las manos y me quitare esto, y muchas gracias por todo doctor, salvelos por favor, se lo suplico.—dije preocupado.
–Claro que si, usted no se preocupe señor Affair Zaire.—dijo frotándose las manos.–Con su permiso entraré al quirofano, me necesitan.—dice.
–Si adelante.—dije y me retire mientras me quitaba el resto de la ropa de médico.





Fin.
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.