El orfanato

1

Mi nacimiento no fue el más lindo desde que nací mi madre no me quiso, no era como otras madres que no mas nacen ya quieren llevárselos a la casa, pero mi madre ni se preocupó por mí.

Crecí en un orfanato el nombre era winslow claw, durante fui creciendo me fueron contando en donde nací y quien era mi madre me dijeron; que cuando quisiera podría buscarla pero siempre les contestaba con un fuerte NO. Por mi mente siempre recorría un pensamiento muy oscuro el cual era “porque debería ver a mi madre si ella no me quiso verme cuando había nacido por eso contestaba con un NO.

Cuando comenzaban a contarme todo eso me sentía muy triste y con una furia en mi corazón que no sabía cómo quitarme ese dolor.

Un día salí al patio del orfanatorio vi unos insectos grandes, los aplaste con mi mano izquierda con un simple y pequeño golpe los insectos murieron, me sentía tan liberado, sentía por un momento que el odio que vivía en mi había desaparecido.

Un día antes de mi cumpleaños llego un hombre y una mujer me llevaron unos regalos que no me gustaron, solo hubo uno que me gusto era… un oso café con una bufanda amaba ese oso, era mi favorito hasta que…mis compañeros de cuarto se rieron mucho de mi oso que le quitaron la cabeza, mi oso quedo todo desecho me fui a llorar con lo que quedaba de mi oso, llore y llore que me dije a mi mismo ¿Por qué hacen que yo sufra, que les he hecho para no quererme, nunca he sido malo con ellos ni con nadie, yo nunca pedí nacer, me levante seque mis lágrimas y dije desde hoy nadie volverá a dañarme.

Es allí donde comienza mi locura nadie podía quitarme esos pensamientos de la cabeza, ellos siempre me acompañaron es mis momentos más tristes y más alegres.

Pasaron tres años desde lo ocurrido de mi oso, fue entonces cuando tenía 14 años había cambiado mucho con mi carácter ya no era el mismo de antes, el chico alegre ahora soy otra persona.

Como ya era un adolecente me enviaron a otro orfanatorio, uno para adolecente pero al llegar allí no sabía que mi vida iba a cambiar en un solo golpe.

Allí habían chicos diferentes, chicos con un cuerpo robusto, chicos lectores, chicos altos habían de todo tipo pero… me intrigo uno de cabello largo estaba bajo un árbol del orfanato, fui y le pregunte su nombre, levanto la cabeza y con unos ojos tristes me dijo ─ Raúl ─. Toco el timbre, y todos debíamos ir adentro, me adelante un poco pero Raúl no se movió le pregunte ¿oye, no vienes?, el me respondo con una vos suave ─si, solo que yo no entro ahorita─ me fui intrigado, del porque no se iba ahora.

Llegando al auditorio del orfanato nos colocaron en grupos de seis en un cuarto, me había tocado con Raúl por suerte lo conocía, creo que Raúl conocía el cuarto porque solo me voltio a ver y se fue como si no le interesaba la cena, lo seguí para saber a dónde iba o a qué, pero solo subió a la terraza y desde largo escuche como si estuviera hablando con alguien.