18

Narra Julio.

—Cómo que no me ayudaras con la dirección del campo ese de entrenamiento—dije un poco molesto con Alex.

—Ya te dije, antes quiero que me ayudes con un favor—dijo Alex con una voz un poco traviesa.

—Ni se te ocurra, yo ya me conozco ese tipo de tratos—le dije mucho más molesto.

Alex solo se cruzó de brazos y viro la cara, la verdad es que no entiendo porque todas las personas que conozco son así, primero Leo, después Susie y ahora esta maldita inútil, pero que tengo yo, si soy el ser más horrible del universo, ni siquiera merezco estar vivo.

—Está bien, si no quieres hacer eso, entonces creo que hay otra opción—dijo Alex y me dijo que me acercara a ella porque me tenía que susurrar el trato.

Escuche con atención cada tramo del trato, desde el principio ya se escuchaba mal; pero, porque Alex pensaría en estas cosas, no hay necesidad de hacerlo.

—Cómo, claro que no, de hecho, prefiero hacer el otro trato antes que arrebatarle la vida a otra persona—dije un poco molesto.

—Sabes que, ya me cansaste, solo te voy a ayudar porque me caes bien, pero te digo una cosa—dijo un poco tranquila—La muerte de esta persona se va a dar si o si—dijo mientras que sus ojos cambiaban de color a rojo por un minúsculo instante.

A mí como siempre no me importo y seguí con mi camino mientras que Alex me seguía desde atrás.

Justo en el momento en el que no supe a donde ir Alex me “ayudo” y me agarro de la mano para guiarme dentro de un parque y me enseño una estatua. En la estatua se podía ver como yo estaba en una posición heroica mientras que pisaba la cabeza de Jasón y también había unas pequeñas figuras que creo que son José y los demás luchando contra otros monstruos.

—Esto lo hizo mi padre, ya que supuso que nadie te había agradecido como tú te lo mereces—dijo Alex mirándome a los ojos y sonriéndome con su hermosa sonrisa.

—Si como sea, por lo menos ya tengo algo que decirle cuando lo vea—dije como si nada hubiera pasado.

La verdad me sentía muy lleno, ya que por fin alguien hace un bonito detalle para mí; pero, porque, en verdad me lo merezco, ósea salvar al mundo es algo que cualquier persona puede hacer, no soy especial, solo soy alguien más entre una infinidad de personas.

Alex me saco de ahí un poco molesta conmigo y de una se dirigió a las afueras del reino y como era de esperarse no pude ver nada gracias a que las bancas me tapaban la visión.

—Quieres que te ayude ampliando tu alcance auditivo—dijo Mark desde mi cabeza.

—No sé lo que quieres decir, pero tú solo hazlo—le dije tranquilamente.

Después de esos segundos empecé a escuchar cosas que decían a por lo menos 1 km y entre lo que escuche pude oír a Leo y al parecer a Susie y escuche como Leo susurro esto “después de que termine contigo, estúpida dragona, acabare con todos los demás, así no quedaran más de los de tu raza” susurro como enfadado.

— ¿Escuchaste eso? —me pregunto Alex.

— ¿De qué hablas? —le pregunte.

No es posible que ella también lo haya escuchado, después de todo ella si es normal, se supone, pero, de todas formas, si es así se supone que ella también debería tener a una mutación dentro de ella, sin embargo, se la ve normal.

—Sé que lo escuchaste—dijo con una voz un poco dura—Vamos hay que ayudar a tu amiga—dijo, pero esta vez sonando valiente.

“Después de que te haya matado iré a por todos los tuyos y así aprenderán a no meterse conmigo” susurro Leo cada vez más molesto.

—Quieres que los detenga yo o lo harás tu—dijo Alex rápidamente mientras que se ponía a correr.

Yo no entendí lo que paso, pero mejor le dije que yo me ocuparía de todo.

—Julio, creo que es hora de que aprendas otro de tus nuevos poderes-dijo Mark arruinándome todo—Mira, primero localiza a tu objetivo, luego mete tus manos en la tierra y ya después te daré más indicaciones.

Por probar algo nuevo le hice caso a Mark, así que rodeé las bancas y ahí fue cuando vi a Leo, a Susie y a otro dragón más.

Pare de repente e hice lo mismo que dijo Mark, localice donde estaban los dos “ahora piensa en una estructura cualquiera” yo pensé rápidamente en una pared cualquiera y a continuación metí mis manos en la tierra “así no debilucho vuelve a meter tus manos con mayor intensidad” volví a hacer lo mismo, pero con mucha más fuerza “ahora concentra toda tu fuerza en la forma de la estructura que quieres crear” yo hice exactamente lo mismo, pero no servía, esto solo era una pérdida de tiempo.

Justo antes de retirar mis manos de la tierra veo como Leo está a punto de acuchillar a Susie en la cara y no sé qué fue lo que me paso, ya que de repente algo exploto dentro de mí y sentí como toda mi energía fluía por mi cuerpo hasta llegar a mis dedos, solo para ser desprendidos de ellos y meterse en la tierra.

Medio segundo después se había formado una pared oscura entre Susie y Leo, ambos se quedaron impresionados y yo no era la excepción, simplemente que sentía como se me quemaba todo mi cuerpo y de hecho hasta estaba saliendo humo de él.

— ¡Ni se te ocurra tocarlos! —le grite a Leo bastante enojado.

Leo se quedó petrificado, Susie simplemente se quedó confundida por lo que acababa de hacer y su curiosidad la llevo a casi tocar la pared oscura.

—Dile a Susie que no toque la pared oscura—dijo Mark en mi mente.

— ¡Susie ni se te ocurra tocar la pared! —le grite rápidamente.

Después de segundos por fin deshice la pared oscura y me fui acercando con una cara llena de furia, al estar cerca de ellos le tiré la espada a Leo y me puse mi hacha e la espalda.

—Tsss, pensé que al no vernos por 2 meses por fin dejarías de protegerme—dijo Susie a modo de burla.

—Cómo no hacerlo, no puedes estar un día sin meterte en un problema—le dije seriamente.

Susie parecía estar jugando conmigo; pero, yo simplemente estaba enojado con ambos, ya que siempre tenía que estar yo de por medio para que no se metan en un maldito problema.