Un beso eterno

9) un beso bajo la lluvia

                   

 

                          Jenell Becher

 

 

me desperté por que el sol que estaba por la ventana me estaba dando Justo en la cara, abrí de a poco mis ojos y me levante de golpe de la cama cuando me di cuenta que no estaba en mi cuarto.  

 

Me asuste cuando me di cuenta que estaba completamente desnuda, acaso me emborraché y no me di cuanta, a mi lado no había nadie, me quede pensando unos segundos hasta que me acorde que anoche tuve relaciones con Darren. 

 

 

Oh no mi dios, por favor dime qué no lo hice, me levante de la cama y pude ver una pequeña mancha roja en la sabana, si definitivamente tuvimos relacione, Dios no puedo ni caminar, me duele todo, entro al baño que tiene en el cuarto, me lavo la cara y los dientes, si trague mi cepillo de dientes, siempre lo tengo en mi mochila, uno nunca sabe, me maquillo un poco y luego me cambio con la misma ropa de ayer.

 

Salgo del cuarto escaleras abajo, y voy directo a la cocina .  

 

— buenos días dormilona— me saludo Darren con un beso en la boca. 

 

— buenos días — me senté— qué hora es— le pregunte y él se fijo en el reloj que tenía en su muñeca. 

 

— las 9:20, como te sientes— Por suerte mis hermanos hoy no tienes clases y yo no voy a ir por que ya es tarde,  Darren me da mi desayuno. 

 

— Me duele todo y todavía tengo demasiado sueño— él suelta una pequeña carcajada. 

 

— Es normal que te duele, fue te primera ves, y es obvio que tengas sueño y te sientas cansada, ya que no te deje dormir casi nada y gaste todas tus energías— creo que ya me sonroje con solo pensar en lo que hicimos anoche. 

 

— si lo sé— susurre pero se que él  me escucho—si mi mamá se entera que tuve relaciones me mata— cuando me di cuenta de lo que dije me quise matar yo misma. 

 

— por que, ya eres grande— no todavía sigo siendo menor de edad, pero eso tú no lo sabes. 

 

— Si Pero ya sabes como son las madres con estas cosas— le dije y el asintió sin creerme. 

 

— bueno Gracias por todo pero ya me tengo que ir a casa— me levante agarre mis cosas le di un beso en sus labios y salí de la casa sin darle tiempo a que dijera algo. 

 

 

cuando llegue a casa deje la mochila en el sillón y fui a la cocina y me encontré con mi madre que cada día está mejorando un poco más, y eso es bueno, quiere decir que está venciendo al cancer. 

 

— Como está la madre más lindo de todo el universo— la abrace por detrás dejando un beso en su mejilla. 

 

— Que  son  estas horas de llegar a la casa señorita — dijo con enojo, creo que me olvide de avisarle a donde estaba, obviamente no le voy a decir que me quede en la casa de un chico. 

 

— me quede a dormir En la casa de una amiga— le dije y ella me miro sin créeme— te acuerdas de la chica que me consiguió trabajo— ella asintioa — bueno me quede en su casa — le sonreí con inocencia. 

 

— que sea la primera y última vez — dijo dándome un beso en la frente — solo espero que sigas siendo virgen o inocente— asenti y me fui.

 

Si supieran que ya no lo soy madre, ni virgen, ni inocente.

 

entre  a mi cuarto tiré la mochila en la cama y entre al baño para darme una corta ducha de 15 minutos. Me envolví una toalla en el cuerpo y otro más pequeña en la cabeza.  

 

busque la ropa que me iba a poner y la dejé en la cama. 

 

— pasa  mamá — dije sin mirar si es mi madre o mis hermanos. 

 

escucho como la puerta se cierra con llave, no le di importancia y después sentí unos fuertes brazos rodeando mi cintura.  Me sobresalte dándole una patada en su parte baja. 

 

— mierda, joder estás loca — esa voz, pero que hace aquí en mi casa. 

 

— Oh dios lo siento, pensé que era un delincuente violador — me acerque a él. 

 

—espera que me recupere de la patada— se levanto de apoco sin sacar sus manos de sus parte, esta pálido. 

 

— lo siento, por cierto que haces aquí, quien te dejo entrar y como sabes a donde vivo— por favor que no le aya abierto la puerta mi madre. Por qué voy a estar en varios problemas. 

 

— que vine a ver, y se todo de ti, y tú madre me abrió la puerta, por cierto le tuve que decir que soy tu novio para que me dejara subir a tu cuarto, tú madre me hizo un pequeño interrogatorio — hay no puede ser. 

 

—Sal de mi cuarto, después te mato ahora déjame cambiarme— el ignoro mis palabras y se recostó en mi cama mirándome con una sonrisa.

 

— por mi adelante, cámbiate tranquila, verte de nuevo desnudad sería mi recompensa por casi a verme dejado sin hijos — dijo pero está ves se levanto de la cama acercándose a mi .

 

— que haces — puse mis manos en su pecho para que no se acerque demasiado a mi. 

 

— te ves hermosa con esa toalla, pero te verías aun más hermosa sin ella — dicho y echo me quito la toalla dejándome completamente desnuda ante sus ojos.

 

me quita también la toalla de la cabezas dejando caer mi largo cabello sobre mis hombros. 

 

 

Beso mis labios en un beso desesperado pero pero al mismo tiempo delicado, agarre sus cabelloa entre mis dedos despeinándolo. 

 

— Jenell dice mamá que ya bajen que está el almuerzo — dijo  Tomas del otro lado de la puerta. 

 




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