Capítulo 9

-Sólo dilo. -Dijo Sebastian.

Joel quería dejar salir las palabras de una vez por todas, y como la escuela no era un buen lugar porque Daniel y Aimé estaba cerca y podrían escuchar, la mejor opción era ir a casa de Sebastian después de la escuela.

-Siento que estoy traicionando a un amigo para hacer sentir mejor a otros. Daniel en ningún momento dijo que no dijera nada, así que no cuenta como traición, ¿Cierto? -Joel caminaba de un lado a otro en la habitación de Sebastian, mientras que este último sólo lo seguía con la mirada. -Trataré de decirlo de la mejor manera.

-De acuerdo, sólo hazlo de una vez por todas. -Habló Sebastian desesperado.

-Los chicos recibieron el mensaje, pero Daniel los borró de su celular y el de Aimé sin que ella se diera cuenta. Daniel sabía perfectamente que ese día era tu cumpleaños, pero fue egoísta y quiso estar todo el día con Aimé. Ellos tuvieran una cita durante todo el día.

Sebastian no sabía como sentirse. Se sentía un poco molesto y decepcionado con Daniel. Prefirió pasar el día con Aimé, con la chica que ambos querían. No le parecía justo que Daniel le hubiera impedido inconscientemente a Aimé que no fuera a su cumpleaños.

Aimé no tenía la culpa, pues ella creí que el mensaje nunca había llegado.

-No tiene caso enojarme por algo que ya pasó. Daniel hizo lo que creyó correcto para su propio beneficio, sabemos que es egoísta en ocasiones. Quería que Aimé estuviera ahí, pero... ya no importa.

-Yo estaba molesto con Daniel cuando me enteré, eso no fue de amigos. Aimé te gusta no era justo que Daniel la quisiera para el solo, pudieron haber venido después de su cita, no le costaba nada pasar un rato contigo, ¡era tu día!

-Está bien, las cosas ya pasaron, solo hay que olvidarlas. -Dijo Sebastian con voz tranquila.

Joel solo negó con la cabeza. Para Joel, nada estaba bien. No le parecía justo nada de lo que Daniel estaba haciendo para obtener amor y atención de Aimé.

Aimé estaba con un chico que hacia todo para poder quedarse con algo sin importar lo si alguien salía lastimado.

Daniel era un chico bueno, pero cuando se tratabas de cosas que le convenían, hacia las cosas con trampa.

Después de que Joel se fuera a su casa, Sebastian pensó en todo lo que había conversado con su amigo. Joel creyó que decirle a Sebastian era lo correcto, y tal vez si lo era, pero Sebastian también pensaba que hubiera sido mejor no enterarse, de igual manera, las cosas ya habían pasado y no podía hacer nada para poder cambiarlo.

-¿Sabes que es genial?

Le preguntó Daniel a Sebastian al día siguiente cuando se encontraban solos en el descanso de clases.

-¿Qué cosa?

-Tu y yo somos amigos y los mejores. -Dijo Daniel sonriendo. -Aimé, mi chica y Gabriela son amigas, eso es genial, somos el mejor grupo de parejas.

Sebastian rodó los ojos al escuchar aquellas palabras.

-Si claro, es genial. -Sebastian observa a Daniel. -Si tu lo dices.

-¿Te pasa algo? -Cuestiona Daniel confundido por la actitud de su amigo.

Sebastian se puso de pie.

-Espero que seas honesto con Aimé.

-Por supuesto que lo soy. -Responde de forma obvia. -¿A que viene todo esto?

-Sólo lo digo porque no quiero que ella sufra por culpa tuya.

-¿Por qué iba a sufrir? -Pregunta Daniel confundido poniéndose de pie al igual que Sebastian. -No le haré daño, parece que no me conoces, Sebastian.

-Eso espero, pero si algo le pasa...

-¿Pero que demonios dices? ¡No le pasará nada estando conmigo!

-Eso es lo que me preocupa, que está contigo.

-¡¿Qué insinúas?! Hablas como si Aimé te gustara, ¿Ella te gusta?

Sebastian se mostró nervioso pero supo como ocultar su sentir. Aquello se había salido de control totalmente. Sebastian no quería que las cosas salieran así. Daniel al igual que Sebastian, se había puesto nervioso porque no quería escuchar que Sebastian confirmara su atracción por Aimé.

-No digas tonterías, es algo que incluso Joel pudiera decir, el también se preocupa por Aimé.

-Si, pero resulta que me lo estás diciendo tu, no Joel. -Daniel responde algo molesto.

-Olvídalo.

Sebastian estaba dispuesto a irse, pero Daniel lo tomó por el hombro para detenerlo y hablarle antes de que se fuera.

-No respondiste a mi pregunta. -Daniel observa a Sebastian. -¿Ella te gusta?

Sebastian le sostuvo la mirada, pero no respondió. Cuando logró escaparse del agarre de Daniel, se dio la vuelta para alejarse.

A Daniel le molestó que Sebastian no le respondiera, pues su silencio fue una respuesta, y esa respuesta no le gustó a Daniel, ya que sus sospechas de que Sebastian sentía algo por Aimé se habían confirmado en el momento en que Sebastian se había ido sin responder.

Pero Daniel no se sentía del todo mal, al contrario el saber que a Sebastian le gustaba Aimé, le alegró, pues ahora podría restregarle en la cara que Aimé era su novia.