Un cuchillo sin filo

La terraza

2

Desde largo no se lograba ver o escuchar con quien hablaba, decidí acércame un poco escuche entre cortado unos murmullos, quede estupefacto al escuchar a Raúl decir que ya quería irse de este mundo, ya no aguantaba mas el dolor que sentía necesitaba hablar con alguien de lo que le ocurría, me quede intrigado tenía dos preguntas ¿porque pensaría eso él? y ¿con quién estaría hablando?

─ A la mañana siguiente ─ me acerque a Raúl con un poco de miedo, le pregunte ¿con quién hablabas anoche escuche unos murmullos en la terraza me acerque y eras tú, no sé con quién estabas hablando? El me contesto

Raúl ─lo sé, ya sabía que me estabas espiando te escuche subir las escaleras de la terraza─

Zigor ─lo siento, no quise…─

Raúl ─no te preocupes debería ser yo quien se disculpe, porque eres mi amigo y entre amigos no hay secretos por cierto… cómo te llamas no me has dicho tu nombre─

Zigor ─no les he dicho mi nombre a muchas personas, pues no les tengo confianza, pero tú eres mi amigo y los amigos no se guardan nada ¿cierto?...─

Raúl ─cierto─

Zigor ─Pues mi nombre es Zigor Castañeda ─

Raúl ─que bien, mi nombre completo es Raúl Arieta─.

Zigor ─ ¿dime con quien hablabas anoche?

Raúl ─ ¿qué te parece si hoy a las doce de la noche vamos a la terraza?, te mostrare algo─

Zigor ─ ok ─.

Raul se fue, pero… que me iba a mostrar, tenía un poco de pánico no sabía que iba hacer, pero soy muy curioso y necesitaba saber. El tiempo se me hacía muy largo, no podía esperar hasta las doce tenía que hacer que me iba a mostrar.

Llegaron las once y media Raúl me levanto, me dijo que ya era hora, subimos las gradas caudalosamente, me dijo que me quedara allí quieto que no hiciera ruido hice lo que me pidió él se fue un poco más adelante, no puede escuchar mucho lo que decía pero si escuche esto (te enseñare a una alma en pena, él se muestra alegre pero sé que no es cierto puedo notar en sus ojos lo triste que esta, total él está más triste que mí, creo que deberías de llevártelo a el mejor) me asuste demasiado de lo que había escuchado, estaba temblando decidí correr pero…

Raúl me dijo ─ a dónde vas Zigor ─ me quede parado con nervios le respondí ─no sé a quién rayos me quieres enseñar tengo miedo no sé quién eres o que eres, no sé qué me quieres hacer dime que quieres de mi ─ tristemente me respondió tartamudeando ─ solo quiero ayudarte no puedo ver a más gente que sufra, sé que tú no eres alegre solo ocultas lo que eres te quiero ayudar, por eso te trae aquí… déjame ayudarte por favor─ di un fuerte suspiro cerré los ojos y le dije como sabes que no soy alegre quien te dijo, fueron mis ex compañeros tú no sabes por lo que he pasado no puedes criticarme ─ Raúl me respondió con una sonrisa entre cortada de tristeza yo puedo ayudarte ─¿pero claro si tú quieres? ─claro que quiero que alguien me ayude hacer como era antes alegre pero no se cómo sacarme estos pensamiento necesito ayuda ¡ayúdame! ─ Claro que te ayudare ─ nos dimos un fuerte abrazo y le empecé a contar todo acerca de mi



#12714 en Thriller

En el texto hay: tristeza y dolor, alegria

Editado: 24.06.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.