Me llamo Amelia Turner, tengo veintidós años y soy profesora de literatura. Vivo en un mundo donde todo parece girar en torno a la tecnología, donde el amor se busca con un par de clics en aplicaciones de citas y los romances clásicos quedaron relegados a las páginas de los libros.
Pero yo… yo sueño con algo diferente. Sueño con un amor real, profundo, con la clase de caballero que Jane Austen creó en Orgullo y Prejuicio.
Nunca imaginé que ese anhelo me llevaría más lejos de lo que creía posible… más allá del tiempo mismo.
Esta es mi historia. ¿Quieres leerla conmigo?
Soy Amelia Turner, tengo veintidós años… y ya no soy la misma joven que un día soñaba con encontrar a su propio Sr. Darcy desde un salón lleno de tecnología y pantallas.
Un giro inesperado del destino me llevó al siglo XIX, a un mundo donde el romance no se esconde tras algoritmos, sino en las miradas, los gestos y las palabras sinceras.
Allí lo encontré: Charles Lancaster.
Un caballero de carne y hueso, distinto a todo lo que había imaginado, y sin embargo, el reflejo perfecto de mis más profundos anhelos.
Nunca pensé que mi sueño literario me regalaría un amor capaz de desafiar al tiempo mismo.
Y ahora, esta es mi verdad… la historia de cómo encontré al hombre que cambió mi vida para siempre.
Mi nombre es Charles Lancaster. Tengo veintiséis años y muchos me consideran un caballero afortunado, dueño de modales y fortuna. Pero lo que más me define no son las posesiones, sino mi corazón: soy un hombre que escribe versos en secreto y que cree, contra todo pronóstico, en la fuerza del amor verdadero.
Mi mundo parecía completo, hasta que apareció Amelia, una joven diferente a todas las damas que había conocido. Su mirada traía consigo el misterio de otro tiempo y el encanto de una verdad que no podía ignorar.
Esta es nuestra historia… una historia que desafía siglos y convenciones, porque cuando el destino entrelaza dos almas, ni siquiera el tiempo puede separarlas.
¿Me acompañas a descubrirla?
Editado: 26.09.2025