Un contrato de amor

Capitulo 13

15 minutos después ella está dormida en la cama, el médico le puso un calmante diciendo que no podía volver a tener un ataque, Julián llamo a su padre y es cuando me doy cuenta de que el anfitrión de la noche anterior es su padre, el hombre entra y al verla su cara es de preocupación y salimos para que tenga privacidad.
- ¿Estás bien? – siento el olor de Julián y me alejo – Samantha
- ¿Qué fue eso?- él agarra el primer pantalón que ve – esa muj…- niego pasando la mano por mi cabello- ¿Qué lo hiciste?
- ella es una paciente psiquiátrica – intenta acercarse, pero lo esquivó – Sam
- ella se sometió – lo miro fijamente – ese es el tipo de mujer que te gusta- suspiró – necesito caminar.
Tomo mi teléfono y salgo del cuarto prácticamente corriendo, estoy viendo cosas que no me gustan y no sé si podré lidiar con eso, una mujer loca por mi marido que lo ve como un dios y él la puede someter
El mar me relaja las olas, los niños jugando las personas siendo felices.
Que va hacer de mi vida con el.
- Sam – giro encontrando a Brandon – hola, que lindo volver a verte – sonrió y deja un beso en mi mejilla.
- ¿Dónde está el rabioso?
- No sé – él me mira un momento y luego sonríe
- ven conmigo – toma mi mano y prácticamente me arrastra.
Caminamos asta la orilla donde se encuentra una moto de agua, se sube y me ayuda a subir, sonrió feliz sintiendo el agua, mojar mi ropa, a lo lejos veo un yate donde nos espera un hombre que me ayuda a subir.
— ¿Te gusta? – sonrió mirando el agua – ven te enseñaré a navegar.
Estira su mano, pero no la tomo, él se da cuanta que miro hacia la orilla
— Te traeré antes del anochecer, no enterara.
Va a matarme si se entera.
=Julián Palacios=
Samantha se fue hace horas y no aparece, sus ojos verdes me miraban con una mezcla de asco y duda, nunca pensé que me causaría una gran molestia, Luis la está buscando pero nada.
— No, señor, pareciera que se la trago la tierra – miro la vista - ¿Qué hago?
— Nada ve a descansar.
Tomo el trago, estoy en el bar desde hace rato tomando y esperando que mi esposa se haga presente.
— Querido – levanto la cabeza y veo a Lorena en traje de baño frente de mí.
Es tarde para escapar.
— ¿Me invita un trago? – hace pucheros y se acomoda la parte de arriba de su bañador – te gusta?
Siempre ha tenido un cuerpo hermoso y bien distribuido, pero nada es natural. En cambio, Sam es natural y perfecta. ¿Por qué pienso en ella?
Te trae loco.
Suspiro bajando la cabeza y mirando mi teléfono una vez más la he llamado demasiado y no responde ninguna
— Juli – chilla saltando – me estás ignorando
— Perdón Lorena, estoy esperando a mi mujer – se le borra la sonrisa
— ¿Por qué te casaste con ella? – se acerca demasiado y lleva su mano a mi pecho, pero la quito— ella no te merece, jamás podrá darte lo que yo.
— No necesito solo sexo Lorena, esa mujer me hace feliz – qué gran mentira, bueno… — estoy enamorado y te voy a pedir que respetes mi matrimonio y mantenga tu distancia
Me alejo y dejo un billete en la barra para la chica, camino por la zona de la alberca hasta llegar a la playa, miro a todos lados por si ella aparece.
Estoy demasiado estresado y preocupado, no tenerla en mi radar me afecta, le pudo pasar algo grave y no es capaz de llamarme.
O puede encontrar a alguien y…
Después de caminar hasta la playa que tanto quería visitar y no encontrarla, volví al cuarto para entrarlo vacío y todo está como lo dejamos.
— Marcos.
— Jefe, ¿Cómo te está llevando? ¿Ya consumaste el matrimonio?— ruedo los ojos
— Lorena está aquí
— Noooo, ¿Sam la vio?
— La vio, presenció uno de sus ataques y se fue
— Supongo que no han consumado el matrimonio ¿Entonces?
— Marcos— gruño
— No te pongas rabioso – ríe y aprieto mi teléfono - ¿Dónde está ahora?
— Te estoy diciendo que se fue.
— Te abandono – abro mis ojos y es cuando me doy cuenta.
— Ella me dejó – eso duele no lo negaré
— Ya volverá, no puede vivir sin ti – ríe a carcajadas – jefe.
— ¿Qué?
— Es un nuevo favorito entre los miembros, y la gente ve a Sam como algo bueno
— Algo bueno - repito.
— Lo dejo yo si tendré acción esta noche.
Se carcajea y corta, maldito Marcos siempre sale con algo, dejo el teléfono y me acuesto a esperar que mi hermosa mujer se digne a volver y darme una explicación.




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