Un amor imprevisto

capitulo 2

Un encuentro desafiante

Al día siguiente, decidí visitar la tienda de Alex para discutir sobre las fotos de perfil para mi sitio web. Me puse mi mejor sonrisa y me dirigí a la dirección que me había dado Lucía.

Al llegar, me encontré con un estudio fotográfico moderno y elegante. Me sentí emocionada de trabajar con alguien que parecía tener un gusto tan refinado.

Entré en la tienda y me acerqué al mostrador. Un hombre con el cabello oscuro y ojos intensos levantó la vista de su cámara.

-¿Puedo ayudarte? -preguntó con una voz un poco seca.

-Soy Sofía -dije, extendiendo mi mano-. Estoy aquí para hablar sobre las fotos de perfil para mi sitio web. Hablamos por teléfono ayer.

Alex me miró con una expresión seria y me estrechó la mano brevemente.

-Sí, recuerdo. Pasa -dijo, indicándome una silla.

Me senté y traté de romper el hielo.

-Así que, ¿cómo trabajas? -pregunté, intentando sonar amigable.

Alex se encogió de hombros.

-Te hago las fotos, tú sonríes, y listo -dijo con una sonrisa irónica.

Me sentí un poco incómoda con su actitud, pero decidí darle una oportunidad. Después de todo, Lucía me había recomendado a él.

-Bueno, ¿qué necesitas de mí? -pregunté, sacando mi teléfono para tomar notas.

-Necesito que te vistas de acuerdo a tu estilo y que sonrías -dijo Alex, mirándome con una expresión seria-. ¿Puedes hacer eso?

Asentí y me levanté para ir a cambiarme. Mientras me vestía, no pude evitar sentirme un poco nerviosa. ¿Iba a ser un trabajo difícil trabajar con Alex?

Cuando salí del vestidor, Alex me miró con una expresión crítica.

-¿Qué pasa? -pregunté, sintiéndome un poco insegura.

-Nada -dijo Alex-. Solo estoy pensando en cómo hacer que parezcas natural frente a la cámara.

Me sentí un poco incómoda con su mirada intensa, pero traté de relajarme y disfrutar del proceso.

Después de varias horas de tomar fotos, Alex finalmente dijo que habíamos terminado.

-¿Te gustan las fotos? -pregunté, mirando la pantalla de su cámara.

-No están mal -dijo Alex, sin mucho entusiasmo-. Te enviaré las fotos por correo electrónico.

Me sentí un poco desanimada por su reacción, pero traté de no tomarlo personalmente.

-Gracias, Alex -dije, sonriendo-. Estoy emocionada de ver las fotos.

Alex asintió y me acompañó a la puerta.

-Lo siento si fui un poco brusco -dijo, sorprendiéndome-. Es que he tenido malas experiencias con estilistas antes.

-No te preocupes -dije, sonriendo-. Entiendo.

Y con eso, me fui del estudio, preguntándome qué había pasado con Alex para que fuera tan cínico.



#3122 en Novela romántica

En el texto hay: amor paternal, amor

Editado: 17.10.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.