Querido NamJoon, me has sonreído esta tarde, ahora soy feliz, muy feliz has notado que aun sigo en este universo...
Sus manos temblaron y su mente quedó en blanco cuando dio un paso más hasta él, creía que el corazón se le saldría del pecho y tendría que sujetarlo antes de que cayera en manos de la chica que ahora esperaba delante de él sin decirle nada. Pasó la lengua por los labios rápidamente y suspiró tratando de no parecer obvio que la buscaba a ella.
—¡Hola! — fue lo único que se le ocurrió y se sintió un idiota.
—Hola RM. —Emma se limitó a responder su mente también se negaba a cooperar.
—Pensé que vendrías al almuerzo con nosotros, pero Jimin llegó solo y me preocupé por ti.
—Estoy bien, tome algo en la cafetería de enfrente, no quería molestarlos.
—No lo haces, —soltó enseguida —es decir, no hay problema.
—Pensé que sí, no creo que sea correcto que coman con alguien de su staff, YoungSook lo ha dejado muy claro, nosotras estamos muy lejos de ustedes, nuestro lugar es aquí, solo aquí.
—Sobre eso... —la miraba, por primera vez entendió lo que Jungkook había sentido al enamorarse de alguien que parecía no debía, ahora él se encontraba en el mismo lugar y no sabía lo que tenía que hacer.
—Tengo que entrar ahora Nam...
—Sí, sí, no te entretengo más, solo...Emma te gusta alguien. —En el momento en el que pregunto fue el mismo en el que se arrepintió pero ya no podía retractarse.
Emma lo miró con sorpresa, seguramente preguntaba por la actitud que había tomado con Jimin, no podía solo decirle que se equivocaba por que ella solo tenia ojos para un solo chico y ese chico era él.
—No entiendo a que viene tu pregunta NamJoon, lo siento no sé que responder, pero si te refieres a Jimin puedes estar seguro de que apesar de que es muy guapo, él no me gusta.
Dio media vuelta y entró al área de maquillaje. NamJoon todavía espero algunos minutos antes de seguir hasta la oficina, necesitaba encontrar el número de móvil de Emma.
El área que se encargaba de contratar al personal se encontraba abierta, NamJoon no recordaba si alguna vez había puesto el pie ahí, pero ahora lo hacia, no podía solo ir con el CEO o con el manager, la experiencia le gritaba que no se atreviera hacer algo así, se sentía como un niño con la adrenalina corriendole por las venas solo pensando en los problemas que podría ocasionar, por un momento le gustó, nunca había pensado en ser él quien los metiera en apuros por una chica, sonrió.
—Necesito el número de mi maquillista. —dijo con tono peculiar para que nadie notara su nerviosismo.
El encargado pareció incrédulo ante la petición y no actuó de inmediato.
—Por favor, —repitió esta vez siendo más suave.
—Eres el chico de Bangtan. —NamJoon afirmó —tienes el documento en donde se te da autorización para eso, no quiero problemas con él señor Bang, es bastante estricto con estos asuntos sabes. —Nam volvió a afirmar — ¿de que trata tu asunto? ¿Lo podría tratar un tercero?
—No, es un asunto personal, bueno no tan personal, pero...solo es el número de móvil no estoy pidiendo más información de ella, solo es algo muy vano.
—Lo siento pero no puedo dar esa información a ninguno de ustedes.
NamJoon salió molesto de la oficina, seguramente sería más fácil pedirlo directamente de Emma, pero tenia tanta vergüenza que no podría hacerlo, pensó entonces en alguien más, Jimin.
Los encontró en la sala mientras miraban el móvil y conversaban, de inmediato localizo al chico bajito y sin esperar lo buscó, Jimin tembló ligeramente cuando lo vio llegar de esa manera tan imponente. Se acomodó a su lado imitando un poco la misma posición del chico y así alcanzar su oído sin arriesgarse a que alguien más los escuchara.
—Jiminie...—comenzó ligeramente apenado de dudar de él. —Puedo preguntarte algo.
El rubio con gesto serio acepto solo moviendo la cabeza y miró de reojo a su hyung.
—Ayer que te quedaste con Emma, ustedes...es decir...—trataba de buscar las palabras, — tu y ella...son amigos ahora cierto.
Jimin dejo salir su ya característica sonrisa tímida con la que sus ojos parecían desaparecer. —Emma es agradable, si creo que ahora es mi amiga, por qué lo dices hyung, sé que ella es tu maquillista pero no le veo lo malo en ser solo amigos.
—No me importa eso ahora Jimin, solo quiero saber si tienes su número de móvil.
Jimin se rasco la cabeza pensando, no se le hubiera ocurrido que NamJoon buscará el número que por desgracia tampoco tenía.
—Pero podrías encontrarlo por Internet — agregó —busca en sus redes sociales.
—Crees que tenga.
—Nada perdemos con averiguar.
Saco el móvil y comenzó a teclear. —Conoces su nombre completo.
Ambos se miraron a los ojos para negar de inmediato.
—Entonces será más difícil de lo que pensé, por qué no solo bajamos y le preguntamos directamente ella no se negara.
—Lo hará estoy seguro que sí, Emma respeta demasiado bien las reglas.
Jimin torció la boca al pensar en que no tendría que ser así después de todo ya eran adultos y con bastantes influencias como para que se les permitiera hacer algunas cosas como por ejemplo hablar con chicas, estaban ya en edad de salir con alguien, de enamorarse y pensar en ese futuro del que no se habían preocupado antes.
—Lo conseguiré sí quieres —dijo seguro.
—No quiero problemas ni para ti ni para ella, no sería bueno para nadie.
—Solo confía en mi, nadie se enterara de nada soy muy discreto ya deberías de saberlo.
Nam sonrió dejando ver sus hoyuelos, se sentía más seguro sabiendo que Jimin no le interesaba a Emma, pensaba en que le vendría bien un aliado con el que conversar, Jin lo juzgaría le haría ver el lodo en el río, por primera vez solo quería arriesgarse, sentía que necesitaba esa clase de aventura en su vida y deseaba que fuera con Emma pues ella logró despertar en él ese interés interior que había mantenido oculto por años, era el momento de dejarlo salir, necesitaba hacerlo.