Capitulo 41

La suelto, no por gusto, ella va volverá a mí, ella me ama como yo la amo desde que soy un adolescente, mi gran amor no se irá muy lejos, pero tengo que estar bien para cuando eso suceda.

— ¿Por qué no firmas el divorcio?— suspiro mirando hacia donde se ha ido – amor, déjala y podremos volver a estar juntos

— No me toques – grito – tú y yo no vamos a estar juntos nunca y jamás voy a firmar esos papeles, ahora lárgate

—Samantha jamás volverá, es muy orgullosa– sonríe – estaré esperando por ti cuando te des cuenta.

Narra Samantha

Él la llamó, mientras yo estoy destrozada, él está teniendo sexo con la mujer que me juro que jamás buscaría, pero no se porque me sorprende si todos los hombres son iguales

— Sam —Wilmer está enfrente de la puerta de mis padre – hola

— Hola Wilmer ¿Qué te trae por aquí?

— No sé de ti hace días, estaba preocupado – me limpia una lágrima y me acerca – ahora se que no estás bien.

— Como estarlo – me tiró en sus brazos y él me recibe con gusto y él se ha vuelto un gran apoyo – todo está mal

— Me tienes para cualquier cosa que necesites ya sea mínima— me alejo y limpio mis lágrimas

— Gracias, solo es una mala semana— él me regala una sonrisa - ¿Quieres pasar?

— No quiero molestar

— No lo haces tranquilo, mis padres se fueron esta mañana, según ellos necesitaban días a solas

— Me imagino que fueron días de locos – asiento - ¿Lo viste?

— Si hace un rato fui a terminar mi trabajo.

— Me imagino que no fue fácil, contando que está con Lorena-giro inconscientemente

— ¿Cómo sabes de Lorena?

— Mi mamá y la de ella son grandes amigas, ella mencionó que Julián fue a buscarla borracho la otra noche y desde ese día no volvió a casa – mi corazón se vuelve a romper— perdón no debí

— Tranquilo está bien, los vi juntos – le entrego la taza de café— ¿Cuándo te vas?

— Esta noche, pero no me gustaría dejarte sola

— Por mí no te preocupes, yo voy a estar bien siempre lo estoy

— De igual manera— mira su café – si te propongo venir conmigo ¿Cuál sería tu respuesta?

— Qué gracias, pero tengo mucho que hacer todavía aquí, mi trabajo con las familias no ha terminado

— Me lo imaginé – sonríe – eres demasiado buena Sam, es lo que me gusta de ti.