segunda parte

Solo aquellas personas que estuvieron contigo en las malas, pueden estar contigo en las buenas, alguien que te ama no solo está en tus mejores momentos, riendo, jugando, divirtiéndose, etc. también debe estar en tus más malos momentos, en donde estas deprimida, cansada, sin ganas de seguir, etc. Y el, él siempre estuvo en malos y buenos momentos.

No es un momento fácil para mí, ya que tan solo hace dos meses falleció mi padre, más que mi padre fue uno de mis mejores amigos. Y aunque por una parte estaba feliz ya que estaba con el niño que me gustaba, por otra parte, estaba destrozada por la partida de mi padre. Así que era normal que estuviera bien y de un momento me llenara de tristeza, el me comprende y me envía mensajes de consuelo, mantiene su discreción, y la verdad no me gusta hablar de eso, y él lo entiende, así que respeta eso y no hablamos del tema.

Al estar en la finca y el en Bogotá, jugábamos juegos virtuales para sobrellevar la distancia ya que los dos meses que dije que iba a estar allá, se iba transformando en más tiempo, debido a la pandemia mi madre decide dejarme allá mas tiempo, porque en la ciudad había muchos contagiados, hay aquellos que dicen que –amor de lejos, es amor de pendejos, pero la verdad no pienso igual, si confías en la otra persona y le eres fiel no hay de que temer.

El tiempo se multiplico y dure cuatros meses allá, fue lindo vivir en la finca durante ese tiempo, había paz, silencio, aire fresco, nada que te cause estrés, la verdad fue perfecto, pero no podía estar mas meses sin verlo a él. Mi mama nos trae devuelta a la ciudad a mi hermano y a mí, ese día llegamos cansados ya que el viaje siempre es agotador. Pero al día siguiente le doy señales a el para que se de cuenta que ya estoy en Bogotá, pero no capto ninguna señal, le di la ultima señal, ya demasiado directa y ese si la entiende. Él se emociona mucho y a los pocos días viene y me visita a mi casa.

Apenas lo vi, un sinfín de emociones recorrieron mi cuerpo, me puse nerviosa, me sudaban las manos, no sabía ni que decir, pero entre tantas emociones quería abrazarlo fuerte y decirle todo lo que tenía dentro, el, él estaba ahí parado mirándome con su sonrisa toda linda y en su mano tenía un regalo, era un osito muy tierno, una manilla y unos dulces, chocolates, gomitas, etc. Le di un beso y lo abracé.

No me gustan los estereotipos y eso de que el hombre tiene que pedir la mano de la mujer es un estereotipo. Una vez le dije – cuando nos veamos quiero ser yo la que te diga – quieres ser mi novio, así que ese día le entregue una carta en donde le decía - No alcanzas a imaginar lo mucho que eh llegado amarte durante todo este tiempo, no creí que iba a sentir mariposas en mi estómago por alguien , pero con Tigo todo el día , Todos los días las siento , me brillan los ojos y se me dilatan las pupilas, te amo demasiado amor, cada día que pasa , pienso en lo mucho que te amo , en lo bello que eres , pienso en todo lo que me dices , esas palabras tan lindas, amor te amo y ahora sé cómo se siente esa palabra .Quiero un futuro largo contigo, quiero que seas el primero en todo , quiero crecer junto a ti, y como en los cuentos de hadas quiero que seamos felices por siempre  y como ya te lo había dicho eres el rayito de luz que aparece en medio de tanta oscuridad, y sabes mi felicidad depende de ti, eres mi persona favorita, te amo mucho.  Eres esa bella historia que no me canso de contarla. Eres la mejor decisión que pude haber tomado. Con Tigo a mi lado me di cuenta que no necesito a nadie más para ser feliz, amor no sé si te acuerdes que cuando me dijiste que, si quería ser tu novia, yo te dije que cuando nos viéramos yo quería ser la que te lo dijera así que con todo mi amor te pregunto.

¿Quieres ser mi novio?

El me mira, sonríe, me da un beso y me abraza. Ese día me di cuenta que, al estar con él, me sentía segura, en paz y feliz, el tiempo se pasa rápido y los minutos se convierten en segundos, al estar con el me siento completa y sin miedos. Después de verlo, estar con él, hablar, abrazarlo, besarlo, se tiene que ir y llega el momento en que lo vuelvo a extrañar.

El, el que cada día me visita con su linda sonrisa, siguiendo mis caprichos y juegos, el, él se volvió tan importante y vital para mí, que ya me acostumbré a hablar con él todos los días, quiero estar con el todo el tiempo. Cada vez que viene no me canso de mirarlo y de pensar lo afortunada que soy al tenerlo, me hubiera gustado que mi padre lo hubiera conocido, sé que le caería bien, los dos son graciosos, carismáticos y simpáticos, pero el mundo es injusto y esto no podrá suceder, sé que desde el cielo mi padre me apoya con esta relación, lo siento dentro de mí.

El un día me dijo - Me hubiera gustado conocerlo y decirle lo feliz que me hace su hija y lo importante que eres para mí y pues puede que él ya lo sabe ❤️   

Cuando dijo eso, algo paso, un escalofrió recorrió mi cuerpo y entre en llanto. Cada día se vuelve más difícil para mí la partida de mi padre y él lo sabe, siempre está ahí apoyándome y ayudándome a calmar.

 Cada vez que estoy triste, nostálgica, estresada, etc. El, él sabe cómo ponerme feliz, es uno de las pocas personas que sabe cómo alegrarme después de estar triste, y con un simple abrazo de él, me siento segura, en paz, sé que todo estará bien, el me cuida como si fuera un bebe, es muy lindo y tierno, y es en esos momentos en donde me doy cuenta que quiero todo con él, así el camino sea difícil.