Muevo los pies rítmicamente intentando mantener la calma.
Todavía no asumo que tengo una hija de cuatro años de la que no supe absolutamente nada. Ni siquiera recuerdo a la tal Naomi Write y no me sorprende. Aquella noche estaba muy ebrio.
Lo que no entiendo es por qué no me dijo antes sobre la niña o por lo menos mencionarlo cuando supo que estaba enferma. Supongo que obtendré las respuestas en la carta que me dejó y el abogado me entregó hace unos minutos.
Él fue a buscar a la niña de nombre Blue. ¿Qué clase de nombre es ese?
Miro la carta, suspiro y la abro. Tengo que enfrentar las consecuencias de mis acciones aunque no las recuerde.
Troy me convenció para conocer a la niña y no dejarla a deriva. Tenía razón al decir que me arrepentiría. April también lo mencionó y cuando salí de la sorpresa, le tuve que dar la razón a ambos.
Aquí estoy, esperando conocer a una niña que dice ser mi hija, a quien debo hacerle una prueba de ADN. No puedo quedarme solo con la palabra de una mujer que es desconocida para mí y de rostro que no recordaba hasta que el abogado me mostró la foto.
Ahora esa mujer está muerta luego de haber perdido la batalla contra el cáncer de útero.
Abro el sobre y saco el pedazo de papel blanco escrito con una letra delicada y comienzo a leer.
Max, si estás leyendo esto significa que el cáncer ganó la batalla. Debes estar confundido, asustado y lleno de emociones sin poder identificarlas; lo entiendo, yo estaría igual.
Te preguntarás por qué no te dije nada antes de Blue y la respuesta es que no quería obligarte a aceptarla. Decidí guardar el secreto y decirle sobre ti cuando fuera mayor dándole el poder de decisión.
La noche que nos conocimos los dos la estábamos pasando mal. Me contaste que tu prometida te abandonó el día de la boda y yo te conté que mi novio me había dejado porque no quería casarse. Esa noche nos acostamos sin ningún tipo de compromisos, los dos estábamos lidiando con nuestros conflictos personales y bebimos más de la cuenta, más tú que yo.
Cuando desperté estaba sola y no había rastro de ti. Lo dejé estar, quedó como una aventura de una noche hasta dos meses después que supe que estaba embarazada. Primero pensé que podía ser de mi ex, pero las fechas no coincidían y solo quedaste tú, pues no me acosté con nadie más en ese tiempo.
Sabía tu nombre y apellido, pero no intenté buscarte hasta hace un año cuando descubrieron mi cáncer. Mi pronóstico no era bueno y necesitaba velar por el futuro de Blue. No tengo más familia, pues crecí en lugares de acogida hasta la mayoría de edad donde pude ingresar a la Universidad y rehacer mi vida, por eso me vi en obligación de contarte sobre nuestra hija. No quiero que ella termine en el sistema, no siempre son buenas las casas de acogidas y no deseo que mi hija pase lo mismo que yo.
Lamento no haberte dicho nada sobre ella, y espero que aun así puedas hacerte cargo porque eres todo lo que tiene. Amo a mi hija, desearía no abandonarla y verla crecer, pero debo aceptarlo.
Puedes hacer la prueba de ADN. Estoy segura de que es tuya, sin embargo, entiendo que tendrás dudas.
Blue es una niña alegre, dulce e inteligente que ha estado a mi lado todo el tiempo. Ella sabe de ti porque hablamos cuando preguntó por ti. Tenía miedo de que no la quisieras, yo también lo temía, pero sé que no es así.
La noche que estuvimos juntos, dijiste que lo único que deseabas era formar una familia y ser un buen padre como lo ha sido tu padre. Dijiste que no deseabas hijos y que no sabías como tratar con niños, pero si llegabas a ser padre, lucharías por ser el mejor. Por eso estoy segura de que Blue estará bien contigo.
Esto es lo que debes saber: Le puse Blue porque es mi color favorito. Quería algo diferente y simple, aunque a algunos les parece extraño. Blue no duerme con la luz apagada, le da miedo la oscuridad; su peluche favorito lo lleva con ella siempre y lo necesita para dormir; le gusta cantar e iba a comenzar clase de piano; su comida favorita es el rissotto, le gustan mucho las manzanas y jugar al aire libre. Es una niña inteligente y curiosa que pregunta todo, sus por qué pueden hacerte reír o alterarte.
Si te das una oportunidad, la conocerás y ella te dirá más sobre ella.
Espero me perdones por no hablarte de ella antes y que puedas criarla y darle todo el amor que yo deseaba darle y no pude.
Cuida y ama a nuestra hija. Desde ya, gracias por habérmela dado. Fue el mejor regalo que alguien pudo darme.
Con cariño. Naomi.
Al terminar de leer mis emociones se revolucionan de tal manera que generan más dudas y miedos que antes.
No recuerdo a Naomi y en su carta puedo notar que era una buena mujer, que fue una excelente madre y me da pena que se haya ido tan joven dejando a su hija, a quien amaba.
Lo peor de todo es que tuvo que morir ella para saber que tenía una hija.
Hasta hace unas horas no quería hacerme cargo de la niña, no podía imaginarme como padre y decidí seguir el consejo de Troy, que fue conocer a la niña y hacer lo que mi corazón dictara.