Capítulo 3: Reglas del Juego

Narrador

Dos días después de su encuentro en el mercado, Emma y Lucas se reúnen en un pequeño café en Valkenburg, famoso por sus tartas de vlaai y su ambiente acogedor. La ciudad está decorada con luces cálidas que serpentean entre los edificios de piedra. Desde la ventana del café, se puede ver la entrada de las cuevas de Navidad, un famoso mercado subterráneo de la región.

Emma llega con un cuaderno en mano, decidida a establecer las reglas del "acuerdo". Lucas, por otro lado, parece más relajado, sentado con un espresso y su característico aire despreocupado.

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Emma:
Bien, si vamos a fingir ser pareja, necesitamos un plan. Algo creíble, pero lo suficientemente simple como para que no nos atrapen.

Lucas levanta una ceja y se inclina hacia atrás.
Lucas:
¿Atrapar? No estamos planeando un atraco, Emma. Es solo un poco de teatro navideño.

Emma:
Exacto. Y toda obra necesita un guion.

Saca su cuaderno y empieza a enumerar.
Emma:
Regla número uno: nada de demostraciones públicas de afecto innecesarias. Un beso rápido en la mejilla está bien, pero nada de... exageraciones.

Lucas sonríe, visiblemente entretenido.
Lucas:
¿Te refieres a nada de besos bajo el muérdago, a menos que sea obligatorio?

Emma le lanza una mirada fulminante.
Emma:
Exactamente. Regla número dos: mantenemos nuestras historias consistentes. ¿Cómo nos conocimos?

Lucas: (pensando por un momento)
En el mercado navideño. Yo compraba chocolate caliente, tú atacabas un oliebollen. Amor a primera vista.

Emma rueda los ojos, pero escribe la idea en el cuaderno.
Emma:
Bien, funciona. Y la última regla: esto termina después de Navidad. Nada de prolongarlo al Año Nuevo.

Lucas asiente con un leve encogimiento de hombros.
Lucas:
De acuerdo. Parece manejable.

Ambos estrechamos la mano nuevamente, sellando el plan. Pero justo cuando lo hacemos, la camarera nos deja dos trozos de vlaai de cereza con un guiño.
Camarera:
¡Un regalo de la casa para la pareja más linda del día!

Emma intenta protestar, pero Lucas interviene rápidamente.
Lucas:
Dank je wel. Es nuestro postre favorito.

Emma lo mira incrédula mientras la camarera se aleja.
Emma:
¿Postre favorito? No recuerdo haberlo incluido en el guion.

Lucas:

Improvisación, Emma. Vas a necesitar aprenderlo.