Esta historia se la dedico a los lectores de «Un amor prohibido».
A los lectores que son Enya; que todavía no han encontrado su camino o su voz.
A los lectores que son Demián; que saben que una sonrisa cura todos los males, y que están dispuestos a compartir ese remedio con el mundo.
A los lectores que son Dalia; que tienen algo valioso, pero por miedo a un futuro incierto, ellos mismos terminan siendo la bruja de su cuento de hadas.
A los lectores que son Verne; que son perseverantes y luchan por lo que quieren.
A los lectores que son Nessa; que todavía no han aprendido que no puedes dejar que el pasado destruya tu futuro, o en este caso, a tus cercanos.
A los lectores que son Rowan; que son apoyo para quienquiera que lo necesite.
Gracias por darme esta oportunidad.
Los aprecia,
los quiere,
les reza,
Queen.