Jim
El tiempo pasa, mi hijo no hace más que caminar de un lado para el otro. Está muy nervioso y lo entiendo, yo estaría igual si le pasará algo así a mi esposa. Mis hijas me llamaron varias veces para ver si hay novedades, pero por desgracia todavía no sabemos nada.
-Por qué tardan tanto. Papá esa mujer tiene que pagar por lo que le hizo a mi esposa. Mi hija puede llegar a quedarse sin su madre.
-Tranquilo hijo, tu madre está a su lado y hará todo para que ella esté bien y mi nieta siga teniendo a su madre. No te preocupes por esa mujer, con lo que hizo hoy va a estar presa por mucho tiempo.
Jamie
Me estoy volviendo loco con la espera, se que he estado en situaciones parecidas, pero esta es la peor de todas. El miedo a perderla es lo que más me duele, ademas que mi hija pierda a la persona que más necesita.
De repente se abren las puertas y mi madre viene con un doctor que no conozco, pero se nota que están preocupados. Se acercan a mi y mi madre me lo presenta.
-Hijo este es el doctor Díaz, el atendió a Alexia.
-Doctor cómo está mi mujer?
-Señor Dornan hemos tenido que operar para retirar el proyectil y ver qué órganos están dañados. Por suerte en su recorrido no produjo daños, pero estuvo muy cerca de su médula espinal. Logramos sacarla, ella ahora está estable, se encuentra en la UCI para recuperarse de la operación. Solo tenemos que esperar veinticuatro horas para saber si no hay alguna complicación extra.
-Muchas gracias doctor por curar a mi esposa. Cuándo podré verla?
-En un momento podrá verla, pero solo por cinco minutos, si todo va bien en cuarenta y ocho horas la pasaremos a una habitación común. Lorna voy a ver si ya la llevaron y te aviso para que la vea. Cualquier cosa que necesitan me avisan.
-Muchas gracias Ricardo, nos vemos luego.
No pasaron más de diez minutos y una enfermera me viene a buscar para llevarme donde está mi esposa. Dejo a mis padres mientras la acompaño, abre una puerta y entramos en una sala con varias camas. Veo a mi amada, se ve tan pequeña en esa cama. Me acercó, la enfermera me dijo que la puedo acariciar, tomó su mano y beso su frente. Me duele mucho verla así.
-Por favor amor vuelve pronto a mi, te necesito para vivir, tu hija no puede crecer sin su madre.
Se me parte el corazón por verla así, no quiero dejarla sola porque ella me necesita como yo la necesito. La enfermera me pide que me retire, pero antes de eso vuelvo a besar su frente y le digo que volveré para estar a su lado.
Voy en busca de mi hija que está con sus abuelos, no se que le voy a decir sobre dónde está su madre, espero que la mía me ayude a explicarle. Para mi suerte cuando llegó mi hija viene a recibirme y me abraza muy fuerte. Sentir sus bracitos en mi cuello me da un poco de paz, pero no puedo dejar de pensar que dulce esposa está ahora en una cama de hospital.
-Papi acá ta, mamá onde eta?
-Mamá está haciendo un viaje y pronto volverá. Me dijo que te abrace y te bese mucho.
-Sobrina ven que tu comida ya está lista.
Se va con mi hermana muy contenta, se ve que mi princesa tiene hambre, por suerte todavía no comprende muchas cosas.
-Hijo tranquilo Alexia se va a recuperar pronto, es una mujer fuerte y sabe que las personas que la quieren la están esperando. María Alejandra tendrá todo el cariño mientras ella esté lejos y la cuidaremos mucho para que tu te puedas dedicar para cuidar de Alexia.
-Muchas gracias mamá por ayudarme con mi hija. Espero tener la fuerza necesaria para poder cuidar de mi amada y que ella pueda volver pronto con nosotros, no se que haría si ella no sale de esto. Cómo criaría a mi hija sin su madre.
-Alexia saldrá adelante porque tiene mucho por lo que vivir, su hija y tu, que eres lo más importante en su vida. Tengo la seguridad que tu la ayudaras a salir adelante.
Hoy me quedo en casa de mis padres, no quiero ir a casa solo, mientras mi hija come me ducho. En la soledad del baño lloro como un niño por el temor a perderla, no podría seguir con mi vida sin ella. Cuando salgo del baño voy en busca de mi hija para que duerma conmigo, así puedo cuidarla y no sentirme solo. Mañana a primera hora iré al hospital para ver a mi esposa y espero que puedan pronto pasarla a una habitación para poder estar más tiempo con ella.
Por suerte mi hija durmió toda la noche, yo solo lo hice por momentos, pensar en ella en ese lugar frío y lejos de mi no me lo permitió. Mi mamá se quedó cuidando de mi hija, yo solo tomé un café y salí raudo hacia el hospital. Espero que haya buenas noticias.
Llegó al hospital y pido ver al doctor Díaz, que fue quien atendió a Alexia, quiero escuchar de él cómo está mi mujer. La enfermera del mostrador lo llama y yo espero a que el venga.
-Señor Dornan. Tengo buenas noticias, su esposa pasó muy bien la noche, pienso que quizás hoy la pasemos a una habitación común. Igual seguiremos midiendo sus constantes. La mantendremos sedada por unas 24 horas más para que la recuperación sea mejor.
-Muchas gracias doctor por todo lo que hace por mi esposa, ella es muy importante para mi.
-No tiene nada que agradecer, es mi trabajo. Además aprecio mucho a su madre y ella me dijo que su esposa es como una hija para ella, que la cuidara mucho y eso hago.
Editado: 22.01.2019