Estela Trinidad
Al escuchar la confesión de Liam casi me caigo de lado virgen un hombre de 25 años es "virgen" no me lo creo es atractivo, simpático, sexi y alegre es demasiado perfecto aún no lo comprendo.
Si fuera mujer sería más fácil de creer peor un hombre es sumamente raro sobre todo en este mundo tan machista y retrógrada donde los mismos padres desde que sis hijos varones entra a la adolescencia lo llevaban a burdeles para qeu experimente el sexo.
—No me hagas bromas besas muy bien y recuerdo muy bien nuestro primer beso y sabías qué hacer muy bien—digo aún sorprendida por la conversación.
—Párale hay Estela no dije que era virgen de la boca ¡por Dios! Si he llegado a segunda base con varias chicas, pero al momento de completar el acto íntimo mi amigo no reacciona como Dios manda, lo intente desde los 17 años, pero fue fallido sin importar la chica así que lo olvide todo hasta que escuche tu voz entonces mis reacciones cambiaron—expreso mirando mis ojos pude ver sinceridad y temor en ellos.
Escucharlo decir eso con miedo sinceridad y dolor a la vez me altero además me puso muy nerviosa él lo notó y me abrazó.
—Vámonos este no es lugar para ti—dijo asentir y nos pusimos de pie.
—Primero iré al baño—mire el lugar detenidamente y era hermoso, me lave el rostro, estaba nerviosa me tarde más de 5 minutos, al salir lo veo sentado en la cama de espaldas a mí.
Entonces lo "provocativa" y "diva" en mí salió a relucir no voy a negar que me ha excitado saber que he sido la única que logra provocar que su anatomía despierte.
Sin saber por qué exactamente quise comprobarlo por mí misma, me acerqué a él en silencio me senté en su regazo dejando mis piernas a cada lado y besé sus labios con pasión el respondió y puso sus manos en mis caderas sintiéndome atrevida rodeo su cuello con mis manos, el beso se intensificó asi que lleve mis labios a su cuello mordí el lóbulo de su oreja, pasé mis manos por su pecho, por su cabello y por sus hombros.
El beso cada vez estaba más intenso lo empuje y el quedo acostado sobre la cama, yo sobre su cuerpo de bese todo lo que pude ver y estuvo a mi alcance. Sin pensar las consecuencias pude sentir su miembro fuerte y duro golpeando contra mi vientre, mi trasero y sexo hacían un movimiento de vaivén bastante sexi.
—Que esta sea la primera vez para ambos—dije con seguridad él no respondió así que asumí que estaba de acuerdo siguió el beso y nos giró.
—¿Esta Segura? No tengo la práctica, pero si la teoría—contó mientras se mordía los labios yo asentí y él sonrío complacido.
—Pues espero que los dos lo disfrutemos como nunca esta primera y espero que no última experiencia—musito nos seguimos besando hasta que el busco el cierre de mi blusa lo ayude un poco y en unos minutos los dos estábamos en ropa interior. Ambos tocamos cada trozo de piel expuesta del otro, las caricias de Liam eran tan calientes y dulces a la vez que me tenían volando en una nube.
Liam
mi respiración era pesada y mis ojos están abiertos como platos admirando la belleza que se encuentra frente a mí y es que en unos minutos era mía total y exclusivamente mía en este momento agradezco el libro que me presto mi amigo y también todos sus consejos de como hacerle el amor a una mujer, como tocarla sobre todo si es virgen. Todos sus consejos lo emplearé en este momento recuerdo todo solo espero poder cumplir, hacerla sentir bien y satisfacerla.
Me siento en la cama tomó uno de sus pies y empiezo desde las puntas de su dedo besando cada uno, voy subiendo por sus piernas hasta que llegó a su muslo y beso esa piel suave y tersa luego voy a su ombligo y paso mi lengua por este ella gime y se estremece bajo mi toque, voy subiendo hasta sus pechos le quito su bra y me deleito con sus sabrosos pechos, sigo subiendo hasta su cuello y la escuchó jadear y gemir, su respiración está alterada, pero aun así no me detengo sus ojos se giran y puedo darme cuenta del placer que estoy provocando en su cuerpo.
Lentamente, voy bajando lentamente voy bajando de nuevo hasta que me pierdo por completo en los placeres de hacerle el amor a la mujer que amas.
Luego de disfrutar de nuestros cuerpos y sobre todo nuestro amor caemos rendidos en la cama y nos dormimos.
...
Estela
Despierto al sentir una presión en mi pecho que no me permite respirar, al abrir los ojos veo a Liam con medio cuerpo encima del mío totalmente desnudo, mis pensamientos son confusos por varios segundos hasta que recuerdo todo lo sucedido y debo decir que fue simplemente maravilloso, especial y único.
Él me trató como una reina fue delicado, suave y me hizo volar con cada sensación. Ahora soy de él y él es completamente mío, miro mi muñeca y maldigo son más de las siete de la noche estoy segura de que mi madre me va a matar y mi supuesto "padre" me regañara.
Liam
—Amor, hermosa despierta ya es de noche —le digo tocando su cabello y besando su cabeza.
—¡Oh Dios! ¿Cómo nos quedamos dormidos tanto tiempo?— pregunto buscando su ropa, entro al baño y salió unos minutos después y yo hice lo mismo.
Al salir la veo ya lista esperando por mí la miro sonriendo como idiota mientras me acerco a ella y la envuelvo entre mis brazos, le doy un pequeño beso en sus labios el cual ella corresponde.
—Fue maravilloso y me sentí muy amada y por lo que he escuchado hiciste un excelente trabajo, ya que todo fue mejor que como lo describen en los libros y novelas— dice con gran picardía lo cual me hace sonreír, la miro fijamente y ella se sonroja y se abraza a mí
No sé si sea el momento o sea muy pronto peor sin duda dentro de mi ser siento que no podria ser más perfecto.
—Te amo Estela—confieso mis sentimientos lo cuales eran obvios, pero sé que a las damas les gusta escuchar que se lo digan con palabras.
Ella me mira con nervios y siento un poco de miedo de que quizas no sienta lo mismo o con la misma intensidad.
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Editado: 28.04.2025