Nuestra historia comienza en una lejana ciudad del cual no dire el nombre para no equivocarme, en su habitación estaba la hermosa Karina Isabel Mendieta Villareal, cantándole a su amor oculto, ella lloraba porque sabia que panchito jose solo la miraba como una amiga.
Ella en su tristeza, cantaba “El hombre que yo amo”…
♫♫ El hombre que yo amo tiene
Algo de niño,
La sonrisa ancha, tierna
La mirada
Tiene la palabra de mil
Hombres juntos
Y es mi loco amante, sabio,
Inteligente
El hombre que yo amo
No le teme a nada,
Pero cuando ama lo
Estremece todo.... ♫♫
A la habitación llega Mar y sol, dos hermanitas gemelas, quien también suspiraban de amor por Francisco José Antonio solis, pero lo que no sabian ambas que las dos estaban enamoradas del mismo hombre además que era un amor imposible.
─ ¿A quien le cantas? ─ interrumpio una de ella a la hermosa chapina, ella con pena y temor de ser descubierta solo dijo: "A nadie en especial yo solo le canto al amor…"
─ No te hagas chica, tu le cantas a un hombre, dinos ¿y como es él?, en que lugar se enamoro de ti.
─ tu estas loca ─ respondio chapina ─ yo solo canto a la luna
─ Eureka…─ respondio mar ─ tu esta enamorada de Francisco José, no lo niegues desde que entramos a la academia estas enamorada de el.
─ Imposible, no puede ser ─ contesto Sol, alterada ─ No me digas que tu también caíste bajo sus embrujos de amor.
─ No, es yo…─ chapina callo por un instante, porque en ese momento sono el celular
Ring ring…miro la pantalla del mismo y era su mejor amigo Francisco Jose Antonio Solis, el hombre que amaba con una locura desenfrenada...al unico que deseaba que le correspondiera.
─ No vas a contestar ─ dijeron las gemelas al unísono
─ No, estoy enojada con él─ respondió pero en su pensamiento una voz decia "es que yo no tengo el valor para decirle que lo amo”.
─ ¡Amiga!...entonces nos diras de quien estas enamorada ─ quizo saber Mar
─ ya dije, que no estoy enamorada de nadie, en mi vida no hay nadie especial, son imaginación de ustedes
─ ajá, dirás misa, pero se te nota Karina...no puedes negarlo.
Ante la existencia de las chicas, Karina quizó disimular que ellas tenia verdad. ella estaba perdidamente enamorada de Francisco José Antonio Solis desde que lo conoció, habia tenido una larga amistad desde que era unos niños.
Aunque al principio se llevaban mal, pero el día que Chapina, escucho a Francisco José cantar, desde entonces sintió como el corazón le golpeaba al mil por horas, y sentia un revoltar en el estomago como maripositas saliendo de sus crisalidas.
Editado: 25.03.2022