2/ No te vallas de mi vida

Pov Justin

Recibí una llamada de Karen, diciéndome que Thais se iba a suicidar, pensé que era una broma, pero resulto ser cierto, subí a mi auto y conduje al edificio donde nos conocimos, todavía recuerdo aquel día.

Flashback

-Hoy es un día loco ¿no?, Karen—llame a mi mejor amiga.

- ¿Qué dijiste? —es enserio, no me escucho.

-Olvídalo, da igual—salí del lugar a toda prisa.

-Espérame, Justin—escuché a Karen hablarme, pero no le hice caso--¡¡cuidado¡¡

- ¿Qué dijist...? —no termine la pregunta porque me choque con una chica—l-lo siento, discúlpame.

- ¿Qué te pasa idiota?, me derramaste el jugo en el vestido.

-No era mi intención—conteste con sinceridad.

-Al fin te alcance—dijo Karen uniéndose a la 'conversación'--¿Qué te paso? —preguntó a la chica.

-Lo que paso fue que tú 'amiguito' me hecho jugo.

-Vamos a limpiarte, por cierto, mi nombre es Karen y el de mi amigo es Justin.

-Mucho gusto Karen, mi nombre en Thais—camino con Karen hasta su auto, lo único que pude hacer es seguir a las dos chicas.

-Ten—dijo Karen extendiéndole un vestido que traía en su auto—otro día me lo devuelves—le dedico una de sus sonrisas.

-Gracias—Thais se dirigió al baño, se quedó allí por unos minutos y salió como nueva--¿Cómo me veo? —pregunto.

-Preciosa—dije embobado ante su belleza—eh...te queda bien—dije rectificando lo antes dicho.

-Gracias—contesto sonrojada.

-Ya tortolitos, se nos va a pasar la fiesta—le dedique una mirada asesina a Karen.

Desde ese día comenzó una gran amistad, que ahora estoy intentando salvar.

Fin Flashback

Debo salvarla...llegue al edificio y aparque el carro. Vi a Karen en la entrada de este.

- ¿Dónde está? —pregunte ella solo lloraba, a veces es muy sentimental.

-Está en la terraza—contesto con lágrimas en los ojos.

-Corre, vamos—el guardia se interpuso entre nosotros.

- ¿A dónde se dirigen?

-Mire es una emergencia, mi amiga se va a suicidar, déjenos pasar—dije lo más rápido posible, este solo se hizo a un lado y nos dejó pasar. Tomamos el ascensor, las escaleras son muchas.

Llegamos y la vi parada en la cornisa levantando sus brazos.

-Te quiero, nunca pero nunca lo olvides.

-¡¡Thais no lo hagas¡¡--grite con desesperación

-Al fin voy a poder reunirme contigo hermano—hablo y salto, rápidamente corrí y logré cogerla-Thais quédate—dije y Karen pego un grito. Thais se golpeó la cabeza con la cornisa.

-Sabes...al fin lo voy a poder ver...después de tantos años—sus ojos se estaban cerrando. La jalé y la puse en el piso.

-¡¡Thais¡¡--movía su cabeza, pero no reaccionaba.

-Nunca lo olvides...te quiero—cerro sus ojos, en ese momento sentí como mi corazón se partió en mil pedazos.

-¡¡Karen llama a una ambulancia¡¡--le grite a Karen—quédate con nosotros Thais, por favor—le suplicaba, todavía salía sangre. Escuche unas patrullas—Thais te vas a salvar me oíste, por favor quédate con nosotros—decía entre lágrimas.

Los doctores se llevaron a Thais, Karen solo lloraba, mi corazón se desmoronaba y yo no soportaba la situación. Sentía que mi cabeza iba a explotar, tantas cosas en un día me ponen peor, mi cabeza no paraba de dar vueltas.

-Se siente bien—pregunto una enfermera.

-No—dije y me desmayé.

(...)

Desperté, miré a mi alrededor, esta no era mi habitación.

- ¿Cuándo se podrá ir? —dijo una voz conocida.

-Cuando despierte, pero recuerde debe estar en reposo, ha estado expuesto a mucho estrés.

Mire a Karen anonadado.

-La dejo, recuerde lo que le dije—dicho esto el doctor salió y Karen camino hacia a mí.

- ¿Qué me paso? —pregunte.

-Te desmayaste—los recuerdos de lo sucedido invadieron mi mente—al parecer ya lo recordaste.

- ¿Cómo esta ella?

-Bien...sufrió una ruptura en el cráneo y...--hasta allí hablo.

- ¿Y qué? Karen respóndeme.

-No nos...r-recuerda—abrí mis ojos.

-¿Que? Sé más específica, ¿a quién no recuerda?

-A n-nosotros—lagrimas salieron de sus ojos y salió corriendo de la habitación.

Perdió la memoria, me levante de la cama y me cambie con mi ropa antigua. Salí sin que nadie me viera y fui a preguntarle a una enfermera la habitación de Thais.

-Habitación 45, es en este pasillo.

-Ok señorita, gracias.

-De nada guapo.

Busque la habitación número 45, la encontré y verifique que nadie estuviera. Entre con cuidado y cautela, la vi allí...acostada en esa cama sin un recuerdo de mi o de Karen. Se movió un poco y me asuste. Me miro extraña.

- ¿Quién eres tú? —porque tuvo que hacer esa pregunta.

-Yo... ¿no me recuerdas? —pregunte, casi al punto de llorar.

-¡¡Tu¡¡ ¡Lárgate de aquí ¡

-Q-que ¿Por qué gritas? —la puerta se abrió y el doctor me miro extrañado.

-Joven ¿Qué hace aquí?

-Hubo un mal entendido—le hable al doctor--¿Por qué no recuerda nada? ¿Por qué no me recuerda a mí?

-Su amiga no se lo explico, ella sufri...

-¡¡Sáquelo de aquí¡¡ ¡El me quiso tirar de un edificio ¡

-Es mejor que hablemos afuera.

-Está bien—salimos.

-La señorita no recuerda nada porque sufrió una ruptura en el cráneo.

- ¿Por qué me acusa a mí?

-Como usted la salvo, ella confundió los hechos y piensa que usted fue quien el arrojo del edificio.

- ¿Cuándo podrá recuperar la memoria?

-No podemos definir una fecha.

-No lo comprendo.

-Usted de casualidad no sabe ¿Por qué se quiso suicidar?

-Mi amiga Karen puede darle esa información, yo no sé nada, lo único que hice fue salvarla.