La loca
Ella quizá está loca
es que enfrentarse a los monstruos cuando valentía tiene muy poca,
tuvo muy poca valentía para decir lo que guardaba su boca
entra, sale de universos, vive o muere según le provoca
¡eso sólo lo hace una loca! ...
Ella su alma entera entre tus manos coloca
como si cuando esta se rompa fuese muy fácil conseguir otra
quizá por eso está tan rota
y cada pedazo por ahí flota
y se dispersan cuando el mundo rota,
esto de alguna manera la transporta
al pasado donde quizá no había cicatrices debajo de la ropa,
a ese universo donde está lo que pudo ser y que ya no importa,
a ese universo donde está el personaje que ella tanto ama, pero que no ve ni toca
porque quizá ella está rota
y por sus grietas un río de palabras brota
desde adentro como si fuese sangre que cae gota, a gota
como legado que deja, aunque a veces una hoja se quede corta;
así como la cantidad de velas para pedir deseos que están sobre la torta
porque la lista de deseos que tiene ¡esa si no corta!
ella desea, sueña y soporta...
y si no me entiendes, ¡qué importa!
¡Un cuerdo como tú no es nadie para juzgar a una loca por como se comporta!.
La verdadera historia
La historia no es como la llegaste a escuchar,
pues te cuento que estando encerrada la princesa aprendió a recitar, a resistir y luchar
y a ratos se le oía cantar o se oía el sonido de sus pasos al bailar
es como si el encierro no le pudiese afectar
es como si del encierro nunca quisiese escapar
La soledad la solía acompañar
la soledad, ¡esa que al principio llegas a odiar!
¡esa la que no te suele juzgar!
esa que después de un tiempo te termina por agradar...
Sin embargo cuando se sintió lista desde la ventana en los más alto de su torre decidió saltar,
al vacío, como si tuviese nada que arriesgar
cayendo en el lomo del dragón ese al que como "miedo" han decidido nombrar...
Ese que a ella siempre le dijeron que la iba a matar y condenar,
y aunque la hizo tambalear
ella en la noche oscura lo logró hipnotizar
a sus ojos fijos tuvo que mirar
y con calma cantar y recitar
Como diciéndole "si tu y yo somos amigos algo bueno puede pasar...
sólo debemos intentar";
así fue como montada en su dragón pudo volar
y a lo más alto de las estrellas pudo llegar
y la luna que tanto quería ella misma la pudo bajar...
como ves la historia no es como te la llegaron a contar,
ella no era una damisela en apuros que había que rescatar
tampoco era una princesa que esperaba que un príncipe sus dragones llegara a matar
Era una princesa de armas tomar
que había que escudar
y que seguía siendo princesa porque corona nunca dejó de usar
para conocer la magia nunca tuvo que a un sapo besar
y aunque no tuvo un príncipe una historia con un final feliz acabas de terminar.
Carta a la soledad
Querida soledad
ya sé que el que yo escriba es una novedad,