No podía hacerlo, pero pedí media hora libre.
Ordenaste dos tazas de chocolate caliente. Disfrutaba verte contemplar las luces, y las canciones de aquel músico.
Pregunté si te gustaba la navidad, y solo sonreíste de oreja a oreja.
#18883 en Otros
#5486 en Relatos cortos
#29890 en Novela romántica
desamor, amor adolescente, tragedia dolor tristesa y nuevo comienzo
Editado: 26.07.2020