Las vacaciones de verano por fin han terminado, realmente esto no importa mucho ya que no realice actividades divertidas. Comí, dormí, vi televisión, escuché música y ayudé con las labores del hogar, eso fue lo único que hice todos y cada uno de los días de mis aburridas vacaciones, pero por fin todo eso termino y mañana será mi primer día de clases del último año que me queda en esta escuela.
Normalmente no le tomo mucha importancia a lo que pasará durante un nuevo ciclo escolar, pero éste año me siento diferente ya que no puedo dejar de pensar que al terminar ya estaré en la secundaria, en una nueva escuela, con nuevos compañeros y nuevos maestros, lo cual es algo que me está matando porque a pesar de no hablarles a todos mis compañeros, pensar que hemos convivido seis años juntos es algo que me trae muchos recuerdos.
Bueno realmente no estuve seis años junto a ellos ya que al pasar a segundo grado me cambiaron de escuela porque mi padre consiguió un buen trabajo, el cual nos hizo mudarnos de casa y que a mí me cambiarán de escuela, dejando a todos mis amigos, al principio estaba muy triste, pero por más raro que parezca considero que fue lo mejor que me pudo haber pasado, porque así conocí a mi mejor amiga Audrey.
Ella y yo nos conocimos cuando teníamos 9 años, yo era la “niña nueva” así que se ofreció a mostrarme la escuela, después comenzamos a platicar y nos dimos cuenta que teníamos muchas cosas en común, desde ese momento sentí una conexión especial con ella y nos volvimos mejores amigas, pero todo eso terminará cuando entremos a la secundaria ya que no estaremos juntas porque iremos a escuelas diferentes.
Los padres de Audrey quieren que ella vaya a una secundaria que siempre ha tenido mala reputación y mis padres quieren que yo asista a una secundaria que es considerada como la mejor de toda la ciudad ya que tiene fama de aplicar mucha disciplina y ser muy estricta con los estudiantes.
Mis padres siempre se han preocupado mucho por mi historial académico, es por eso que quieren que asista a las mejores escuelas y la secundaria no es la excepción.