Capítulo 17

  Ese día Karina observó como Leonardo recibía a unos hombres que trajeron unos objetos, como una cama, un colchón y un closet. Ella esperó a que se retiraran para conversar con él.

—¿Qué es todo esto? -pregunta ella sin comprender.

—Llevas días durmiendo incómoda en el sofá.

—No me molesta dormir en el sofá.

—Ya eres un huésped aquí y te quedarás por un tiempo -responde Leonardo. Ella estaba pagando alquiler, así que él piensa que debería tratarla como tal- Tengo una habitación desocupada. La puedes arreglar para ti.

—¿Para mí?

—Compré una cama y un closet.

—Gracias. No esperaba esto -responde Karina algo incómoda y feliz. No esperaba esa amabilidad por parte de él.

—Vamos a organizar tu habitación -la ánimo él. Ya llevaban días conviviendo y a pesar de lo extraño que fue todo, se han ido adaptando a vivir juntos.

  Karina sin problemas cargó el colchón sin ayuda. Leonardo se quedó viendo cargando unas tablas de la cama.

—Eres muy... fuerte.

—Los licantropos tenemos una fuerza superior a la de los humanos -responde ella con tranquilidad. Eso no era ningún peso para ella.

—Me doy de cuenta.

—Si tuvieras tu magia podrías usarla para mover las cosas.

—Eso sería muy útil la verdad -contesta Leonardo. Él ansiaba tener magia y usarla cuando lo necesite. Poder hacer todo lo que hace un brujo.

—¿Todavía no logras nada?

—Es más difícil de lo que pensé. Llevamos días haciendo varias cosas, pero nada resulta. Estoy totalmente agotado y creo que Patrick ya se está rindiendo conmigo.

—No creí que fuera tan difícil. Sé que los brujos aprenden a controlar su magia desde niños -responde Karina quien armaba la cama poniendo las tablas en su sitio.

—Eso mismo me dice Patrick. Él no entiende como es que me ha costado tanto. Yo ya estoy convencido de que existe la magia y que soy un brujo. Debería despertar mi poder.

—Te debe faltar algo más.

—¿Y a ti? ¿Tú tío no te ha informado nada? -le pregunta Leonardo cambiando el tema. El asunto de no poder despertar su magia ya lo tenía estresado.

—El clan Asha se ha alejado un poco de aquí, pero al parecer se han visto más dispersados. Parece que buscan algo.

—¿Serás tú?

—Es algo más importante -contesta Karina. Ella no representaba ningún peligro para el clan Asha- Yo sólo era una chica chismoseando entre sus cosas y no obtuve ninguna información. Ya ni se deben de acordar de mí. Puede que te libres de mí pronto.

—Realmente me agrada tu compañía -dice Leonardo avergonzándose y arrepintiendose de decirlo en voz alta.

—¿De verdad?

 Leonardo respondió incómodo —Desde hace años que no comparto mi hogar con alguien. Es agradable tener alguien con quien conversar, le guste limpiar y haga la comida cuando no quiera cocinar...

  Karina se sonrojó. No esperaba que a él le gustara su compañía ya que ella apareció allí y le obligó a dejarla quedarse. 

—¿Te agrada es que haga los quehaceres? -pregunta ella.

—También tu compañía, un momento ¿Dijiste el clan Asha? -pregunta él dándose cuenta de eso.

—Sí, hace rato ya ¿Los conoces?

—Ellos son los que asesinaron a mi tío -respondió Leonardo exaltado. No esperaba que ella estuviera siendo perseguida por ese mismo clan.

  Karina quedó sorprendida —¿Cómo? ¿Por qué no lo dijiste?

—Tú no me dijiste que era a ellos a quien investigabas.

—No esperaba que supieras algo. Ni tenías idea de este mundo -contestó ella alterada.

—Cierto -le da la razón. Él no tenía idea de que existiera la magia hasta hace muy poco, nadie imaginaría que supiera algo sobre los clanes- En el diario de memorias había una carta en donde decía que si moría lo más probable es que sea por el clan Asha.

—¿Me puedes mostrar la carta?

  Leonardo asintió con la cabeza y fueron hasta su habitación. De una gaveta en donde estaba el diario de memorias había un sobre. Se lo entregó a ella y lo leyó.

—Tu tío tenía lo que ellos buscaban, pero ¿Qué era? Tenemos que saber que dice el diario de memorias.

—Eso es lo que he intentado todos estos días sin éxito -él se encontraba decepcionado de sí mismo.

  Karina lo abraza de sorpresa —Por fin hay una pista segura.

  Ella estaba alegre y él sonrojado. Era la primera vez que estaban tan cerca uno del otro.

—Debes despertar tu magia. Esto es sumamente importante. El clan Asha busca algo que puede poner en peligro a la sociedad.

—¿Tan grave es?  -pregunta Leonardo. Patrick le contó sobre Armando, pero no imaginó que fuera tan peligroso.